Slave Forced 🔥

EPISODE FINAL

Segunda Oportunidad

Una vez que el movimiento en la Casa se apaciguó y Xiao Zhan fue de vuelto al sótano siendo esposado, Nie Ming Jue comenzó a trabajar de nuevo en la cerradura. Mientras Xiao Zhan se durmia inmediatamente apoyado contra el hombro de Yibo quien también se apoyaba contra él. Después de que Xiao Zhan fuera llevado a la función, Yibo había regresó en sí y luchó para que le devolvieran al pelinegro, pero no tenía la fuerza suficiente para seguir y fue una vez más golpeado hasta dejarlo sin alientos. Y cuando Xiao Zhan regresó, Yibo no había dejado de hablar y pedirle perdón por todo lo que había pasado y algunas promesas fueron intercambiadas.

Ya pasadas las horas Nie Ming vi la oportunidad de trabajar en la cerradura, ya había abierto la suya mucho antes de que se llevaran a Xiao Zhan y ahora la siguiente que era la de Yibo pues era el que estaba más cerca y el que había estado más tiempo encadenado.

Después fue hacía Xiao Zhan y le desató sus muñecas. Odiaba tener que despertarlos, pero debían salir de ahí antes del amanecer. Suavemente sacudió a Xiao Zhan para que despertara y le permitió despertar a Yibo mientras él subía por las escaleras. Xiao Zhan y Yibo lo siguieron un momento después.

— ¿Cómo funciona la cerradura de la puerta? —preguntó Xiao Zhan.

—Es una barra que se desliza sobre la puerta y la pared, y se sostiene en su lugar por unos soportes de acero. No hay forma de que pueda abrirse desde adentro —susurró Nie Ming Jue en respuesta.

—Entiendo, tengo una idea— dijo el pelinegro acercándose a la puerta. —¡Guardias! —Gritó Xiao Zhan—. ¡Yibo murió!... ¡Yibo murió!

Momentos después, la barra fue deslizada rápidamente y la puerta se abrió; antes de que los guardias pudieran comprender lo que estaba sucediendo, Xiao Zhan ya los atacaba con su gas pimienta y Nie Ming Jue los noqueaba con un fuerte golpe en la cabeza.

—Sólo se llevaron mi ropa y mi navaja. Escondí mi aerosol y lo dejé aquí cuando me llevaron —explicó Xiao Zhan al ver a Nie Ming Jue mirándolo con extrañeza. metieron a los guardias en la celda y bloquearon la puerta y los tres hombres subieron las escaleras en silencio total y la adrenalina a morir.

— ¿Y ahora cuál es el plan? —preguntó Yibo.

—El mismo que antes —dijo Nie Ming Jue—. Vamos antes que vengan otros guardias.

— ¿Qué hay de Fanny? —preguntó Xiao Zhan con preocupación.

—Li Chen nunca la deja salir de su habitación. Lo siento mucho Xiao Zhan, tendremos que volver por ella después —dijo Nie Ming Jue y Xiao Zhan se quedó callado haciendo una promesa en silencio que volvería por ella cueste lo que cuesta, mientras se apresuraban a través de los pasillos de la casa para salir.

Corrieron por largo pasillos en total penumbra y gracias a las habilidades de Nie Ming Jue que conocía perfectamente el lugar, los guio al final de pasillo a una puerta con miles de seguros que solo él y el señor de la casa tenían permitido manipular las cerraduras.

Cuando llegaron Nie Ming Jue trabajo rápidamente en cada cerradura, pero titubeó y primero se aseguró de que no hubiera nadie. Después salió con cuidado, Xiao Zhan y Yibo lo siguieron. Cuando llegaron a la cerca, Nie Ming Jue ayudó al pelinegro a subir y después Xiao Zhan ayudó a Yibo. Volteó para ofrecerle una mano a Nie Ming Jue cuando vio a Li Chen en el portal acercándose con un arma en mano.

—Nie Ming Jue, rápido —dijo Xiao Zhan y Nie Ming Jue volteó hacia atrás.

—Ve, Xiao Zhan, iré detrás de ustedes, pero vete ahora con Yibo —dijo Nie Ming Jue desesperado.