1. Mu Qing no supo que decir

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Había sido una misión.

Realmente, solo había sido una misión.

Algún demonio con lo que los aldeanos tenían problemas e hicieron sus rezos respectivos a Su Alteza el Príncipe Heredero quién era el dios de esa zona. Xie Lian sintió que era divertido e invitó a Feng Xin y Mu Qing para eliminar al demonio y luego pasar el rato. Se despidió de Hua Cheng con unos besos y le prometió volver en unos días.

Ese demonio había resultado ser mucho más problemático...

...pero no era mucho problema, enserio, solo una noche más de descanso y arreglarían el asunto.

...

...

...

Un pequeño bebé dormitaba en los brazos de Mu Qing.

Feng Xin seguía sorprendido, una vez más, levantó con cuidado la túnica que tapaba al bebé y preguntó. —¿Realmente funcionó? ¿Sigue dormido?

Mu Qing puso los ojos en blanco: —¿Qué acaso no lo ves? —hizo un ligero gesto al bebé que se removió ante el movimiento —. Agradece que todavía soy capaz de recordar los olores de la reina, de lo contrario seguiría chillando.

Al despertarse inesperadamente como un bebé —producto de una maldición —, Xie Lian había llorado incansablemente, no tenía ninguna memoria actual, se había convertido en un cachorro de omega que estaba en un lugar desconocido y lloraba por su madre.

Feng Xin y Mu Qing casi caen de la impresión al descubrirlo por la mañana.

Al sostenerlo —fue Mu Qing quién lo hizo, Feng Xin estaba demasiado nervioso para eso —, Xie Lian se retorcía con aún más fuerza, se negaba, lloraba y gritaba; dejando aún más nerviosos a los dos dioses.

Hasta que Mu Qing de repente alcanzó una idea —¡Los olores! — y junto a Feng Xin trataron de recordar la esencia completa de la reina de Xian Le.

Pero había pasado tanto tiempo y solo sabían que ella olía a orquídea porque Xie Lian mismo lo portaba por ser su herencia. 

¿Era orquídea y qué? ¿Orquídea y manzanilla? ¿Orquídea y flor blanca? ¡¿Cuál era?!

Al final, lograron recordarlo y Xie Lian por fin se calmó cuando su tierna nariz olfateo dicha esencia mezclada con leche, queriendo buscar más y acurrucándose.

Feng Xin todavía no salía de su sorpresa: —Es increíble que el olor de la reina lo calme.

Mu Qing puso los ojos en blanco otra vez. —Lógico, ella era su madre. Probablemente era la única que lo cargaba en ese entonces.

Feng Xin no compartió su opinión, pero esta vez optó por no discutir. La imagen de Mu Qing sosteniendo cuidadosamente a un bebé —un bebé que no era nadie menos que Xie Lian —, era demasiado como para querer perdérselo. Y por favor, súmele que Mu Qing estaba llevando una túnica de Xie Lian encima y estaba produciendo olores suaves por sí mismo.

¡Mu Qing! ¡Mu Qing olía a leche! ¡Y cargaba un bebé!

Un bebé muy bonito debía decir. Feng Xin nunca creyó que alguna vez vería a Xie Lian de esta forma.

Mu Qing arrugó la nariz al olerlo. —Si estás tan emocionado, ¿por qué no lo cargas tú?

—A ti se te da mejor esto.

Alzando una ceja, Mu Qing estuvo a preguntar si decía eso solo por ser un omega, cuando de repente sintió un pequeño movimiento y levanto la manta para ver a Xie Lian.

Ambos dioses vieron al cachorro abrir lentamente sus perezosos ojos, su expresión denotaba sueño. Parpadeo un par de veces más y cerró los ojos al soltar un bostezo, sus pequeños labios formando un "o" adorable. Cuando sus ojos alcanzaron más claridad, levanto la cabeza y miró a la primera persona cercana a él.

Mu Qing volvió a taparlo antes de que Xie Lian le viera el rostro. Un pequeño quejido se escuchó debajo de la manta.

—¿Qué haces? —le susurró gritando Feng Xin.

Se confundió un poco cuando una voz le respondió por su matriz espiritual. —¿Eres tonto o qué? ¿Cómo crees que va a reaccionar si ve una cara desconocida con el olor de su madre?

—Es un bebé, no creo que se de cuenta.

—¡Desde el vientre los bebés ya reconocen a su madre! Que le haya engañado con el aroma ya es bastante bueno. Si me escucha hablar va a ser lo mismo.

En su interior, Mu Qing no pudo evitar pensar que debió adoptar una forma femenina —aunque le daba repelús —, para hacer el truco más creíble. ¿Cuánto tiempo caería Xie Lian en esto? No lo sabía.

Feng Xin le dijo. —Bueno, al menos déjame verlo. No fingiré ser el rey.

Feng Xin de repente recordó a su hermano mayor, su gege también era un omega con el mismo olor que él, pero más suave y atraía a muchos cachorros desde que era un joven hasta que era un adulto con su cachorro propio.

Dejó ir el pensamiento, su hermano se había ido hace mucho y era mejor no perturbar su memoria.

Inclinándose, Feng Xin levanto con cuidado la manta y miró a Xie Lian.

Un sorprendido cachorro de ojos redondos lo recibió.

—... —ofreciendo un dedo, Feng Xin tentó —Eh, Pequeña Alteza...

Mu Qing trató de no reaccionar con ese suave "Pequeña Alteza". Si bien no veía a Xie Lian, si sintió cuándo el cachorro se dio la vuelta, evitando a Feng Xin y hundiéndose más en Mu Qing.

Feng Xin. —...

Mu Qing trató de no reír. La pequeña sonrisa en sus labios se borró por completo cuando momentos después, sintió cómo el niño se inclinaba y parecía buscar algo en él.

El cachorro comenzó a quejarse al no hallar aquello de lo que prenderse y alimentarse de su "madre".

Congelado, Mu Qing fue testigo de que el pequeño príncipe comenzó a llorar. Feng Xin lo vio desconcertado, al inicio no entendió lo que Xie Lian quería, pero tras pensarlo un poco más, lo comprendió.

—Oh —dijo —, tiene hambre.

Y como Mu Qing era su "madre", por supuesto, Xie Lian se aferraría a él.

Mu Qing no supo que decir, múltiples colores pasaron por su rostro.

...Que mierda.

Para colmo, Feng Xin preguntó. —¿Qué tal si lo...?

Mu Qing. —...

Mu Qing no le pegó una bofetada solo porque tenía a un bebé —que pretendía morderle un pezón —hambriento en brazos. 

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JSJJS ¿Creen que MQ lo amamante? 

Dato curioso. MQ como mortal es un omega, pero ante los cielos él adopta la forma de un alfa y sus adoradores también lo toman como alfa. No es muy diferente en su forma original, solo algo más alto y rasgos menos delicados (pero sin dejar de ser él). Ahora mismo por XL ha vuelto a su forma omega para consolarlo. 

Actualizaré mañana o pasado mañana. 

"El pequeño Gege era tan tierno"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora