𝙲𝙷𝚁𝙸𝚂𝚃𝙼𝙰𝚂 𝙼𝙸𝚁𝙰𝙲𝙻𝙴

𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 𝙵𝙸𝙽𝙰𝙻

ESTA NAVIDAD

SeokJin estaba sentado en el cementerio de la iglesia para su cumpleaños número veinte. Ya no tenía frío, ni usaba unos delgados jeans y camiseta, ni se cubría con una manta. Él estaba sentado en la banca, una pierna debajo de él, viendo a la iglesia. Él estaba haciendo nuevos recuerdos —su chaqueta era cálida, sus jeans eran nuevos— y todo lo que realmente le faltaba era JungKook.

JungKook con quien él vivía, JungKook a quien él amaba. Se apoyó con los brazos cruzados a lo largo del asiento, enfocándose en los intrincados detalles de la vieja iglesia, entonces cerró los ojos y contó el tiempo hasta que su novio llegara con él.

—No puedes dormir aquí. —una fuerte voz quebró sus sueños diurnos, giró la cara para ver al policía.

—Lo siento, oficial. —sonrió cínicamente inclinándose contra el asiento y enganchando el dedo en las presillas de los jeans de JungKook, causando que se tambaleara y se sostuviera de la banca.

—Me empujaste y puedo arrestarte. —JungKook señaló, levantando sus cejas en una seria expresión.

—¿Eso es una promesa? —Jin contestó con una enorme sonrisa, y jaló de nuevo a JungKook hasta que quedó sentado al lado de él en la banca.

—Infiernos, solías ser tan malditamente inocente. Ahora solo amas jalarme a tu alrededor.

A ellos no les molestaba el complejo de cavernícola que parecía estar surgiendo en SeokJin. JungKook aún seguía guiándolo y Jin era feliz siguiéndole la corriente. Y hasta hace poco era así. Él flexiono los músculos de sus brazos y jaló a su amante para robarle un beso.

—Lo estás haciendo malditamente fácil, me alimentas y me empujas al gimnasio todo el tiempo. —eso era una broma. Realmente SeunGi era quien los alimentaba a ambos, JungKook trabajaba largas horas y Jin llenaba su tiempo estudiando tanto como podía. Ellos inevitablemente llegaban a su casa a horarios diferentes, encontrando lo que la mamá de JungKook les ofrecía y ellos nunca decían no.

En cuanto al gimnasio, Jin alternaba entre correr e ir al gimnasio, su largo y delgado cuerpo estaba volviéndose firme y musculoso y Dios, JungKook lo disfrutaba. Eso era en parte la razón para que SeokJin se mantuviera en forma y mejorara lo que había sido.

JungKook se apartó ligeramente.

—Feliz cumpleaños. —murmuró contra los labios de Jin, quien inclinó la cabeza para profundizar el beso, chupando la lengua de JungKook lenta y sexualmente, era una forma de hacer el amor que disfrutaban, hasta el momento de estar exhaustos. Sin palabras, Jin fue el que terminó el beso y tomó la mano de JungKook para que se levantara de la banca y caminaran el corto trayecto a casa.

Ellos caminaron por poco más de diez minutos pasaron por la plaza de la ciudad vieron a JiSoo quien aún vivía con SeunGi, y que no pasaba del toque de queda con su novio. Levantó la vista y vio el reloj sobre la biblioteca donde él se la pasaba estudiando. Eran las nueve y media, dándose cuenta lo mucho que el simple reloj guiaba su día.

JungKook se detuvo en la tienda saludó a la señora Johnson y le agradeció por las donas que había llevado a la estación el día anterior. Entonces guió a Jin hacia su casa.

Las cortinas estaban abiertas y vio los pequeños tres arboles frente a la ventana. Las luces no estaban encendidas cuando llegaron al camino. Jin se había opuesto a dejarlas encendidas cuando salían de la casa.

Usando su llave lo dejó entrar, JungKook se reía mientras Jin lo empujaba contra la pared tan pronto cerraron la puerta. Jin se detuvo un momento para ver los ojos de JungKook llenos de absoluta seguridad, confianza y amor. Se preguntó cómo había sido tan afortunado.

Habían pasado dos años desde que se habían encontrado en la helada noche. Sus sueños entonces consistían solo en un cuarto caliente, luces de navidad y una amorosa familia, soñaba que serían diferentes de los que en realidad tenía. Dos años y tres días después más unas horas más o menos.

Él ahora vivía en un mundo seguro, feliz y amado. Con JungKook a su lado en cada paso del camino, él no podía esperar para caminar hacia su futuro.

Fin

Espero realmente le haya gustado, gracias por sus votos y comentarios, cuídense y pasen una bonita navidad y año nuevo junto a sus seres queridos, personalmente, no disfruto mucho de esta época y menos ahora que SeokJinnie lo estará pasando lejos de su familia y de los chicos, bueno, no los quiero poner melancólicos, así que me despido con un abrazo virtual y deseándoles lo mejor para el siguiente año ✨