Capítulo 26

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CAPÍTULO 26


En un barrio de chabolas en las afueras de la ciudad de Wenhua, Tao Jian acababa de terminar de discutir con el propietario que le pedía el alquiler. Llevaba alquilado estos días esta casa de menos de 10 metros cuadrados. Salió a buscar trabajo durante el día, pero no había podido encontrar uno.


Había muchas personas rurales extranjeras como él que venían a trabajar a la ciudad de Wenhua, pero él no tenía ninguna ventaja para competir con esos trabajadores inmigrantes en sus años jóvenes y fuertes.


Sin calificaciones académicas y habilidades que pudieran usarse, estaba destinado a luchar solo en el fondo de la ciudad.


Solo quedaban doscientos o trescientos yuanes en la mano de Tao Jian. Se agachó en la puerta, sacó a tientas el último cigarrillo, lo encendió y dio una gran calada.


Reflexionó sobre que todavía tenía que ir a Tao Xi, esta vez tenía que conseguir el dinero sin importar nada.


Con un cigarrillo en la mano, Tao Jian se levantó del suelo lleno de baches y estaba a punto de ir hacia la escuela secundaria No. 1 de Wenhua cuando vio que se acercaba una mujer joven con una falda blanca.


Llevaba un maquillaje delicado, cabello corto y prolijo y un par de tacones de aguja, como si saliera del edificio de oficinas más caro del centro de la ciudad, todo su cuerpo era incompatible con este lugar.


Tao Jian la miró varias veces, sintiéndose un poco extraño. Cuando iba a pasar, la mujer se detuvo y le preguntó: "¿Es usted el Sr. Tao Jian?".


Tao Jian estaba atónito, luego inconscientemente asintió.


"Hola, soy Su Yun, asistente del presidente del Grupo Ruize". Su Yun mostró una sonrisa formulista: "¿Puedo encontrar otro lugar para hablar contigo en detalle?".


Lo siguiente estaba mucho más allá de la imaginación de Tao Jian. Esta mujer llamada Su Yun lo llevó a una cafetería en la que nunca había entrado antes. Después de que surgieron dos tazas de café que equivalían a su comida durante varios días, Su Yun explicó directamente sus intenciones:


"Estoy aquí esta vez principalmente para resolver problemas de trabajo para el Sr. Tao". Sacó un documento de su maletín y lo puso frente a Tao Jian: "Este es un puesto de seguridad para una subsidiaria de propiedad del Grupo Ruize. Proporciona alimentación y alojamiento. Puedes empezar hoy directamente".


Tao Jian miró la descripción del trabajo en este documento con incredulidad. Nunca había encontrado un salario como ese después de trabajar durante tantos años.


Pero no había nada bueno en el mundo. Miró a Su Yun con sospecha y preguntó: "No conozco al presidente de su grupo, ¿Por qué debería ofrecerme un trabajo? Debe haber algunas condiciones, ¿Verdad?".


El supuesto tipo acababa de estafarlo con dinero, y desconfiaba de todo, pero no descubrió qué más se le podía estafar, estaba casi sin dinero.

La Luna Viene a Mí [Trad-Español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora