Cap 40: Las estrellas ya no brillan

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Desperté al escuchar a alguien vomitar, tenté la cama para darme cuenta que quien vomitaba era Allison, tallé mis ojos y cuando escuché que jaló de la cadena toqué la puerta.

¿Puedo pasar?

¡No! Luzco de la mierda -dijo con una voz cansada-

En la salud y en la enfermedad ¿no es así?

Cierra la boca mcfly, no creo que quieras verme vomitar

-reí al escuchar su voz irritada- Bien, si necesitas algo sólo dime

Necesito una cerveza -dijo antes de tener una arcada-

Bien, te traeré una preciosa

-Bajé las escaleras, al caminar por la sala me encontré con los chicos aún ebrios manoseandose con unas chicas así que sin saludar caminé directamente a la cocina donde se encontraba Michael comiendo pastel-

Buenos días viejo -dijo al verme-

¿Desayunando? -pregunté mientras abría el refrigerador-

Bueno, yo si me preocupo por mi cuerpo no como la bola de idiotas -rió-

¿Ya no hay cerveza? -pregunté mientras buscaba-

No galán, tomé la ultima lo lamento

¡Mierda! Ally me va matar

¿Tiene resaca?

Si, bebió demasiado anoche

Si gustas puedo llevarte a comprar, sólo ponte una camiseta antes

Claro -dije riendo-

~Subí las escaleras, al abrirla me encontré a Ally con el cabello humedo al parecer se había duchado~

¿Cómo te sientes preciosa?

De la mierda -dijo de mala gana- no he dejado de vomitar desde hace un rato

Iré a comprar algo para que te sientas mejor ¿está bien?

Gracias eddie -abrió sus manos buscando un abrazo-

Aunque creo que Tommy Lee estaría muy decepcionado de que no aguantes una noche de borrachera -dije riendo mientras la tenía en mis brazos-

Muy gracioso -dijo molesta- ¿Ya viste tu espalda?

¿Qué tiene mi espal...? -dije mientras veía mi reflejo en el espejo- Mierda, Allison parezco un maldito cristo -tenía la espalda llena de diversos rasguños y en el hombro algunos circulos verdes por las mordidas-

No es mi culpa que lo hagas tan bien, mi amor -dijo riendo-

Ok, sólo por eso te lo dejaré pasar

Ademas -dijo subiendo su blusa para mostrarme como tenía el escote lleno de chupetes- No tienes como quejarte si tú me dejaste así

¡Que rico! -dije frunciéndo la nariz-

No lo es, que nasty eres -rió- al menos tú puedes cubrirlos

Tú también, si no muestras a mis nenas nadie verá esas marcas

"Tus nenas" -dijo mientras hacia comillas con los dedos- no serán más tuyas si no me traes una maldita cerveza para la resaca

Iré corriendo -dejé un beso corto en sus labios- No tardaré

Toma -dijo aventándome una camisa- Ponte esto o me pondré celosa

A la mitad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora