En Familia 3-3

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Como siempre perdón por cualquier error.

Gracias por sus comentarios uwu







Un silencio sepulcral invade la mesa, los adultos miran incrédulos a la pequeña bicolor, la cual se extraña al notar la expresión de sus mayores, llena de confusión, sin embargo todos ríen ligeramente, ya que piensan que Argentina está diciendo una broma.. O casi todos, pues Nueva España está muy pensativo al recordar la charla que tuvo con México hace semanas, y de pronto cree en la posibilidad de que su pequeña paciente pueda ser su pariente. 






-Cariño, debiste ver mal, esa niña pertenece a otra familia que no es la nuestra y… Ummm ahora que la veo no se parece a ninguna de esas personas. - 





-No, mami, sho si vi bien, su marca es igualita a la que tenemos nosotros, incluso la tiene en el brazo al igual que Colombia y yo. - 




Insiste Argentina ya un poco molesta y desesperada, más aún al ver la incredulidad en los semblantes de su madre y abuela ¡Qué tercos son los adultos! 



Aún así nadie se atreve a decir palabra alguna, únicamente se dedican a mirar hacia donde México se encuentra, eso al menos hasta que, de manera súbita Imperio Español se pone de pie, y sin decir o mirar a su gente va con rumbo a la mesa de los asiáticos. 



-¿Madre? ¿A dónde vas? Madre, espera… - 





-Al que me siga lo desheredo. - 





Lo dicho por la omega congela a sus hijos en su lugar, aunque a Nueva España lo detiene su omega, pues perfectamente sabe que a su marido no le interesa en lo más mínimo el dinero de la mayor, la cual avanza tranquila al saber que sus hijos no la van a seguir. 








Mientras tanto con México y su familia, la menor se niega a comer unas verduras que le fueron traídas recientemente, incluso aleja el plato tanto como le es posible, pero Bao se lo vuelve a acercar, ganándose un puchero de parte de su hermanita. 




-México, debes comer tus verduras también, o te quedarás pequeñita para siempre ¿Quieres eso? - 





-Ño, pero es que mi panshita ya está muy llena, abuelita. Voy a reventar si como más. - 






Responde México mientras vuelve a alejar el plato, y si bien no miente con el hecho de estar satisfecha, la verdad es que las verduras no le gustan mucho. 


Ahora es China quien aleja el plato, tras lo cual, y con ayuda de un pañuelo de seda limpia la carita de la menor, pues detecta el aroma de los latinos en su hija, cosa que desagrada a la asiática (Nota :no es que los latinoamericanos huelan mal, sólo es el instinto protector de China) pero cesa su acción al ver que alguien se acerca hacia donde ellos se encuentran. 



Pensando que quizás se trata de un mesero, China voltea hacia su costado, solo para sentir como la sangre se le congela en las venas , pues la persona que va hacia ellos es esa misma mujer de la otra ocasión (Referencia a autocastigo) 


Claramente puede sentir como el corazón le late con fuerza en su pecho. Desea enormemente tomar a México y salir huyendo de allí.. Pero sería algo muy sospechoso, incluso para su familia, así que se obliga a mantener la calma. 




También los asiáticos notan la presencia de Imperio Español, pero a diferencia de la de cinco estrellas, ellos creen que la fémina es sólo un administrador más de Mongolia, así que únicamente dejan de hablar cuando la europea está ya frente a su mesa. 


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