La voluntad de Kagome (Sesshomaru X Kagome)

8 - Un accidente

Y lo que parecia que iba a ocurrir, ocurrió, Inuyasha se fué acercando lentamente y la besó, el beso que comenzó como un tonto accidente empezo a hacerse mas profundo, Inuyasha comenzo a acariciar sus pechos y a recorrer su cuerpo con delicadeza, Kagome que tampoco estaba del todo sobria se estaba dejando llevar, pero no era Inuyasha quien la había encendido, sus pensamientos traían los recuerdos de alguien más, con cada beso era la noche que había pasado con Sesshomaru lo que le venía a la cabeza y cuando fue consciente de aquello y tuvo la determinacion de detener lo que estaba ocurriendo escuchó la voz exitada de Inuyasha decir algo.

- Kikyo.

Lo que estaba ocurriendo no estaba bien, cada uno era objeto de sus propios deseos que no tenian nada que ver el uno con el otro.

- Para Inuyasha, para, por favor - Dijo Kagome seria.

Se safó de los brazos de Inuyasha, su blusa estaba desabotonada y maltrecha, en ese momento parece que Inuyasha tambien habia sido consciente de lo que habia propiciado.

- Lo siento Kagome - Dijo con voz ronca - No quería propasarme contigo.

Kagome no respondió nada, estaba sentada a un lado con la cabeza hundida entre sus rodillas, aunque era Sesshomaru quien rondaba sus pensamientos no podia negar que aun en el fondo sentía algo por Inuyasha y lo ocurrido no había hecho mas que empeorar la confusión que venia sientiendo hacia tiempo y emerger sentimientos que estaban guardados en lo mas profundo de su ser desde hacía un año.

- Sé lo que sientes y he actuado como un animal.

- ¿Como puedes tú saber lo que siento Inuyasha? - Dijo ella casi en un susurro sin levantar la cabeza.

- Sé que me quieres Kagome, no soy tonto - Conforme hablaba, parecia que el borracho de antes ya no estaba - Y esto no ha sido mas que un acto de cobardía, lo siento muchísimo.

- ¿Y aún siendo consciente de lo que sentía te has portado como te has portado todo este tiempo? - Le reprochó Kagome, su voz era pausada, fria.

- No quería perderte Kagome, te aprecio muchísimo como para perderte por intentar satisfacer tus sentimientos.

A Kagome se le hizo un nudo en el pecho, en los últimos diez minutos Inuyasha había sido más franco con ella que en todo el tiempo que llevaban conociéndose, y con un puñado de palabras le había roto el corazón como nadie lo habia hecho nunca, desde el principio se había dado cuenta de sus sentimientos hacia él pero nunca hizo nada, nisiquiera rechazar esos sentimientos del todo y dejar de darle señales confusas todos esos años, incluso en ese momento, las lágrimas brotaban a montones de sus ojos, pero Inuyasha no podia verlo porque ella seguía con la cara hundida en sus rodillas intentando ocultar todo el sufrimiento que la había embargado.

- Vete, por favor - Dijo entre sollozos.

- Kagome, no... - La voz de él sonaba entrecortada - No te voy a dejar aqui sola.

- Pues entonces me iré yo.

- Kagome no hagas ninguna tontería.

En ese instante Kagome se levanto y se metió al baño, cuando se vio al espejo su cara era un desastre, tenía el maquillaje estropeado y la ropa revuelta. Se avergonzó muchisimo de lo que acababa de ocurrir. Se lavó la cara, se limpio los restos de maquillaje, arregló su ropa y cuando salió estaba Inuyasha esperandola sentado frente a la puerta del baño.

- Tenemos que hablar - Le dijo Inuyasha.

- No hay nada mas que hablar, lo has dicho todo ya - Decia ella intentando calmarse.

- Kikyo y yo rompimos.

- ¿Y por eso creeias que yo te iba a esperar con los brazos abiertos Inuyasha? ¿A ser una vez mas tu apoyo y tu paño de lágrimas?

