My Little Pony: La Venganza de los Petrificados

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Plano Astral

Opaline alzó el vuelo, y encaró furiosa a Twilight y a Sunny por igual.

- ¿Creen que les tengo miedo? - exclamó la alicornio malvada, aunque en su voz había cierta incertidumbre - ¡Un show de lucesitas y un arcoíris no bastarán para acabar conmigo! Fue su estúpida unidad y sus ridículos planes lo que acabó con esos 3 ineptos - señaló ella - Pero yo tengo los Cristales y a sus amigos. ¡Yo tengo la ventaja en esta pelea!

- Oh, pero no usaremos la Magia de la Amistad contigo, Opaline - declaró Twilight con cierto tono juguetón - Sería un desperdicio de magia, de todas formas

- Cierto - concordó Sunny, sonriendo de forma burlona igualmente - Además, puede que tengas a nuestros amigos, pero la ventaja no es tuya del todo. Nosotras tenemos algo mucho mejor...

Antes de que Opaline pudiera siquiera cuestionar el qué tenían que ella no, tuvo que activar un escudo para protegerse a duras penas, puesto que notó de reojo como Twilight había cargado su cuerno para lanzarle un potente ataque que solo la empujó hacia atrás de no ser por el escudo.

Una vez el ataque se disipó, Opaline desactivó su escudo y miró indignada a Twilight y a Sunny por igual.

- Tenemos fuerza bruta - dijo Twilight, con una sonrisa que puso la piel de Opaline de gallina

- Mucha, mucha fuerza bruta - dijo Sunny con la misma sonrisa

Opaline tragó nuevamente, pero sonrió para tratar de infligir temor en sus contrincantes.

- Bien - declaró Opaline - ¡Que empiece el juego!

Opaline salió disparada hacia el suelo, y Twilight y Sunny decidieron hacer lo mismo.

Una vez que estaban lo suficientemente alto, Opaline literalmente encendió su cuerno en llamas y comenzó a disparar múltiples láseres de fuego contra las otras dos alicornios.

En el aire, Sunny y Twilight esquivaron dichos láseres como si nada, y mientras que Twilight se transportó a otro lado, Sunny cargó un ataque similar cargado de luz, y lo lanzó contra Opaline.

La alicornio malvada activó un escudo que la protegió del ataque de Sunny, pero solo protegió su parte delantera, porque su retaguardia seguía expuesta. Y como consecuencia, Twilight apareció detrás de ella con un ataque ya cargado y lo lanzó contra Opaline, dejándole una muy fea marca en su espalda.

Opaline gruñó furiosa, por lo que se multiplicó a sí misma y envió a su clon a encargarse de Sunny para hacerse cargo de Twilight ella misma, lanzando múltiples ataques con su cuerno contra la otra alicornio.

A continuación, Twilight comenzó a moverse con agilidad por el aire mientras esquivaba más de los ataques de Opaline. Luego, comenzó a volar de vuelta hacia Opaline, usando sus alas para protegerse del último rayo que la alicornio malvada le lanzaba. Al desplegar sus alas, soltó un rayo muy potente que mandó a Opaline hacia el suelo.

Mientras tanto, Sunny se envolvió a sí misma en un escudo de color amarillo, luego salió disparada hacia la copia. Esta imitó la acción de Sunny: se envolvió en un escudo de color morado y se abalanzó contra ella. Al chocar ambos escudos, salieron empujadas hacia atrás; pero la copia de Opaline aprovechó para apagar el escudo y lanzar otro rayo hacia Sunny, la cual esta esquivó el ataque rápidamente mientras también apagaba el suyo y se lanzaba de nuevo hacia la copia, encestándole un puñetazo en la cara. Furiosa, la copia usó su magia para mandar a Sunny hacia el suelo, donde ella aterrizó sin sufrir daños, pero se movió a tiempo para esquivar otro ataque de la copia.

De pronto, Sunny se elevó en el aire nuevamente y cargó su cuerno, lanzando otro ataque contra la copia, mientras que la copia hacía lo mismo y disparaba otro ataque de fuego contra Sunny. Ambas estaban muy igualadas en poder, pero incluso con toda la magia contenida en los Cristales, la determinación de Sunny era tan grande que su ataque logró sobrepasar al de la copia, la cual terminó siendo atravesada por el ataque, y por ende, se convirtió en polvo.