SODOMIA; el placer por lo prohibido | BL #1

Capitulo VIII

Caín abrió el trasero de Juha con ambas manos robándole un gemido de placer con dolor; ya expuesto de tal manera: Cain prosiguió a meter su lengua en el interior de Juha. Su lengua era un poco larga y había encontrado por fin algo en que usarla, Cain lamió y chupó cada extremo del trasero de Juha mientras que este agonizaba entre vergüenza placer y dolor, Juha gemía con intensidad cuando Cain introducía su lengua en él y abría más y más su agujero. Nunca había sentido algo así en su vida, sintió lubricantes y cientos de cosas "normales" pero nunca había tenido el placer de sentir una lengua ahí abajo y mucho menos que fuera tan larga. Caín adoraba escuchar la voz de Juha y como lloraba diciendo que "era imposible venirse así, que simplemente se detuviera" Caín por supuesto eso lo hizo querer hacerlo más, asi que imitó pequeñas embestidas con su lengua mientras mantenía abierto el trasero de Juha. Pronto comenzó a notar cómo las piernas le temblaban en sus hombros y como su agujero le apretaba su lengua cada vez más, y ni hablar de los gemidos de Juha que parecían ir en aumento, ya no gemia ahora estaba empezando a gritar y jadear por lo que Caín con poca movilidad tomó la almohada que estaba cerca de sus manos y tapó la cara de Juha.

Juha notó a Caín mirándolo aún con su boca en su trasero, entendió lo que quiso decirle así que soltó las sábanas y tomó la almohada para morderla cuando sintió la lengua de Caín moverse dentro de él y de pronto otra vez su cuerpo empezó a temblar por completo y ahogó sus gemidos y sollozos llenos de placer en aquella almohada que mordía y jalaba con una expresión realmente saliva. Sus miradas conectaron y Caín pudo ver esa mirada tan jodidamente sexy: sus ojos llenos de lágrimas su flequillo empapado de sudor, su rostro entero rojo de la vergüenza, su boca mordiendo esa almohada y sus cejas curveadas hacia arriba expresándole el grandioso orgasmo anal que lo estaba teniendo hacer sin siquiera tocar su próstata. Cuando Caín logró salir de él miró desde arriba como el abdomen del pálido estaba empapado de sudor y semen.

"Dijiste que era imposible, ¿no crees que es una lástima que se desperdicie así?" Caín tomó con sus dedos semen de Juha y miró sus ojos mientras lamía uno de sus dedos.

"N-no hagas eso, es sucio". Juha desvió su mirada con el ceño fruncido y avergonzado.

"No te preocupes es dulce, además no puedo dejar que se desperdicie ¿Cierto?" Con el resto de semen que aún quedaba en sus dedos; llevo su mano hasta el trasero de Juha y lubricó su culo metiendo un dedo, luego dos , luego tres, luego cuatro.... Juha lloraba en esa almohada que estaba empapada de todo tipo de fluidos con sus piernas temblando pidiendo que parara.

"¡Ya por favor! ¡Mételo ya!" Juha pidió en un sollozo mientras los dedos de Caín salían y entraban con rapidez.

"¿Que meta que cosa en donde?" Siguió haciéndolo más rápido embistiendo con sus dedos en el culo de Juha con más fuerza. "¿No me lo dirás? Bien". Caín presionó sobre el vientre de Juha e intensificó sus embestidas y sus dedos se movían hacia arriba presionando su próstata una y otra, y otra, y otra vez sacándole un grito que no pudo ahogar.

"¡AAH!~ ¡Por favor C-Cain! Nghhh~" Juha no podía hablar bien ni siquiera, sentía que moría por todo ese placer.

"¿Por favor que?" Pregunto Caín aún sin detenerse, amaba escuchar a Juha y verlo hecho un desastre.

"Por favor ¡Por favor Caín mete tu pene en mi" Juha sentía que se vendría en cualquier momento, no podía respirar bien por la presión que sentía pero como lo estaba disfrutando. "Follame Cain~". Dijo con el poco aliento que tenía mirando fijamente lo ojos de Caín y viendo cómo esté frunció su ceño al verlo así.

Saco sus dedos del interior de Juha de manera bruta viendo temblar las piernas de Juha y como este pegaba sus rodillas, en la cabeza de Caín habían cientos y cientos de posiciones que quería hacer con él, Caín había pensado en todas y cada una de las maneras que existían para hacerlo correrse hasta que solo saliera agua y si no existían él no tenía problema en crearlas.