Genshin Impact, Brisa a Través de Teyvat 『 1 』

Capítulo 52 - Historia Paralela de Lumine 1# - Miedo Inculcado

En algún lugar, cerca de las fronteras de Mondstadt.

En una enorme formación rocosa, parecida a la de una cueva.

Lumine se acostó de lado, mirando la lluvia mientras comenzaba a pensar.

Su hermano estuvo en su mente la mayor parte del tiempo, pero después de conocer a Paimon y entrar a la fiesta de Yomite, comenzó a pensar menos en eso y a vivir más el momento.

¿Dónde estaba su hermano de todos modos?

¿Quién era ese dios que se lo llevó?

¿Lo volverá a ver alguna vez?

Esperaba que algún día supiera la respuesta a todas esas preguntas.

Sin embargo, la pregunta actual era, ¿Yomite regresaría pronto con comida?

¿Y por qué Paimon estaba haciendo ruidos extraños?

"¿Paimon...?" Lumine movió lentamente la cabeza hacia Paimon.

La vio flotando alrededor de la chimenea, esperando que algo de comida apareciera mágicamente en su plato, con la boca abierta, babeando.

Paimon hizo extraños gruñidos bajos, casi como un zombi.

"Uhhh... ¿Paimon...? ¿Puedes dejar de hacer esos ruidos? Sé que tienes hambre, yo también, pero tenemos que esperar..."

"Paimon tiene hambre..." Paimon frunció el ceño mientras giraba la cabeza hacia Lumine.

Luego le mostró los dientes a Lumine e hizo movimientos de mordida, "¡Paimon quiere comida!"

Su ternura habitual no se veía por ninguna parte y, en cambio, una cara de hambre y malicia la reemplazó.

Lumine suspiró. "Yo también tengo hambre, Paimon, pero espera a que regrese el líder del grupo. Regresará pronto, lo sé. No nos dejará aquí. Confío en él.'

"¡Pero Paimon quiere comida ahora!" Paimon flotó hacia Lumine. "¡Paimon no puede esperar más!" De repente, dos pequeñas manos agarraron el antebrazo de Lumine y le hundieron los dientes en uno de sus dedos.

"¡Argh!" Lumine gritó de dolor.

Sacudió su dedo, tratando de sacarla, "¡Basta, Paimon! ¡No soy comida!"

Paimon mordió más fuerte mientras trataba de mantener su agarre. "Lumine... ¡Comida de emergencia!"

Eventualmente, después de un poco de lucha, Paimon se dio por vencida y luego flotó de regreso a la fogata sin decir una palabra más, aunque le dio a Lumine una mirada de muerte.

Lumine dejó escapar un largo suspiro, sacudiendo su dedo para aliviar el dolor. "Iré a ver al Líder del Grupo, me quedaré aquí y vigilaré el campamento. Tendremos algo de comer pronto, ¿de acuerdo? ¡No hay comida de emergencia de Lumine!"

Empezó a empacar, tomando su espada y algunas trampas para osos que iría y colocaría afuera con la esperanza de atrapar un jabalí.

No tenía idea de qué le pasaba a Paimon. Ella nunca actuó de esta manera.

Si bien a menudo tenía hambre y había alcanzado su límite de hambre muchas veces antes, Lumine recordaba que era mucho más paciente, cuando se conocieron por primera vez, en el desierto.

Esta noche, ella estaba simplemente, como si, fuera de este mundo.

Cuando Lumine estaba a punto de despegar, el fuego se apagó. Apenas podía ver.

"Paimon, ¿Qué acaba de pasar? ¿Estás bien?" Su voz resonó junto a las paredes de roca de su refugio. "¿Paimon? ¿Dónde estás?"

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