IMPERIO DE MENTIRAS

5 "Kevin"

Kevin Jones era el único hijo de Tom, pero hace tiempo decidió irse a estudiar actuación a Nueva York. Quiso regresar cuando se enteró de la muerte de su tío, pero su padre se lo impidió, además de que tenía exámenes y le era imposible regresar.

Uno de los choferes lo fue a recoger al aeropuerto. Se quitó los lentes de sol cuando llegó a la casa y bajó de la camioneta.

- Gracias

- En un momento llevo sus maletas

- Si, no sé preocupe

El joven entró a la casa y esta seguía siendo igual, el mismo aspecto deprimente de siempre. Estuvo mirando el lugar hasta que Alice bajó.

- Kevin - llamó la atención de su sobrino

- Tía Alice - sonrió a la mujer y se acercó para darle un abrazo - Dios, estás hermosa

- Gracias y tú sigues igual de guapo

- Como siempre

- Me da gusto verte. Tengo que dejarte porque tengo que ir a hacer unas cosas pero te quedas en tu casa y espero, me hayas traído algo

- Traje regalos para todos

- Me gusta como suena eso - besó la mejilla de Kevin - nos vemos más tarde, tu papá nos dijo que llegáramos temprano para que cenaremos temprano

- Bien. Que tengas un lindo día

- Gracias... Oye, ¿Josie por qué no vino contigo?

- Tenía cosas que hacer aún en Nueva York ¿Quién está en la casa?

- Hermione, Betty, Juguead, Fred, Jellybean, Penélope y Sierra... Ah y Gladys - puso los ojos en blanco

- Iré a saludarlos en ese caso

- Claro

- ¿Siguen tensas las cosas?

- Poco... La investigación aún no se cierra y todos tenemos nuestros propios problemas

- Fue horrible

- Fue mejor que no estuvieras aquí

- ¿Tan feo estaba todo?

- No tienes idea, pero bueno, se me hace tarde. Me dio gusto verte, nos vemos al rato

- Adiós tía - vio a Alice alejarse

- Una cosa más Kevin - se giró para mirar a su sobrino - ten cuidado con lo que escuchas, lo que ves y lo que dices

Con Kevin en la casa, las cosas se ponían más difíciles porque era demasiado curioso y ella no podía permitir que Kevin se enterara de lo suyo con FP. Tendrían que ser más cuidadosos.

La rubia salió de la casa y subió a su auto. Estaba harta de Hal, Gladys, de tener que estar fingiendo algo que no era, que FP no se divorciara. Quería exclusividad de parte de él, en especial ahora, pero era algo que ya vería como resolver, aunque no tenía mucho tiempo. Tuvo que pasar una noche con Hal hace unas semanas y fue asqueroso, pero necesario. Tuvo que pasar horas en la regadera para intentar quitarse todo rastro de él.

A lo lejos vio a Gladys en su caballo y encendió el auto y arrancó para pisar el acelerador. No soportaba que esa mujer durmiera en la misma cama que FP.

- ¡Fíjate! - grito Gladys tratando de controlar a su caballo que se había alterado cuando la rubia pasó a su lado en el carro a toda velocidad

Entre más lejos estuviera de esa mujer, mejor. Pues a ella le parecía insoportable.