Capítulo 4
Han pasado meses, más precisamente 3 meses desde el encuentro de Anahi con Christian Grey, en esos meses la menor se sintió observada y perseguida. Cuando se dirigía a la universidad o a la tienda miraba siempre disimuladamente a su alrededor notando enseguida que un auto siempre la seguía en su trayecto.
Chasqueo la lengua molesta, esperaba que al estar en un país extranjero se libraría del acoso o los secuestros de mujeres como normalmente pasa en Latinoamérica (cosa que no está orgullosa de recordar) pero al parecer el maldito dicho de que todos los humanos son iguales es jodidamente real. Eso ocasiona que se enoje y con su magia de manera discreta busca información de quienes son esas personas que la siguen enterándose en pocos instantes que son detectives y por si entendió en los pensamientos de esos humanos alguien de alto estatus económico quería saber todo de ella, que hacía, con quienes se relacionaba, etc. Lamentablemente no pudo encontrar en las mentes de esos humanos quien era el causante de sus perseguidas hacia su persona pues estos solo siguen ordenes de un superior de ellos.
Debido a eso ha estado vigilando constantemente sus pasos y cuando ellos se distraían aunque sea un microsegundo escapaba de manera exitosa pues su presencia era casi nula como la de un fantasma, aprovechando esa habilidad podía escapar de ellos sin que se diesen cuenta.
Aparte de los acosos, ha estado evitando por completo al protagonista masculino, pues Elena lo invitaba a tomar una copa o para charlar, cuando iba a la casa de la señora Lincoln ella se excusaba diciendo que no podía estar con ellos por trabajos y proyectos de la universidad que está realizando o que tenía que ir a su trabajo. Eso y miles de excusas que buscaba para escapar de la mirada del mayor empresario dominante.
- Debe de ser una jodida broma –murmuró para sí misma la menor con una cara pálida.
¿Por qué maldecía? Pues en esos momentos se encontraba cara a cara con Christian Grey en la sala mientras Elena la miraba con una sonrisa divertida por las expresiones de la menor.
Él la observaba detenidamente con ojos evaluadores, más bien decir, con ojos oscurecidos como si fuese un depredador observando a su futura presa, un escalofrío le recorría a la menor ante tal potente mirada. Lo peor era que se encontraba con ropa algo reveladora, es decir, su usual camisa rosada con una imagen en color negro que arriba dice otaku al igual que abajo solo que en letras japonesas, un short negro 1 cm abajo del muslo mostrando las pálidas piernas de la menor, dicha ropa la usaba solamente en el hogar cuando no salía o no había visitas.
"Elena no me dijo que vendría él, eso significa que ¡¿lo hizo apropósito?!" pensó la menor mirando a su tía como si hubiese sido traicionada por esta mientras la nombrada solo miraba divertida la situación.
Christian alza la ceja intrigado por las expresiones de la menor, al parecer tenía razón ella lo estaba evitando pues ella evitaba mirarlo a la cara.
- Ti-tía ¿Por qué no me dijo que habría visitas? Podría haberme vestido de manera más presentable –le preguntó la menor con su usual voz suave pero el mayor pudo escuchar los nervios de esta.
- Digamos que lo olvidé pequeña, discúlpame por eso –le dijo apenada, que era completamente mentira.
- Oh entiendo tía, no se preocupe –le sonrió amablemente a su tía pero el de ojos grises notó los ojos entrecerrados de la menor que estaban fulminando a la rubia.
- Estamos a punto de salir a comer, Anahi ¿quieres venir con nosotros? –preguntó Elena a la menor y antes de que la menor pudiera negarse continuó –después de todo hoy no trabajas y acabas de terminar las tareas asignadas de la universidad como igualmente terminaste tu proyecto obteniendo la mejor nota del salón, eso debería ser celebrado ¿Qué dices?
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beautiful submissive
AlteleEl, Christian Grey: dueño de Grey Enterprise Holding. Ella, Anahi Aguilera: chica de una dimensión diferente (viene del mundo real), estudiante de secundaria. El, no conoce el amor y no pretende conocerlo. Ella, conoce el amor pero nunca le fue cor...