A TUS ÓRDENES - KOOKV

CHAPTER 2

Jungkook lo estudió con un brillo de satisfacción en sus ojos oscuros. Había esperado ese momento durante mucho tiempo.

-"Quiero hacerte un par de propuestas. El destino de Repuestos Kim ahora está en tus manos".

Tae dejó su taza de café sobre la mesa con manos temblorosas.

-"¿Por qué dices eso?"

-"Porque es la verdad. Yo no miento ni me echo atrás cuando he hecho una promesa" -afirmó Jungkook.
-"Te aseguro que lo que pase con la empresa será tu responsabilidad".

Tae parpadeó rápidamente mientras intentaba concentrarse.

-"No lo entiendo. ¿Cómo puede ser?"

-"Tú no eres tan ingenuo"
Jungkook esbozó una sonrisa

-"Sabes que te deseo".

-"¿Aún?" -Tae dejó escapar el aliento ante tal declaración porque estaba convencido de que, después de dos años, se habría olvidado hasta de su nombre.

-"Aún" -confirmó él, con amenazador énfasis.

¿Cómo podía seguir encontrándolo atractivo después de dos años sin verse... y después de todos los donceles con los que debía haber estado en ese tiempo? No tenía sentido.

Él no era una belleza de las que paraban el tráfico. Nunca había tenido ningún problema para atraer a un hombre, pero mantener su interés cuando no estaba dispuesto a meterse en la cama siempre había sido un reto.

De hecho, la mayoría de ellos preferían alejarse, pensando que o era devotamente religioso o solo estaba dispuesto a compartir su cuerpo después de recibir un anillo de compromiso.

Tae se dejó caer sobre el asiento, desconcertado.

¿Cómo podía seguir deseándolo y qué tenía eso que ver con el negocio de su padre? ¿Y cómo podía seguir encontrándolo atractivo cuando había tenido donceles mucho más sofisticados en su vida? ¿Sería solo porque le había dicho que no? ¿Podría un hombre tan inteligente como Jungkook ser tan básico?

-"No quiero retenerte aquí toda la mañana, así que voy a contarte las tres opciones que tienes".

-"Tres opciones" -repitió él, inquieto.

-"Opción uno, decides darme la espalda" -Jungkook lanzó sobre él una mirada de advertencia que lo hizo palidecer.

-"En ese caso, venderé la maquinaria y el solar inmediatamente. Ya tengo una buena oferta y obtendría buenos beneficios..."

Tae inclinó la cabeza, aterrado por tal sugerencia. El pueblo necesitaba la fábrica porque cerrar Repuestos Kim había dañado su precaria economía.
La gente no encontraba trabajo y muchos habían tenido que poner sus casas en venta porque ya no podían pagar las hipotecas.

Él sabía muy bien lo duro que era quedarse sin trabajo y había hecho todo lo que pudo con sus conocimientos de recursos humanos para ofrecer guía y consejo a los empleados de su padre.

-"Opción dos" -siguió Jungkook. -"Aceptas pasar una noche conmigo. Entonces dejaré que la fábrica siga funcionando durante al menos un año. Me costará dinero y será una pérdida de tiempo porque Repuestos Kim necesita una gran inversión para retener los contratos y conseguir otros nuevos, pero si eso es lo único que puedo conseguir de ti, estoy dispuesto a arriesgarme".

Tae levantó la cabeza para concentrar la mirada en el oscuro y atractivo rostro.

-"A ver si lo entiendo: ¿estás chantajeándome para que me acueste contigo? ¿Te has vuelto loco?"