Narr. Shen Jiu
La calle principal del pueblo estaba bastante animada a pesar de que no había ninguna celebración, las personas caminaban tranquilamente de un lado a otro, era la viva imagen de un pueblo prospero y feliz, caminaba al lado derecho de Shen Yuan y a su lado izquierdo caminaba Yue Qi, mirábamos uno que otro puesto lleno de baratijas, Shen Yuan hablaba animadamente con nosotros y nos preguntaba cada cierto tiempo si queríamos algo pero en todas las ocasiones negamos con la cabeza, luego de mirar un rato mas nos dirigimos a un puesto de dulces, nos compro una bolsita de caramelos a cada uno y un tanghulu, después de comprarlos decidimos regresar a la posada, así que dimos la vuelta y empezamos a caminar, guarde mis caramelos en una bolsa interna que tenia mi túnica y me concentre en comer el tanghulu, Yue Qi hizo lo mismo, disfrute bastante cada mordisco hasta que me lo acabe, incluso en el pasado amaba en secreto las cosas dulces, poder disfrutar uno de mis favoritos después de tanto tiempo solo me había echo apreciar mas su sabor, de ves en cuando comía unos cuando visitaba a las damas del burdel de la ciudad donde estaba la secta, eran mis momentos mas tranquilos y ,se podría decir, felices; Shen Yuan miraba todo con una sonrisa amable, la que casi siempre mostraba a los demás, pero en sus ojos se podía ver la emoción apenas contenida que sentía al estar en un ambiente tan animado, después de un rato tristemente me había terminado mi tanghulu, ya no nos faltaba tanto para llagar a la posada lo que de verdad agradecía pues deseaba con gran intensidad acostarme en esa cómoda cama, pero nuestro andar se detuvo cuando Shen Yuan paro en seco y miraba con gran interés una tienda que vendía abanicos, la nostalgia me invadió al instante y sentí un cosquilleo en mi mano derecha, en la que normalmente llevaba uno
-Entremos chicos- sentencio el tonto mayor con una gran sonrisa, sin perder el tiempo hicimos lo dicho ,después de pasar un tiempo viendo diferentes tipos y diseños me interese mucho por uno que tenia un fondo blanco y unas ramas de bambú bastante elaboradas, al ver que no despegaba mi vista de dicho abanico el vendedor se apresuro a acercarse
-Muchacho que buen ojo tienes, este abanico esta echo con los mejores materiales del mercado además de que esta pintado a mano por uno de los mejores artistas del momento...- deje de prestarle atención y tome el abanico para analizarlo mejor, en realidad el vendedor no mentía, al menos con los materiales ya que en realidad no sabia nada del artista, realmente quería llevármelo pero no creía correcto pedirle a Shen Yuan que me lo comprara
-Esta bonito- no note en que momento Shen Yuan se había parado alado mío, me miro a los ojos y después al abanico, pareció analizar algo por un momento para acto seguido girarse a hablar con el vendedor - nos llevaremos ese y este- señalo el que tenia en mis manos y después uno que él había estado sujetando, no había notado el que llevaba en sus manos, estaba echo con madera color café oscuro, el papel era negro con unas flores que tenían diferentes tonalidades de rosados, me extraño un poco su elección, claro, yo no lo conocía bien, pero abría asegurado que le gustarían los que tenían colores mas vivos, ademas del rosado, regrese a mis sentidos después de salir del establecimiento,me avía sumergido en mis pensamientos, ni siquiera pude objetar para cuando los abanicos ya habían sido pagados, mire a Shen Yuan con la intención de decirle algo al respecto pero al ver lo feliz que estaba mirando el abanico que había comprado, no pude, así que simplemente camine en silencio, cada vez me intrigaba mas el chico que estaba a mi lado, volvimos a caminar hacia la posada, al llegar nos dirigimos rápidamente a nuestro cuarto, los tres estábamos cansados y rápidamente nos preparamos para dormir una vez que