Obsesión.

1.5K 63 1
                                    

asaron los dias y no entendía como una niña como Tania, podía traerme tan obcecionado. Diario le entregaba una carta o un dibujo, pero ella no dado la mas leve seña de que sentía la misma atracción, en mi desesperación, comencé a hacer lo que mejor se hace, obligar. Busqué a algún amigo de Tania y por suerte mía,infortunio de el iba en mi salón, Alberto era su amigo y el mas ignorado y maltratado de la clase, a la hora de la salida lo acorralé con Miguel.

-Espera Alberto, quiero hablar contigo

- Tu de qué quieres hablar conmigo?-sudaba del susto,pero le intragaba que le hablara

-De Tania,de qué mas?

-Qué con ella?- Sigue queriendome?

-No Miguel no quiero nada contigo

-Callate idiota,estoy hablando yo

-Tampoco quiere contigo Alucard-comencé a reirme, aunque no sabía que era lo gracioso

-Bueno la cosa es que me da igual si ella quiere, Tania va a ser mía, mía entidendes? -Lo arrojé a la pared y la cuartié,debía controlar mi fuerza

-Pero no le atraes entiendelo Alucard

Mi decesperación y mi ira esta en un aumento incontrolable, lo tomé por el brazo y empecé a pudrirlo como un veneno muy doloroso, no me interesaba que supíeran lo que soy.

-Me lastimas, qué diablos me haces?

-No me importa ella será mía y por tu bien que sea pronto

<<<Narra Tania>>>

Ya estoy cansada con el asunto de Alucard, todos me llaman afortunada porque a el le atraigo- de verdad le gustas- dicen todos como si fuera la sorpresa del siglo, y para colmo todas me odian porque a mi me da cartas y dibujos a diario y a ninguna le había dado nada, será que de verdad le atraigo? No, debo sacar esos pensamientos, yo lo odio, es el clásico chavo guapo y arrogante que siempre se debe hacer lo que el quiera, no se que trata de jugar conmigo, pero no me pienso incluir.

Aunque la verdad no entiendo porque se fijó en mi, no soy nadie, tengo tres amigos, Mimí, Victoria y el traidor de Alberto, el estudia en el mismo curso que Alucard y el muy sínico vino hace unos días, casi llorando suplicándome.

-Tania, debes de ser novia de Alucard

-Sabes que lo odio, además, tu mismo dijiste las cartas son una nueva esrategia de conquista

-Si ya se pero tienes que andar con el, por favor

-No Alberto, el no me gusta, no seré su novia!

-Si no lo haces me golpeará, o peor. Por favor!

-Pues aún así,si esta tan loco e infantil como para amenazar para estar conmigo, menos quiero algo

-Solo te hará caso como una o dos semanas y despues terminará contigo, así como con todas

-Lo pensaré, pero no prometo nada. Nos vemos mañana

Ya en mi casa me puse a analizar si quería se novia de Alucard, es verdad que es el mas popular, guapo e inteligente de la escuela, pero tambíen es un patán sin educación que siempre se sale con la suya.

No quiero ser su novia pero de esta forma me deshago de los que todo el día me dicen que soy una imbécil por no decirle que si y tambíen cuando me bote las celosas me dejarán, pero lo mas importante, no dejaré que dañen a mi mejor amigo.

<<<Narra Alucard>>>

La noche está deliciosa pero algo me falta-al pensar esto cruzan en mi mente unos ojos avellana,con los mismos ue deliro desde hace dias- todos dicen que me he enamorado de Tania, yo, un demonio tan poderoso, enamorado de una simple mortal? Jamás.

Ella solo es un capricho, es la primera que no corre a mis brazos, esos me excitaba, ahora comienza a fastidiarme.

Ya estaba aburrido, así que decidí realizar mi nuevo pasatiempo, ver dormir a Tania. Llegué a su casa, elevé mi cuerpo hasta su ventana y la abrí como cada noche, pero esta noche ella estaba despierta.

-Quién esta ahí? -dijo mientras encendia la luz-

-Soy Alucard, no te asustes

-Y cómo quieres que no me asuste si entras a mi habitación en la madrugada? Y a todo esto como entraste?

-Soy bueno trepando- le guiñé un ojo, ella lo ignoró olimpicamente- la ventana estaba abierta

-Y que pretendías al entrar?

-Nada, pensé que estarías dormida, solo quería verte dormir

-Pues debo dormir, mañana hay colegio y me levanto muy temprano, vete

-Claro, no vemos mañna - sonreí, de nuevo lo ignoro, era tan frustante

-Si, nos vemos- y cerro la ventana

Tuve que volver a mi solitaría e inmensa casa a aburrirme de otra forma. Aunque ese encuentro no lo esperaba le sirvió para darse cuenta de algo, por mucho que le doliera, se había enamorado de una hermosa mortal.

(Por favor nl dejes de comentar y segerir :-) se los agradezco)

Una dulce maldición.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora