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sunghoon boto el condón, limpiándose a el y a su chico con una toalla húmeda.

Ambos se recostaron sobre su espalda, observando, ahora solo quedaba el ruido de sus respiraciones.

sunoo le tomó la mano.

-Sabes. - Hablo.- Cuando te corriste dentro de tus pantalones mientras recién empezaba, no creí que serías tan bueno. Pero ahora me duele la garganta.

sunghoon le sonrió, dándose la vuelta para apoyarse en su pecho y abrazarlo. Tenía sueño y estaba cansado, jamás se había corrido dos veces seguidas.

-Eres un buen chico.-Dijo sunoo, acariciándole el
sudoroso cabello con los dedos.

sunghoon sonrió, besando el pecho en forma de
agradecimiento, sunoo bajo sus caricias a su espalda y
luego colocó su mano en su trasero, dándole suaves palmaditas. sunghoon soltó un bajito quejido desde su garganta, con los ojos cerrados mientras acariciaba con su nariz el pecho contrario.

-¿Por qué me das nalgadas si soy un buen chico? - murmuró en un tono somnoliento, haciendo reír al mayor. sunghoon sintió como su pecho subía y bajaba, era relajante.

-Son de cariño. - Le respondió con una sonrisa,
dejando su mano quieta en su cintura

sunghoon se durmió luego de ello.

En cuanto despertó, seguía entre los brazos de sunoo Ambos estaban de lado, lo primero que vio al despertar fue el huesudo torso de sunoo, el menor le abrazaba por el cuello. Alzo su vista para ver su rostro, al parecer entre sus manos traían un libro, ya que estaba observando fijamente algo tras su cabeza, volteo el rostro para observar que así era, sunoo estaba leyendo un texto, sin dejar de abrazarle.

Dios, sunoo no iba a dejar sus estudios de lado jamás.

-Despertaste, dormilón.

-¿Tu no dormiste?-murmuró volteando a ver la hora, notando que ya era tarde.

-Tenía cosas que hacer.-le contestó simplemente, retirando el brazo que había colocado bajo su cuello y sunghoon hizo un puchero.- ¿Quieres algo, amor?-susurro con una sonrisa.

-Beso.

sunoo cumplió su pedido de inmediato, mucho más dulce.

ANIME BOY •SUNGSUN•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora