No creo ir tan borracho como para estar alucinando.
¿Esa es...? No, ni de coña.
No me la imagino pasandoselo bien, siempre tiene esa cara de tener un palo metido por el culo y la chica que tanto se le parece que acaba de entrar por la puerta parece de todo menos la estirada de (T/N).
Dios, está buenísima.
Ese vestido definitivamente quedaría mucho mejor en el suelo de mi camarote, pero bueno, puesto tampoco le queda mal.
Veo que se acerca a la barra, no parece prestar atención a su alrededor, normal, ha sentido todas las miradas clavadas en ella y se ha sentido la abeja reina.
Egocéntrica.
Me gusta.
Mierda.
Sí que es ella.
¿Cómo cambia tanto una persona con y sin uniforme?
No puedo dejar de mirarla, pero sigue sin prestar atención a nadie hasta que se sienta y el camarero del bar ya está ahí antes de que ella le llame incluso, como un puto perro.
Aunque, para qué engañarnos, con cuatro copas más a mi también me tiene a sus pies así vestida.
Pide algo y le sonríe al camarero.
Wow.
Creo que nunca la he visto sonreír así, la duda de si es ella o no sigue intensificándose, no os voy a engañar, estoy alucinando.
Y entonces me mira y gira la cabeza de nuevo, y vuelve a girarse hacia mí abriendo los ojos como platos.
Vaya, parece que no pretendías que nos encontrásemos aquí, una pena que no te hayas preparado así para mí, la verdad.
Ya vuelve a tener la misma cara de oler a mierda de siempre, por el movimiento de las aletas de su nariz creo que acaba de resoplar molesta por mi presencia lo más probable.
Bueno, va siendo momento de acercarse a hablar con ella.
Me levanto del taburete en el que estaba sentado y veo como ella se echa el pelo hacia el lado por el que me estoy acercando, las barreras no te van a servir de nada conmigo, pequeña, me suda la polla que no quieras ni verme está noche, culpa al destino, no a mí.
-Cuanto tiempo. -digo sin obtener respuesta. -¿Quieres compañía? -le insisto en comenzar una conversación.
Ella bufa, qué harta debe de estar de mí, jajaja.
Voy a enervarla aún más.
Me siento a su lado y ella se gira un poco dándome la espalda, acerco más mi taburete a ella y le aparto el pelo detrás de la oreja recibiendo un manotazo por su parte.
Pero al menos, he conseguido que me haga caso.
Kid uno, (T/N) cero.
-¿Qué coño quieres? -me pregunta con su habitual tono cargado de asco hacia mi persona, pero, espera, ¿está ligeramente sonrojada? ¿Qué está pasando aquí?
-Te he visto sola y he pensado que querrías compañía. -le digo.
Y una mierda, es que con lo buena que está es como la luz para las moscas, es normal acercarse.
Además, si no lo hacía yo podría haber venido cualquier capullo desconocido a molestarla, mejor que sea uno que ya conoce.
El camarero le sirve su copa.
Vaya, whisky con hielo, te gusta ir duro, ¿eh? Interesante.
Pido otro para mí y me apoyo en la barra mientras que ella le da el primer trago al vaso.
Ni se ha inmutado la tía.
Qué fiera.
-¿Esta noche te han dado permiso para dejar de ser una aburrida perrita faldera de los almirantes? -quizá no es la mejor forma de empezar una conversación, pero he vuelto a conseguir que me mire, con asco, pero me mira.
-¿A ti nunca te dan permiso para dejar de ser gilipollas o qué? -me contesta, me encanta que saque las garras de esa forma.
-Nadie me tiene que dar permiso para serlo tampoco. -respondo.
Vaya mierda de respuesta, creo que me acabo de insultar yo solo, pero he conseguido que se ría, al fin, aunque sea a mi propia costa.
-Mira, Kid, no estoy de servicio, déjame en paz. -me pide en un tono más suave tras haberse reido por mi comentario.
-Por eso, ésta noche no somos enemigos, vamos a tomarnos una copa juntos. -le propongo mientras que el camarero me sirve mi whisky.
La alzo en su dirección y muevo el vaso haciendo resonar los hielos en éste, ella se gira y alza el suyo también.
-Mañana te pienso arrancar la cabeza de una puta vez. -me gruñe, ¿ya os he dicho que me encanta que se ponga así?
-Si eres capaz de pillarme, adelante, no opondré resistencia, solo por un día. -prometo dejándola a cuadros.
No termina de creerse lo que digo, normal, yo tampoco lo haría.
Chocamos nuestros vasos suave y después les damos un trago, me mira de reojo mientras bebo, no se fía para nada de mí.
-Puedes estar tranquila, yo tampoco estoy de servicio ésta noche, no tengo planeada ninguna matanza ni nada por el estilo. -digo intentando que se relaje.
Suelta una carcajada ante mi broma, al menos me alegra ver que no está tan tensa como cuando me ha visto.
Podría decirse que la noche promete.
-¿Acaso se deja alguna vez de ser pirata? -me pregunta, al fin accede a entablar conversación conmigo, ha sido más fácil de lo que me esperaba, la verdad.
-¿Y de ser marine? Pensaba que era vocación. -le pregunto de vuelta haciéndome el interesante.
-Es mi trabajo, tengo un horario y fuera de éste puedo hacer lo que quiera, pero un pirata siempre es un pirata. -me responde con la mirada fija en su vaso.
Touché.
-¿Por que decidiste ser pirata? -me pregunta siguiendo la conversación, creo que nunca había hablado tanto con ella sin ningún insulto de por medio.
-Crecí rodeado de injusticia y la gente como tú decidió no ayudarnos, éramos la última mierda para el gobierno por lo que tuve que tomar cartas en el asunto cuando me tocaron mucho los cojones. -le explico de forma escueta, no te adelantes a los acontecimientos, preciosa, para conocer más de mí primero vas a tener que abrirte tú, y no hablo de sentimientos ni de que me cuentes tu vida.
-Vaya mierda. -me contesta. ¿Y ya? ¿Eso es todo?
-¿Y tú por qué te metiste en La Marina? -le pregunto con curiosidad, por una vez no digo ese nombre de forma despectiva, es todo un logro para mí.
-Por lo mismo que tú, porque nadie me ayudó cuando me hizo falta contra escoria pirata como tú. -me acaba de insultar y me da totalmente igual.
Veo cómo se termina el whisky de un solo trago.
Tranquila, gatita, no quiero que la noche termine tan rápido como ha bajado el nivel del whisky en la botella.
Quiero conocerte más a fondo.
Mucho más a fondo.
ESTÁS LEYENDO
ɴᴀᴛᴜʀᴀʟ ʙᴏʀɴ ᴇɴᴇᴍɪᴇꜱ • Vol. 1 {Eustass Kid x Reader} [FINALIZADA]
FanfictionEustass "Captain" Kid, el infame pirata de "La peor generación", arrastrando a sus espaldas incontables bajas civiles es perseguido constantemente por una marine que pretende colgar su cabeza pelirroja en la proa de su barco para presidir con orgull...