[Finalizado] VOLVER A ANTES DEL DIVORCIO (Renacimiento)

CAPÍTULO 12: Exposición

     Temprano en la mañana, cuando Ling Xicheng abrió los ojos, Li Mo ya no estaba en la habitación. Mirando la hora, eran casi las 8 en punto, Ling Xicheng se levantó, se lavó y se cambió de ropa. El desayuno preparado por Li Mo se colocó en la mesa del comedor de abajo.

     —Dile a Lao Wang que ya no necesita recogerte para ir y venir del trabajo. En el futuro vayamos juntos, te llevaré -dijo Ling Xicheng, tomó uno de los bollos, empezó a comer.

     —Está bien —respondió Li Mo, tomó una taza de leche de soya y la puso frente a Ling Xicheng—. Agregué algunas nueces, puedes probarlo.

     —Bueno. Todavía es delicioso todo lo que cocinas.

Ling Xicheng tomó un sorbo, la fragancia pura de la soya se mezcló con algunos sabores de nuez, que parecían extraordinariamente cálidos esta mañana.

     —Está bien si te gusta.

     Sin decir una palabra, los dos se separaron en el estacionamiento subterráneo con sus maletines en mano. Ling Xicheng agarró a Li Mo, que corría hacia el ascensor, le robó un beso, y subió al ascensor exclusivo del CEO con una sonrisa.

      Cuando llegó a la oficina, Ling Xicheng primero llamó a la línea interna de Wenli y le pidió que viniera.

     —¿Revisaste ese número de teléfono ayer? —preguntó Ling Xicheng, le indicó a Wen Li que se sentara y hablará.

     —Bueno, lo encontré, pero no era de la secretaría, era de la oficina del gerente del departamento de diseño.

     Wenli le entregó el registro de las llamadas que recibió Li Mo en su extensión privada ayer. Entre ellos, las llamadas que recibió Li Mo durante el período en que Li Ziyu estuvo allí, las resaltó con líneas rojas.

     —¿Oficina del Gerente de Diseño?

     Ling Xicheng miró el número de cola de la extensión, de hecho era de la oficina del gerente del departamento de diseño, y se sintió un poco extraño de que Li Mo no pudiera reconocer la voz de la persona con la que se reunían todos los días.

     —No tiene que ser el gerente mismo. Recientemente, se agregó una nueva secretaria al departamento de diseño —dijo Wen Li, entregó un currículum-. Esto es todo.

     Ling Xicheng miró la foto en el currículum, era una mujer bonita, pero no tenía ninguna impresión de ella.

     —Wen Li, ¿Qué piensas sobre esto?

     —Siento que no puedo desligar esto de Li Ziyu.

     —¿Hay alguna razón para decirlo?

     Ling Xicheng sabía que Wen Li siempre estaba tranquilo, e incluso si no le gustaba Li Ziyu, no le arrojaría agua sucia deliberadamente.

     —El gerente de diseño ha agregado una gran cantidad de artículos personales recientemente —dijo Wen Li, no respondió directamente a la pregunta de Ling Xicheng, sino que mencionó un asunto que no parecía ser muy relevante.

     —¿Me estás insinuando que debo investigar sus recursos financieros?

     —Todo el mundo tiene mucha curiosidad por saber si el director del departamento de diseño ha ganado recientemente la lotería -respondió Wen Li, se encogió de hombros innegablemente.

     —¿Crees que es Li Ziyu...

     —No es imposible —respondió Wen Li afirmativamente.

     Además, la definición que tenía Ling Xicheng sobre Li Ziyu antes, era de un buen chico que trabajaba duro para progresar, pero ahora que lo piensa, este puede no ser el caso. Aunque la familia Li nunca reconoció la identidad de Li Ziyu ante el mundo exterior, nunca lo han tratado mal durante todos estos años.