¡RUN! [Bangtansé]

‡ No es él ‡

El camino de regreso a la cabaña había sido más rápido de lo que realmente les hubiera gustado. Las luces de los celulares habían sido de gran ayuda durante el trayecto, gracias a eso habían esquivado varias piedras que pudieron causarles una caída nada bonita.

Las luces de la cabaña podían observarse a la distancia, Hoseok y Rosé aumentaron el paso para llegar cuánto antes y ver si Jimin estaba tal y como lo habían dejado.

— Espera.— Hoseok tomo del antebrazo a la castaña deteniendo su caminata.

— ¿Que ocurre?— se apego al chico mirando al rededor tratando de hallar lo que él haya visto.— ¿Hoseok?— lo miro y llevo su vista hacia donde observaba él.

— La puerta está abierta.— apuntó.— No la dejamos así.— recordó sintiendose de pronto más asustado.

— Tal vez el viento la abrió.— comento dudosa, pues para nada había aire en el ambiente.— Vamos con cuidado.— sugirió tomando la delantera.

Hoseok acelero el paso quedando él al frente, Jungkook había dicho que cuidará de Rosé y eso haría él, tenía que dejar su miedo a un lado y proteger a la castaña así como sus amigos hacían con ellos.

Poco a poco fueron acercándose a la puerta de la cabaña, el sonido de sus pisadas contra las ramas y la tierra era lo único que se escuchaba, sus respiraciones aceleradas y el tamborileo de sus corazones sobre sus oídos lograban estresarlos un poco. Hoseok coloco la palma de su mano sobre la madera desgastada y dio un leve empuje abriéndola completamente haciendo que está rechinara.

Las luces estaban encendidas así que ver frente a ellos lo poco que dejaba la puerta les indicaba que no había nadie cerca, además no se escuchaba absolutamente nada. Dio un asentamiento hacia la castaña indicando que podían entrar.

Ambos estaban muy alerta ante lo que fuera a suceder acontinuación, caminaron por el pequeño pasillo lentamente con los teléfonos a la mano en caso de ser necesario, aunque no fuera algo que les ayudará mucho para defenderse, Hoseok, agradecía tener algo. Llegaron hasta la sala donde no encontraron a nadie, está estaba tal y como la habían dejado. Rosé se encamino hasta la habitación donde habían dejado a Jimin, abrió la puerta observando el cuerpo del chico recostado sobre la cama cubierto con una sábana blanca que ahora estaba manchada de sangre. Sintió un alivio al saber que Taehyung no había ido por él.

Dio media vuelta para volver con Hoseok y seguir inspeccionando la cabaña cuando el rostro de Jimin estaba a escasos centímetros del suyo, no reprimió el grito de terror que le causó el susto, giro su cabeza hacia el interior de la habitación comprobando que el cuerpo del chico ya no estaba en la cama.

— ¿Que ocurre?— rápidamente Hoseok llegó hasta Rosé con un semblante preocupado, observó a la chica tomándola por los hombros para inspeccionar que estuviera bien.— ¿Rosé?— insistió mirándola asustado.