CAPÍTULO 22

879 60 5
                                    

Había pasado una semana de mi reconciliación con Eunwoo. A pesar de ser mucho tiempo para mi, él no me había pedido ser su novia formalmente. Pero hoy, tendríamos una cita, me dijo que me pusiera un vestido y me arreglara mas hermosa de lo normal.

Debo admitir que esta última semana había sido mejor que muchas otras. Todo se sentía mejor, Eunwoo y yo hacíamos lo mismo de siempre, pero el simple hecho de habernos confesado nuestro amor y hacerlo sin ninguna contrato de por medio, era lo que lo hacia real y mejor desde todos los aspectos.

Yoora me obligó a contarle todo y así fue. Terminó deseándome lo mejor. A Sanha se le pasó el coraje en tres días, y desde ahí no deja de apoyarnos y burlarse de nuestras cursilerías. Nuestros amigos dijeron que siempre teníamos que estar juntos, que así era perfecto.

-¿Y bien qué te parece este?- Le pregunté a Yoora quien estaba acostada en mi cama mensajeando con Suho y a la vez viendo la tele y ayudándome a escoger un atuendo para la cita.

-No,- Despegó la mirada del celular y me vio.- definitivamente no.

Le había enseñado un vestido amarillo bombacho. Ni yo sabia que estaba pensado, solo quería ver a Eunwoo ya. Saqué otro e igual Yoora lo rechazho. Rodó los ojos y se puso de pie para buscar algo. Me senté en el borde la cama y la miré hacer lo que hacia. Terminó escogiendo un vestido azul marino casual, era un poquito mas largo que la mitad del muslo. Sacó unos botines negros también.

-Ese será tu atuendo.- Lo señaló.- Casual y muy bonito, ademas esos colores te quedan bien.

-De acuerdo.- Solté un suspiro y me tiré por completo a mi cama.

-¿Qué haces?- Preguntó.- ¡Hora de ducharse!

Me puse de pie y con flojera me dirigí al baño. Después de ducharme, me cambié. Me miré al espejo y me gustaba lo que veía. Yoora me ayudó a peinarme, solo me hizo ondas en el cabello. Estaba lista y a la vez, nerviosa y ansiosa.

Eunwoo me había dicho que me recogería a las siete de la tarde, eran las siete con catorce minutos y él no aparecía. Eunwoo era la persona mas puntual que conocía y esto era raro, lo mas que se demoraba siempre eran máximo dos minutos. Estaba recargada en la mesada de la cocina, esperándolo. Esperando que tocaran el timbre y él
me sonriera como siempre.

En cuestión de minutos el timbre sonó acompañado de golpes fuertes y desesperados a la puerta. Tomé mis cosas y fui a la puerta con el ceño fruncido. Estaba bien que se haya demorado unos minutos, no tenia que tocar así. Me puse los tacones en la entrada y me di una última mirada.

Al abrir la puerta me llevé la sorpresa que no era Eunwoo, si no Sanha. Estaba hablando por teléfono, ni siquiera presté atención en lo que decía, estaba concentrada viendo su aspecto. Vestía casual, pero su cabello estaba desordenado como si se hubiera pasado miles de veces las manos por el, estaba pálido y con la cara preocupada al extremo y su ojos estaban rojos. Colgó y lo último que recordé que me dijo antes de salir corriendo de ahí fue:

-Eunwoo acaba de tener un accidente. Esta siendo trasladado al hospital justo ahora.

NOVIO A DOMICILIO- Eunwoo y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora