Hoy era día de ir al parque para hacer unos videos de baile para mi canal, esperaba reunirme con mi amiga en el lugar y a último minuto me había cancelado, solo quedaba hacer todo por mi cuenta (gracias “mejor amiga”).
Había decidido que un overol largo negro y una camisa manga larga (con franjas de colores) pero con los hombros descubierto sería lo mejor, había días como esos, la actitud estaba de la mano con el atuendo; sin que el maquillaje fuera mucho más que allá de un labial y un poco de delineador en los ojos (tampoco podía lucirlos, mi miopía se oponía a ello) más un súper suéter grande para el frio de vuelta a casa (el cual estaba resguardado en mi hombro) cualquiera diría que era de mi novio, pero algo como eso no había, solo estaba ese gran anhelo por la ropa ancha.
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“martes 20 de diciembre y… aquí estamos, tratando de llegar a casa”, suspiro manteniendo mi celular bajo y mis ojos observando el camino, estaba tomando la peor ruta de camino a casa (la avenida principal con el rio a un lado) ya el sol se ocultaba detrás de mí.
“esperemos llegar rápido a ca—” me quedo con medio murmullo en mi garganta mientras observo como dos hombres del otro lado de la avenida cruzan justo a unos pies delante de mí.
“oye, porque tan sola?”, escuche sus voces alegres delante de mi mientras apuraba el paso y los dejaba atrás sin querer apagar la cámara, para mi mala suerte ya habían visto mi celular.
“¡espera! ¿porque no te acompañamos?”
Se me ocurre mirar atrás y estas personas ya estaban caminando a unos metros detrás de mí. Así que tuve que guardar mi celular y caminar más rápido, deseando que alguien estuviera cerca
Alguien… solo… alguien…
Uno de ellos comenzó a correr y sin querer volví a mirar atrás solo para seguir corriendo, tropezándome con la acera que daba directo hasta la orilla de camino al rio y con este un pequeño camino de piedra, rodé un poco por la pequeña bajada solo para seguir corriendo hasta llegar debajo de un pequeño puente el cual en una de sus paredes le habían colocado una pequeña puerta la cual estaba cerrada todo el tiempo.
¿Cómo lo sabía?
Pues había hecho una pequeña investigación casual con las personas que vivian desde hace mucho allí y los pequeños vendedores ambulantes que trabajaban desde muy temprano los cuales afirmaban que esa puerta solía llevarse personas o en su defecto dejar salir cosas de allí, mayormente animales o a veces sombras que se desvanecían, algunos rumoreaban que algunos indigentes ya no querían pasar por allí por el hecho de que se escuchaban cosas salir por ese lugar.
¿el misterio de ello?
La puerta, que muchos afirmaban ver algo, no era más que una fachada, una puerta que nadie sabe cómo apareció allí o porque razones la alcaldía la hizo, simplemente era una puerta, sin una salida, solo una puerta que no daba a ningún lugar.
Y justo en ese momento, el miedo me hizo ver más allá de mis gritos pidiendo ayuda haciéndome doler los pies con cada paso sin preocuparme por el golpeteo de mi pequeña bolsa en mi espalda. Un gato atigrado salía de esa puerta dejando la abierta.
Uno de los hombres no sabía cómo estaba esperando justo del otro lado del puente por lo que solo quedaba una opción; entre por esa pequeña puerta de madera y marco de acero oxidado cerrando fuertemente los ojos mientras sostenía la manija con fuerza, volviendo mis nudillos blandos en el proceso esperando que alguien me ayudara. que alguien. quien fuera…
“oye. ¡¿qué haces allí?!”, Una voz modulada me hizo abrir los ojos, dejando que sus pesados pasos a lo lejos se detuvieran.
“que… que esta—”, abrí los ojos lentamente acostumbrándome a la luz.
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Puerta a las estrellas
AdventureY/N está de camino a casa, lo que no se imagina es que acabará en un mundo en el cual la única salida es seguir el camino de la fuerza... pero el amor será el que la guíe.