Lluvia Carmesí Que Busca La Flor ✿[HuaLian]

Introducción: Una Razón de Vida.

Hace quinientos años, el Primer Emperador tras largos años de gobiernos en todo la provincia trató de manera apresurada gobernar de manera correcta todo el territorio, lo malo es que falló en el intento. Al principio habían conquistado grandes parcelas de tierra, expandiéndose y asentándose para la unificación, pero por más que crecía el territorio, más difícil era controlarlo, así que muchos bandidos aprovecharon la brecha y robaban, saqueaban y exterminaban las aldeas asentadas, esto llevó a que tras ganar, perdieran recursos valiosos y vidas humanas. Para la cuarta generación de Emperador. El Gran Señor Jun ZiHan dividió todo el territorio y las nuevas conquistas en cuatro grandes particiones, norte, sur, este y oeste; dándole el poder de cada punto cardinal a sus más fieles Generales, con esto logró mayor vigilancia y poder, podían extenderse y conquistar todo, esto sería protegido por el Señor dominante. Fue una idea muy elogiada y criticada por muchos magistrados pero se callaron cuando el Emperador los miró con recelo, sabían que el Supremo no le gustaba ser cuestionado y más cuando él tenía el poder de hacerlo. No fueron tontos y mejor alabaron sus ideas.

El actual Emperador Supremo; Jun Wun gobernaba con puño de hierro todo el territorio de China oriental. Le cedió el título de Emperadores inferiores a cada General Gobernante y le concedió mucho más poder, a cambio de subordinación. El Emperador Supremo no se metía en los problemas que había entre los cuatro Reinos, solo cuando era absolutamente necesario intervenía con consejos, armamento y hombres para la batalla. Es por ello que llevó a la situación actual.

El Imperio de XianLe y el territorio de Yong'An tiene una serie disputas política desde generaciones anteriores y hasta la fecha nada ha acabado, se recuerda con temor que antes estaban unificadas en paz, pero un misterioso asesinato a la familia real de Yong'An causado el gran declive entre ambos Imperios, Yong'An culpando a XianLe y está negando con firmeza, ofendida por tal acusación. Desde entonces las guerras no han cesado, ambas peleando por quien conquista a la otra.

Nadie sabe porque el Emperador Supremo no ve el conflicto por sí mismo, está claro que es un asunto muy serio y debe ser arreglado. Las continuas guerras entre ambos Imperios han causado muertes sangrientas y pérdidas de cultivo. Solo que XianLe tiene una gran ventaja y es la audacia de Su Alteza real, El Príncipe Heredero, con solo veintidós años ha logrado méritos importantes en el campo de batalla, con tanta juventud su padre el Emperador del Oeste estaba muy orgulloso de los logros de su hijo, que demostraba ser muy capaz de tomar el trono a tan pequeña edad.

Xie Lian es letal pero respetado con amor por sus cuidados, siendo un joven de carácter amable y accesible a las personas comunes, ayudando a quien más lo necesite si está a su alcance. Versado en muchas artes, no solo en el campo de batalla sino también en el hogar. Su porte delicado pero varonil es otro cualidad que todas las jovencitas resaltan con ahínco, la piel de porcelana y líneas definidas, nariz perfecta, ojos grises cual humo temploso, muy únicos mencionan, sus sonrisas amables, astucia, vocabulario refinado y atento lo convierte en el hombre ideal para todas las jóvenes Princesas dignas que desean unificar tratados con el Reino de XianLe.

Volviendo al punto, el Reino de XianLe está ganando nuevamente contra Yong'An y Su Príncipe Heredero, Lang Qian Qiu está devastado por tremenda humillación y no es por falta de estrategias sino porque están perdiendo hombres en números alarmantes. Ambos Príncipes se ven con rivalidad queriendo demostrar quién es el mejor para sus Reinos, pero lo que Xie Lian no sabe es que Lang Qian Qiu tiene un último recurso... Uno que preferiblemente no le hubiera gustado buscar.

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—Su Alteza, él ha enviado su respuesta, estará aquí antes del amanecer de mañana. —El lacayo que estaba inclinado en señal de respeto espero que El Príncipe del Reino del Sur respondiera. Se hizo un largo silencio y el lacayo pensó que no había sido escuchado, ya preparado para volver a anunciar la respuesta, la voz del joven se pronunció.

—Ese bastardo solo estaba buscando esto, pero es necesario tenerlo, espero no estar cometiendo una equivocación, no puedo dejar que este Reino caiga —El Príncipe Lang torció el cuello y miro el mapa que estaba enfrente de él—. Mantén todo preparado, tengan lista dos guarniciones para él.

El lacayo asistió y en silencio marchó del Gran Salón.

»—Bien, sé que contigo a mí lado recuperaremos el territorio perdido.

El Príncipe Lang Qian Qiu apretó los puños y con una fina aguja con punta roja la apoyó contra una parte del mapa donde un Gran muro se alzaba—. Y el Príncipe de XianLe caerá en la desgracia.

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