Una dulce maldición.

Envenenamiento.

<<<Narra Tania >>>

Estoy continuando con mis clases de magia con Elena, ella es una gran hechicera y todo, pero odio que quiera robarme a mi novio, le manda regalitos y lo mira con deseo -me dan ganas de matarla- Ella es hermosa, elegante, sensual, madura, yo solo soy una niña tonta que muere por Alucard -al igual que todas- lo que me reconforta es que mi hermoso Alucard solo tiene ojos para mi -cada día lo amo mas- pero ella insiste he insiste, la otra noche se puso a hablar con el -solos- en el estudio, por suerte pude escuchar su patético intento de conquistar a mi novio

-Alucard quiero a hablar contigo

-Dime Elena -el ni la volteaba a ver- pero que sea rápido tengo cosas que hacer

-Es sobre tu novia -que ni se atreva esa arpía en hablar mal de mi-

-Qué ocurre con Tania?

-No sé si lo has notado pero hay muchos hombres detrás de ella

-Si lo sé, ella es guapa obvio atraerá a muchos y?

-Bueno la verdad es que a ella no le son indiferentes

-Qué estas insinuando? -lo está haciendo enojar, el acabará con ella-

-No insinuo nada, solo que a ella le gusta que muchos se fijen en ella

-Míra te aclararé algo yo confío en ella sin duda alguna y tu Elena solo estas aquí para enseñarle magia, si no puedes hacer eso te pido que te alejes de mi

-Tu te mereces a alguien mejor, alguien al nivel de un príncipe demonio

-Y supones que tú estás en ese nivel? No me interesa a quien merezca, soy feliz con Tania, la amo y quiero estar con ella siempre, no me interesa ni tu amor ni el de nadie queda claro? -término con ella, justo como lo pensé-

-Si, lo lamento Alucard

-Está bien retirate por favor

<<<Narra Alucard >>>

Esa escena con Elena fue nefasta, quién se atreve para venir a hablar de mi Tania? Debe terminar con sus clases rápido para que se aleje y no cause problemas con mi Tania. Pero ahora me interesa más la sorpresa que tengo para ella, se que le encantará, tal vez sea un poco apresurado pero con una guerra tan pronto es mejor ser apresurado.

Llevé a mi Tania nuestro claro a ver las estrellas, el cielo se veía hermoso y sería el perfecto testigo, cree un camino con los pétalos de miles de gardenias, en el centro había un enorme corazón formado también de pétalos, no paramos ahí la vi a los ojos, esos ojos avellana que me derretian siempre, le sonreí y ella a mi, entre los dos se sentía un amor inmenso, habíamos pasado por muy malos momentos y vendrían más pero nuestro perfecto amor siempre podrá contra todo.

-Esto está hermoso Alucard muchas gracias

-No tienes nada que agradecer hermosa, pero esto no es nada

-A no?

Me puse en un rodilla y abrí una pequeña caja con un anillo en ella, un pequeño anillo con un diamante en medio

-Quieres convertirte en mi eterna esposa?

(lamento la tardanza ya saben estos días son locos en todos lados :) aquí está un capítulo más cual crees que sea la respuesta de Tania comenten sus opiniones es muy importante :) )