柔 ۫ 𝔠 𝔬 𝔪 𝔪 𝔢 𝔫 𝔱 𝔞 𝔯 𝔦 𝔲 𝔰 𝔠𝔬𝔯𝔳𝔲𝔰 🕷️ ۫ 𖥻 ִ ♡̶ 𝗙𝗔𝗥𝗖𝗨S

глава девятая࿔﹗ ˖ ་ ೯9⿻͜

  Justo cuando vacilaba en el suelo perezosamente, el día se puso mucho mejor. Aquel búho reveló su nombre ante mi, y yo no sabía que decirle. "Mucho gusto", "encantado de conocerte", "Un gusto, mi nombre es..." Pero recordé que no nos llevábamos bien, así que esas palabras eran demasiado para él. La verdad, no quiero saber nada del búho. El búho me ha maltratado durante días, pero desde que tuvimos aquella pelea dejo de maltratarme. Y no podria olvidar ni perdonarle de la noche a la mañana todo lo que me hizo, así que unos días pacíficos no quita que yo quiera ser libre, y que no quiero saber nada del búho.

  Si yo estuviera lejos de él, si no lo hubiera conocido, y si nunca me hubiera revelado su nombre hasta ahora, con un poco de tiempo y afortunadamente, lo habría olvidado fácilmente. Pero creo que estoy algo traumado, le ha hecho un agarre a mi ala, tanto físicamente como espiritualmente y es completamente necesaria tanto por mi, cómo para el... Solo espero que cuando esté montón de plumas muera, yo al fin sea capaz de volar sin interrupciones. Podría intentar volar e irme, pero creo que me necesita.

  Anoche, antes de dormir me trajo comida. Anoche antes de dormir, se acurrucó encima mío y comenzó a darme calor, me asuste naturalmente, y antes de que me aplastará moví mi cabeza en dirección de la salida del nido. Entre en pánico.
Pero detuvo mi movimiento con el impacto de su cuerpo encima mío, como si una mosca atraparan. Era fuerte pero, pero empezaba a usar esa fuerza para mí bienestar o algo asi, creería que era para darme calor.

  O algo así comencé a notar.

— ¿Te gusta mi nombre? No me respondiste en la tarde.

— Bonito... Supongo.

  Respondí incómodo. Y él, como si una buena noticia hubiera escuchado, se puso de buen humor y salió volando del nido. Me dejó solo en la noche confundido.

  Desde este día, entendí que necesitaba quedarme. No por él, si no porque no tengo la valentía de irme en cualquier condición, porque si lo pienso bien, con la poca experiencia cualquier humano, ave, animal e insecto podría controlarme debido a mi ignorancia. Y estos días el búho me dió a entender muchas cosas. Noté que el no tiene amigos, y que no es nada sin mi, y que yo no soy nada sin sus conocimientos sobre el mundo. O sus reglas estrictas y dolorosas muestras de afecto.
Sería lógico pensar así, pero si el Búho en verdad conociera el mundo más que yo, entonces ¿Por qué me tendría aislado en una casa tan improvisada? Este nido solo me da pesadillas, es cierto que quiero salir, pero mi deseo de salir es menos fuerte ahora que las cosa comenzaron a cambiar poco a poco.

  Comprendí entonces que él, y yo acabábamos de hacer algo insólito. El aislarnos solo nos trajo problemas, el búho tanto como yo no conocíamos una manera de calmar los instintos, y a instintos me refiero al celo. Mi conocimiento bajo y nulo solo hizo que me quedara petrificado ante lo forzoso que se sentía, ante cualquier movimiento extraño que el hiciera, y ante cualquier palabra que saliera de pico.

  El celo no coincidió conmigo, pero cuando volvió de su viaje luego de que yo le dijera que su nombre era bonito, se empezó acercar a mi de tal manera que me acorraló. Olfateo todo, de garras a pico, pero esa acción fue tan irrelevante a comparación de lo que pasó a continuación. Se fue lentamente por su camino, y me dijo que no volvería por varios días.

— Ves. Ahora sí puedes irte.

— ¿Que?

— O esperarás que vuelva.

— ... Claro que me quedo...

  Sus enormes ojos se mantuvieron abiertos durante muchos minutos estaba sorprendido porque abría el pico de par en par.

  Era la reacción que buscaba. No sabría explicar porque, tal vez me sentí un poco necesitado y querido... Antes tenía sospechas, pero ahora lo tenía casi confirmado, el búho me necesitaba y si soltaba una palabra en favor de el, su primer paso sería tenerme confianza, su segundo respetarme, y su tercero dejarme en paz.

   Lo inteligente era huir. Pero pensé mejor la situación. Y que que me quedaba para devolverle todo lo que me hizo. Robar su confianza y hacer que pagué, algo así como una lección. Supongo que poco a poco.