- No es eso Kagome, pero ahora mismo yo tampoco se que siento por ti, solo sé que no quiero que acabemos así.

- Alguna vez sentí cosas por ti Inuyasha, pero eso ha cambiado - No era mentira, lo que sentía por Inuyasha se sacudió el dia que conoció a Sesshomaru y ya se había quebrantado cada una de las veces que la dejó en segundo plano por cualquier otra chica que apareciera. Kagome no creia en el amor a primera vista, pero su encuentro con Sesshomaru habia cambiado sus perspectivas en muchos sentidos.

- ¿Estás con alguien?- Preguntó entre preocupado y disgustado.

- ¿Acaso eso importa ahora?

- A mi sí, soy tu amigo y siento que ya no se nada de ti.

- No te debo ninguna explicación. Y esta claro que solo echas de menos a Kikyo y no quiero tener nada que ver en vuestros asuntos.

En vistas de que Inuyasha no acababa de irse y la conversación se tornaba cada vez mas incómoda, Kagome cogió su bolso y se dispuso a irse.

- ¿Donde vas?

- Te dije que si no te marchabas lo haría yo.

- ¡Kagome no, basta ya de huir!

Como sabía que Inuyasha intentaría impedirselo salio corriendo del pequeño apartamento, corrió por las escaleras, no queria tener que seguir con aquella dolorosa e incomoda conversacion, iría a casa de su madre y en cuanto la cosa se calmara hablaría con Inuyasha y pondría distancia entre los dos. Cuando por fin salió a la calle vió al otro lado que pasaba un taxi vacío y decidio cruzar para cogerlo antes de que Inuyasha la alcanzara.

De repente se escuchó un fuerte golpe y un gritillo ahogado.

- ¡¡¡Kagome Nooooo!!! - Grito Inuyasha que miraba lo ocurrido atónito.

El conductor del coche que había atropellado a la chica se bajó corriendo a auxiliarla, estaba paralizado.

Se acercó a la chica que yacía inconsciente en el pavimento y la llamó por su nombre, sabia perfectamente quien era.

- Kagome... - Su tono de voz era frio.

- ¡Hijo de puta! ¡Mira lo que has hecho! - Le gritaba desesperado Inuyasha, se acercó a la chica y fue a levantarla del suelo.

- Detente, llamaré una ambulancia. - Dijo el piloto del coche intentando guardar la calma.

- Si le pasa algo a Kagome te juro que las pagarás.

Sesshomaru le lanzó una mirada asesina, dandole a entender que lo ocurrido no era del todo su culpa, le parecía casi imposible que en una ciudad tan grande, con millones de personas, el destino le hubiese jugado semejante mala pasada y hubiese sido él quien acabara dañanado a aquella joven.

Inuyasha solo decia el nombre de la chica que permanecía inconciente en el suelo, su tono de voz denotaba mucho nerviosismo.

- ¿Estas borracho verdad? - Le preguntó Sesshomaru con desprecio - Deberias irte y aparecer cuando no des tanta verguenza ajena.

- Callate idiota, no estoy para tus tonterias.

- ¿Te habias peleado con tu querida novia?

- Kagome y yo no tenemos ese tipo de relacion, es mi mejor amiga y ahora la voy a perder por mis tonterias - No aguantó mas, su tono de voz se quebró y se le empezaron a escapar algunas lagrimas que sorteó para que Sesshomaru no se percatase.

Sesshomaru se dió cuenta de lo que ocurria, pero no dijo nada, estaba atónito ante aquella confesión, la desconocida de hace un año resultó no ser novia del hijo bastardo de su padre, la chica no había intentado utilizarle como supuso en determinado punto.

Ahora su obligación era garantizar que la chica se recuperase, que le dieran la mejor de las atenciones médicas y de tratar que el patetico y borracho de Inuyasha no complicara la noche que ya parecía un cuento de terror de por si.

Continuará...