estuvimos adentro, al estar quitándome mi túnica exterior recordé un pequeño pero importante detalle, compartiría la cama con Shen Yuan, voltee a ver discretamente al susodicho, estaba completamente tranquilo, ya se había quitado completamente su túnica exterior, vistiendo únicamente la interior la cuel era de color blanco, estaba desatando su cabello que al estar completamente libre de ataduras callo libremente sobre su espalda, no podía ver muy bien gracias a que la única luz que iluminaba el entorno era la de la luna, los ojos de Shen Yuan se encontraron con los míos y quede atrapado en esos ojos que aun en la oscuridad rebosaban de vida, desvié la mirada extrañamente avergonzado y seguí con lo mío, me solté el cabello y me dirigí a la cama, Yue Qi ya estaba completamente dormido en la otra
- Bien Shen Jiu, quieres dormir del lado de la pared o..-
- Tu toma ese lado- lo interrumpí antes de que pudiera proseguir, el solo asintió y se acostó dándome la espalda, antes de hacer lo mismo voltee a ver el abanico que me habían comprado en la tarde y sonreí feliz de tenerlo, ahora que nadie miraba me permití sacar parte de mis sentimientos, aunque solo fuera por unos instantes, mi atención se desvió al abanico de Shen Yuan, durante todo el camino a la posada lo había visto con demasiada felicidad, como si fuera un tesoro y, aunque no quisiera, me daba mucha curiosidad, me acosté a su lado intentando soportar, pero me fue imposible -Shen Yuan, estas despierto?- dije susurrando para que solo él me escuchara, eso si es que aun seguía despierto
-Mmm?, si- se notaba que estaba medio dormido, no me sorprendía habíamos tenido días muy cansados y no a podido dormir bien
-Porque elegiste ese abanico?-
- Me gustan esas flores- dijo después de un rato, su respuesta solo me hizo tener mas dudas, aunque seria razón suficiente para todos los demás por alguna razón no fue suficiente para mi
-Que tiene de especial esa flor?- se dio la vuelta y me miro fijamente, parecía algo confundido, tal vez por mi tan repentina muestra de interés hacia su persona pero tenia que saber o no podría dormir
-El árbol que da esa flor se llama Magnolio caduco y es muy bonito- en serio esperaba que creyera que esa era la razón?, pareció notar mi incredulidad, suspiro y se aclaro la garganta - es la flor favorita de alguien que es especial para mi- se notaba una tristeza en sus ojos y en su vos que me impidió preguntar quien era esa persona
- Debe ser agradable- sin duda debe ser agradable ser así de especial para una persona
-El árbol? O la persona?- pregunto bastante confundido Shen Yuan
- El arbol- dije sin pensarlo mucho, negándome rotundamente a hacerlo hablar sobre "esa" persona y ocultando mi verdadero pensamiento
-Si, es bastante bonito, nunca has visto uno?- negué con la cabeza, aunque tal vez ya e visto uno jamás me he tomado el tiempo de apreciarlo bien ya que no era de mi interés, ahora me arrepiento un poco - si quieres podemos ir a ver uno juntos después, conozco un lugar donde hay varios - un calor bien conocido apareció en mis mejillas - ahora duerme ya es tarde- cerro sus ojos y no mucho tiempo después estaba completamente dormido, envidiaba la rapidez con la que lo habia echo, no podía dejar de verlo, así de cerca podía apreciar perfectamente cada uno de sus rasgos, su rostro relagado ,como su pecho subia y bajaba con cada respiro y cada exhalación, un mechon de cabello que caia sobre su cuello, me sentía extrañamente tranquilo estando junto a él, no supe exactamente cuando me quede dormido.
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Conociendote
FanfictionDespues de su muerte shen yuan despierta en el cuerpo de un niño de 5 años, se da cuenta que ha reencarnado en la novela que tanto odiaba de avion disparado hacia el cielo, intentando hacer un plan para salir de los problemas que traera el futuro, a...