Genshin Impact, Brisa a Través de Teyvat 『 1 』

Capítulo 30 - Intercambio de Información

"Ah, Dvalin... la angustia que siente lo ha hecho llorar... Alguna vez fue un niño tan bueno... Ahora tan lleno de rabia y sufrimiento..." Venti se llevó la mano al bolsillo y sacó una versión más pequeña del cristal carmesí. "También encontré una Lágrima de Cristal... ¿Puedes purificarlo por mí?"

Le entregó a Lumine el Cristal, y ella lo miró fijamente. Muy pronto, el cristal rojo resonó con algo dentro de ella y lentamente cambió de color, convirtiéndose en un tono azul más claro.

"¿¡Ehhhh!? ¡Cómo es eso posible! ¡Paimon nunca supo que tenías tal habilidad!"

Lumine negó con la cabeza y respondió: "Yo tampoco... Algo como esto es completamente nuevo para mí..."

Yomite simplemente se frotó las palmas de las manos. Había encontrado oro con ella.

Parecía que Lumine tenía otra trampa de protagonista. Estaba más que feliz por la adición. Cuantas más habilidades de trampa tuvieran sus compañeros de equipo, más fácil sería explorar y luchar contra monstruos. ¡Viva los trucos de los protagonistas de isekai!

Charles miró el extraño cristal en sus manos y susurró: "Creo que sería mejor para ti subir las escaleras, donde actualmente no hay nadie". Miró alrededor del pub, algunos hombres dormían profundamente en su escritorio y otros se reían a carcajadas mientras escuchaban las vergonzosas historias de sus camaradas.

"Cosas así deberían hablarse en privado, nunca se sabe quién está escuchando".

El grupo estuvo de acuerdo con su sugerencia y subió al segundo piso. A Yomite le costó un poco subir las escaleras, pero afortunadamente, logró hacerlo con éxito sin caerse.

"¿Y ahora qué?"

Lumine se pasó los dedos por el pelo y cerró los ojos. Sabía que el Gran Maestro Interino Jean le dijo que recopilara la mayor cantidad de información posible sobre Stormterror. "Creo que deberías responder algunas de nuestras preguntas, ¿No estás de acuerdo?" Miró a Venti y observó su reacción.

Venti asintió y respondió: "¡No hay problema! ¡Puedes preguntarme lo que quieras mientras estamos aquí!"

"Tch". Yomite chasqueó la lengua, cruzándose de brazos mientras apoyaba la espalda contra la puerta que daba al balcón. "Entonces, eres realmente un chico", dijo las palabras con su voz entrecortada, un aroma a alcohol saliendo de su boca.

Paimon se inclinó hacia Lumine y susurró: "Ugh... ¿Estamos seguros de que queremos a este borracho como nuestro líder? Parece bastante poco confiable. Paimon cree que los dos seremos suficientes".

Ella negó con la cabeza en respuesta, descansando su mirada en él, "Ya estamos registrados como parte de su equipo y, además, él podría ser una de las pocas personas con las que podría hablar sobre mí". Ella sonrió a medias, mostrando apenas sus dientes blancos perlados contra sus labios, traicionando su habitual fachada sin emociones.

Yomite era un extraño para ella, pero sentía que había hecho lo correcto al unirse a su grupo. Se sintió a gusto.

"Oye, puedo oírte... estoy justo aquí..."

Venti se rió entre dientes y respondió: "No me importa, no me importa... Sí, de hecho soy un niño. El recipiente de un niño".

Yomite suspiró después de su respuesta. Tan extraño como parecía ser la redacción de Venti en esa frase, parecía que Venti no estaba mintiendo.

"¡Oye! ¡Paimon también quiere preguntar algunas cosas!"

"¡Adelante, pequeño!"

*

**

***

Y así, el grupo intercambió información, principalmente sobre Dvalin y sus debilidades o tal vez algunas formas de convencerlo.

Veinte minutos después, se levantaron y bajaron las escaleras.

Cuando estaban a punto de irse, Charles detuvo a Yomite y le entregó otro trago: "Usa esto. Te refrescará la mente de inmediato. Gracias por ayudarme a deshacerme de esa botella de alcohol maldito. Esta la paga la casa".

Yomite agradeció a Charles y tomó un sorbo de la bebida. Sabía a puré de jugo de manzana, sumergido en unos cubitos de hielo extra frío.

Inmediatamente, su visión se enfocó y recuperó sus sentidos. La confusión dentro de su mente se había desvanecido, y no pudo evitar sentirse impresionado por la funcionalidad de esta bebida. Fue simplemente fenomenal.

Algo como esto se vendería en su viejo mundo como pan caliente.

Observó el título de la botella que se encontraba actualmente en la barra del bar frente a él, y decía Apple Cider. Un título aparentemente común para una bebida refrescante.

Charles luego explicó además que los clientes de la taberna local lo ordenaban a menudo como la última bebida de la noche, ya que se decía que tenía un fuerte efecto aleccionador. La gente lo llama la bebida Fast Rebirth.

"Ah, pero pensar que el Cyka Vodka terminó con la misma decepción que la última vez... que desafortunado..." Charles suspiró.

"¿Hm? ¿Qué quieres decir con eso?" Yomite sondeó.

"Bueno, en el pasado, existía este vino llamado Agua de Fuego. Los comerciantes de Snezhnayan lo trajeron a Mondstadt... pero el Maestro Diluc detuvo la distribución porque se desmayó durante tres días después de beber un solo vaso de dicho alcohol. , declarando que la gente de Mondstadt no podría manejar esto..." Charles sonrió para sí mismo tan pronto como recordó el estado en el que se encontraba el Maestro Diluc.

Acostado en la cama, paralizado. Las sirvientas estaban alborotadas y todos estaban en pánico, pensando que el fuerte, guapo, valiente, Maestro Diluc fue envenenado por los comerciantes de Snezhnayan. Fue realmente divertido.

Un hombre de múltiples identidades, el guardián de la noche, que se cae después de un vaso de alcohol.

"Interesante, siento que podría darle esta información a Kaeya, a cambio de algo valioso..." Yomite tenía un brillo maligno en los ojos. La personalidad de Kaeya estaba empezando a contagiárselo.

Charles mostró una pequeña sonrisa, "Qué malvado eres, pero recuerda, no lo escuchaste de mí. De todos modos, al Maestro Diluc no le gusta el alcohol, así que pensé que era solo él, que no estaba acostumbrado a beber. Pero, ¡vaya! , me equivoqué. Yo mismo estuve fuera por un tiempo después de probar ese vino... Nunca más voy a probar una bebida de Snezhnaya. Esta fue un fracaso al igual que el vino de Agua de Fuego..."

El grupo se rió de sus palabras y Yomite le entregó el pago por lo que bebió.

"Si no fuera por el hecho de que la botella de esa cosa cuesta tanto, ni siquiera te pediría a Mora, ya que me ayudaste, pero en el futuro, podrías pedir algunas bebidas gratis".

Se despidieron y Yomite y su grupo abandonaron la taberna muy animados.