SODOMIA; el placer por lo prohibido | BL #1

Capítulo VI

Luego de haber saciado su placer con el cuerpo de Juha, Caín busco en la guantera algunas toallas húmedas o algo para poder limpiarlo, una vez que lo hizo recostó a Juha en el asiento trasero y lo cubrió con una chaqueta para el frío bastante grande. A continuación; Caín se pasó al asiento delantero del conductor y se digno a manejar con destino a un hotel cercano para pasar la noche,  ya que no pretendía llevar a Juha a su casa en dicho estado donde claramente se ve muy agotado.

Una vez entraron Caín lo recostó en la cama y lo desnudo, fue al cuarto de baño para comenzar a lavar el cuerpo de Juha con toallas remojadas en agua tibia y obviamente no iba a dejarlo sucio, por lo que tuvo que limpiarlo en su interior también, sacando con sus dedos lo que restaba de semen. Por supuesto Juha se removió y soltó unos que otros quejidos casi inaudibles por el tacto, pues estaba profundamente dormido y agotado; cuando Caín termino su tarea, lo vistió con una bata de baño y lo dejo arropado en las frazadas blancas de aquella cama de hotel. Y una vez estuvo seguro de que había terminado con Juha, prosiguió a lavarse él y mientras las gotas de agua caían por su cuerpo y mojaban su cabello; él solo podía pensar una y otra vez en lo que hace unos momentos vivió con su hyung, la imagen de Juha devorando su miembro con esa mirada lasciva que derramaba lagrimas, el dulce sabor de su cuerpo, sus fluidos, el sonido de sus cuerpos chocando, su cabello rosado empapado en sudor moviéndose simultáneamente al ritmo de las embestidas y el como Juha gritaba de placer. Todo eso lo hacía volver a vivir esos momentos una y otra vez y por supuesto, lo hizo pensar en las consecuencias y en como es posible que él, quien aseguraba con su propia alma, era asexual hubiera tenido una noche tan caliente con un hyung al cual apenas había conocido.

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|10:00am - Martes|

Ya era otro día y había amanecido hace ya un tiempo pero Juha parecía no importarle, no fue hasta que su teléfono comenzó a sonar como loco por culpa de una alarma ¿Pero que alarma?. "Aah~ mierda.." murmuró Juha con una voz gruesa. Al darse Cuenta que no iba a detenerse, con el cansancio de su vida y el dolor de cabeza como si fuera bebido hasta emborracharse; Juha se digno a mirar su telefono  y en ese preciso momento pudo asegurar ver su alma yéndose lejos.

Se trataba de una alarma que había puesto justo para las 9:47 am ya que se suponía comenzaría su postgrado en arquitectura y no podía llegar tarde, ¿que clase de imagen le daría a los profesores? Esté salto de la cama e inmediatamente se desplomó en el suelo debido a un fuerte dolor en su parte baja, fue ahí donde recordó todo lo que había hecho ayer y de donde encontraba. Se avergonzó de inmediato al recordar los sonidos que dejaba salir y las palabras de Caín que no se iban "haré que te corras por detrás"... Según Juha él estaba seguro de que sería imposible pues nunca le había pasado eso y parece que cantar victoria muy rápido no siempre es lo correcto, efectivamente Caín cumplió su palabra agotando terriblemente a Juha y este lo reconocía. Dejo salir una pequeña risa frustrada acompañado de unas palabras:. "Parece que me recibieron muy bien aquí en Corea". Murmuró sobando su columna baja, luego de una noche tan bestial era claro que terminaría así y por supuesto debía ir a la farmacia a comprar medicina.

Juha había perdido sus clases de la mañana por lo que estaba preparándose para ir al médico y pedir una receta médica y así poder justificar su falta a clases, no podía pedir una licencia ya que apenas hoy era su primer día y si, quizás necesite descansar pero en momentos como este no se puede permitir. Debía dar lo mejor de si para completar sus últimos semestres de arquitectura aquí en Corea.

Se apresuró lo más que pudo y se marchó del hotel, fue directo a su casa donde nadie lo esperaba, supuso que Dai estaba en clases su madre en algun salón de belleza y el Sr. Yashiro en su trabajo. A decir verdad era mejor así, de esta manera no tendría que explicarle a nadie porque no llego la noche anterior pero, en lo más profundo de su alma la idea de que alguien lo interrogará no le parecía tan mala.

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"Caín ¿Porque no volviste? Y Juha tampoco regreso... ¿Por casualidad no te encontraste con él?". Dai preguntó intrigado pensando en que quizás su hermanastro se había topado con Caín y lo acompañó, eso lo haría sentir más tranquilo.

"¿Q-que? Nunca me encontré con él. Iré a buscar algo para beber ya vuelvo". Caín se sentía ansioso por la suposición de su amigo y no estaba tan equivocado, él si estuvo con su hermanastro y lo mantuvo ocupado toda la noche... A decir verdad Caín no podía dejar de pensar en aquella experiencia y en la sensación que tuvo al sentir el interior de Juha comprimirse y su piel suave bajo su cuerpo erizada, pensar en él lo emocionaba mucho era un sentimiento de placer que nunca antes había sentido.