Pov Narrador.
Laura Villa, mejor amiga de la morena, desde que Daniela desapereció se volvió mas unida a Maria José, quiso entender tambien el porque le habian hecho eso a su amiga pero no mas cerró a escuchar teorias.
Le vivía diciendo siempre a Maria José que no valia la pena estar triste por alguien que no tuvo el valor de despedirse, tuvieron varias discusiones por ello y una de esas la había escuchado Sofia.
— Tía!.— La pequeña castaña entra a la oficina de su tía alterada.
Laura sale disparada de su asiento.
— Que pasa Sofia, por qué estás así?. — pregunta la morena.
— Mamá... mamá acaba de desmayarse.— dijo soltando todo el aire.
— Cómo que se desmayó?!.— dijo saliendo apurada a la oficina de su mejor amiga pero antes pasó por el baño por alcohol y algodón.
Sofia volvió y avisó que detrás venia Laura.
La morena queda en shock.
— Que haces aquí?!. — dice y va a donde está su amiga.
Después de que Sofia saliera corriendo, Daniela tomó en sus brazos a la morena y la llevó al mueble más cercano que vio.
Daniela se hizo a un lado permitiendo que la morena pudiera hacer que María José cobrará conciencia.
Laura mientras ponía a que su amiga oliera el alcohol hablaba sin parar.
— Es que no lo puedo creer!.— decía.— Como es que después de tanto se te ocurre aparecer.— seguía, ignoraba la presencia de su sobrina.
— Yo sigo aquí.— se pronunció.— y no estoy entendiendo de que hablan.— dijo.
Ambas iban a hablar pero la morena comenzó a cobrar conocimiento.
— Que... que me pasó?.— dijo poniendo las manos en su cabeza.
— Te desmayaste mamá.— dijo su hija sentándose a su lado.
— Yo recuerdo haber visto a...— miró a todos los lados para ver si no estaba alucinando.— Es que no puede ser...— sus manos fueron a su boca cubriéndola.
— Alguien me puede explicar que pasa, por favor.— la voz de sofia volvía a llamar la atención de todas.— Quiero saber quien es ella, y porque te pusiste así de mal mamá.— miró a su madre.
— Mi amor, ella es...— No pudo seguir hablando porque laura fue quien lo hizo.
— Ella es Daniela Calle.— Dijo, sabía que Poché tartamudearia y nunca le diría.
La mini castaña tenía la mirada confusa, Calle... así se apedillaba ella, Daniela Calle era su otra mamá, mamá que las abandonó cuando ella aún era una niña, mamá que por lo que escuchó no le importo dejarlas, quien se fue sin decir nada, sin dejar nada, mamá por la que su otra madre había llorado y mucho.
— Sof...— la voz de Daniela trajo a la realidad a la pequeña.
María José había golpeado el brazo a Laura por haber sido tan imprudente.
Daniela se levantó de donde estaba para acercase a su hija.
— Tú... tú eres mi otra mamá?...— preguntó con la voz entrecortada.
— Sí mi amor, yo soy tu...— trago el nudo en su garganta.— Soy tu otra mamá.— se acercó hasta estar a su lado, la iba a tocar como ella lo hizo horas antes, pero la niña retrocedió.
Ambas morenas estaban confundidas, no entendían porque sofia se alejaba, si siempre quiso que volviera, pero ninguna sabia que la niña las había escuchado.
— No te atrevas a tocarme.— dijo con sus dientes apretados.
— Mi amor.— la voz de daniela anunciaba que estaba llorando.
— Y no vuelvas a decirme así!.— dijo mirándola y acercándose.— Sí te fuiste una vez puedes volver a hacerlo, no quiero que te acerques a mi.— dijo y salió corriendo de la oficina dejando a Daniela con el corazón roto.
Ella no esperaba una fiesta después de todo pero esto había pasado sus límites y la había destrozado, solo quería que la escuchara.
— Ya regreso con ella, debe estar confundida, ella nunca se comporta así, y nunca le mencioné como te fuiste.— le dijo a Daniela y ella asintió.
Su corazón dio un salto de alegría al escuchar a María José hablando con ella tan natural, ella no más asintió.
Continuará...
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