Luzu se encontraba minando algunos recursos que Vegetta le mando a buscar ya que eran escasos en el pueblo y tenia que recolectar bastantes para que duraran mas tiempo que los anteriores que habian llevado Rubius y Lolito.
Luzu seguia minando despues de horas y aun no conseguia esa cantidad que Vegetta le habia pedido, sin embargo se adentro mas en la mina, asi que iba dejando sus antorchas que daban una tenue iluminasion a la mina pero al menos podia ver e identificar los recursos que necesitaban, ademas de algunos extras.
Despues de unas horas Luzu ya estaba muy metido en la mina, tanto que ya habia llegado a una zona donde se reportaron muchas desapariciones de los mineros, los demas trabajadores decian que desaparecian despues de escuchar una voz "angelical" que los llamaba a adentrarse a la mina.
Esta zona aun no era explorada por el miedo de los mineros de desaparecer, muchos tenian familia asi que Luzu lo comprendia, ademas de que la mina era bastabte oscura y profunda como para que explorara toda.
Despues de aproximadamente dos horas minando Luzu se sento a descansar, comer algo y tomar agua, viendo su reloj ya estaba anochesiendo asi que decidio que se armaria un pequeño e improbisado campamento en esa zona para pasar la noche dentro de la mina.
El lugar era frio, oscuro y humedo, pero se las arreglo para que no pasara tanto frio y pudiera dormir comodamente, sin mojarse ni nada, ademas de asegurarse de estar fuera de peligro ya que las minas de noche son peligrosas.
Despues de asegurarse estaba listo para dormir ccuando escucho algo que llamo su atencion, una voz, mas que una voz, era un canto, un canto angelical que le llamaba a seguirle.
Al principio Luzu resistio la tentacion de seguir aquel canto que le llamaba en buqueda.
Despues de un rato escuchandolo sin poder dormir decidio levantarse para ir a averiguar de que se trataba aquel canto, sin embargo, se escuchaba demasiado lejos como para encontrarlo rapidamente, y mas en una cueva no explorada.
Luzu se alisto y armo, estaba listo para ir en busca de aquella voz, aquella voz tan misteriosa pero hermosa a la vez que le llamaba tanto la atencion y despertaba en el la curiosidad.
Asi empezo su rumbo a encontrar esa voz, camino por varios caminos, algunos sin salida, otros demasiado largos como para seguirlos.
En ese tramo recogio algunos de los recursos que Vegetta le habia pedido llevar, aprovecho ir a investigar para buscar aquellos recursos tambien.
Camino y camino hasta llegar a una especie de ruina, parecia una ciudad abandonada, parecia estar sin habitar por miles y miles de años.
Eran ruinas que parecian ser de una glamurosa ciudad en sus años dorados, no parecia ser de las ruinas que los mas viejos le contaban, parecia mas antigua.
Exploro mas aquellas ruinas hasta llegar a algun tipo de templo, parecia igual abandonado, pero este se encontraba en muy buenas condiciones, asi que entro en el templo abandonado.
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