Capítulo 3

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Charlie, con la ayuda de Vaggie, se encontraba ya lista para el clima frío, espero a todos, estaba ansiosa e impaciente por salir.

Después de unos minutos sus amigos estaban listos, todos ellos se encontraban como humanos, siendo para Charlie muy raro verlos así.

- Vaya amigos, ¿así se miraban cuando eran humanos?-dijo Charlie, mirándolos a todos, si vieniera de otra persona, para ellos resultaría muy incómodo, pero siendo Charlie ellos saben que ella lo hace más por curiosidad.

- Tu aún no estás lic, my dear- dijo Alastor, acercándose a ella y con un chasquido cambia la apariencia de Charlie a una más humana- te ves hermosa querida- dijo Alastor sonriendo.

Charlie se sonrojo- gracias Al- se acercó a un espejo y se miro, sus caballos seguían largos y de color rubio, su piel ya no era tan palida, su nariz y sus labios ya no eran negros y sus ojos eran de color azul claro- Woow, me veo muy diferente- dijo con asombro Charlie.

- Si, pero aún así te ves linda, ahora, ¿Podemos salir?, Tengo que presumir esta belleza cuanto antes- dijo Ángel haciendo una pose sexi, eso hizo reír a todos.

- Si vamos a disfrutar la nieve- grito con emoción Charlie.

Todos salieron por la puerta, Charlie sintió un viento helado, cubriendo sus mejillas, al salir pudo ver un paisaje, hermoso cubierto de nieve, unos enormes árboles los cuales se encontraban cubiertos de hermosas hojas color verde, muy diferentes a los que había en el infierno, un cielo azul hermoso y aunque no había sol,la nieve brillaba tanto que parecía pequeños diamantes, ver este paisaje por primera vez, hizo que unas lágrimas salieran de sus ojos. Sintió algo frío en su espalda, lo cual la hizo voltear mirando a Ángel, con una bola hecha de nieve en su mano.

- Vamos Charlie, tú querías saber cómo era la navidad, bueno esto es una bola de nieve y estás a punto de descubrir... LAS BATALLAS DE BOLAS DE NIEVE- grito por último Ángel, arrojándole la bola de nieve, ella como pudo hizo una y la lanzó, Ángel la esquivo y está cayó sobre Husk, el que encontraba en el camino, esto hizo reír a Niffty, Husk se levantó hizo una bola de nieve y la lanzó en lugar de caer sobre Niffty le dio a Vaggie, está también le devolvió y como dijo Ángel una batalla de bolas de nieve comenzó, todos reían y se divertían mucho, excepto Alastor el se encontraba en el pórtico de la cabaña disfrutando una taza de café, mirándolos jugar, sobre todo a Charlie mirandola reír, comportándose como si fuera una niña pequeña, lo hizo reír mucho, sin duda Charlie es un ser de luz, uno que la hace olvidar todos sus males, pero al mismo tiempo uno que lo haría volverse el ser más peligroso si ella resultaba herida, Mientras estaba con sus pensamientos una bola de nieve impacto con su cara, lo cual provocó que derramará un poco de café en su ropa, esto no le hizo daño en absoluto pero si lo enfureció bastante, miro a sus amigos y todos estaban callados mirándolo, no necesito preguntar sabía que fue ángel, ponia notar el brazo que quería ocultar, así que con un chasquido, Ángel quedó enterrado en la nieve por una bola gigantesca de nieve, esto hizo que todos rieran con fuerza, así se encontraban cuando escucharon una voz desconocida:

- Hola mucho gusto a todos, veo que se divierten- dijo una voz masculina, voltearon encontrandose con un joven de cabello castaño, ojos verdes, pero un verde oscuro, alto y de porte atlética, tenía unos esquí- disculpen por interrumpirlos, mi nombre es Dominic, venía a esquiar por aquí, pero escuché unas risas y bueno quise venir a saludarlos, un gusto saludarlos a todos- dijo el extraño, Charlie fue la primera en acercarse a él.

- Mucho gusto, mi nombre es Charlotte pero puedes decirme Charlie- dijo estirando su mano y el la estrechó con gusto.

- Mucho gusto Charlie- dijo sonriendo, Charlie le devolvió la sonrisa y presento a sus amigos.

- ellos son mis amigos, Vaggie- dijo, mientras ella saluda con su mano- Ángel- el cual también saludo, pero le guiño un ojo- Husk- el cual solo levantó su mano- Niffty- ella lo saludo con entusiasmos- y el es Alastor- termino Charlie, Alastor igual lo saludo, más por cortesía que por gusto.

- Encantado de conocerlos a todos, bueno yo me estoy ospedando en una de las caballas la número 13, para ser exactos, veo que ¿llegaron hace poco?- dijo Dominic, quién se encontraba mirando a Charlie, como si ella fuese la única con la que habla.

- Si llegamos hace poco y nos divertimos con la nieve, pero ¿Como lo supo?- pregunto con curiosidad Charlie, los demás solo los miraban y analizaban al sujeto frente a él, todos llegaron a la conclusión que no era malo, pero aún así ellos aún desconfían de el.

- Es fácil, su cabaña no está decorada, debería empezar con las decoraciones ya que faltan pocos día para navidad, si no me equivoco hoy es 20 de diciembre- dijo Dominic.

- Si, Chicos debemos ir por las decoraciones, debemos ver con que empezar- dijo Charlie , dándole la espalda a Dominic para hablar con sus amigos, Dominic miro por completo a Charlie, el creyó que lo hizo muy rápido como para que alguien se diera cuenta, sin embargo si hubo uno que se dio cuenta, de su escaneo, Alastor, quién no le gustó nada eso, así que camino hasta donde estaban ellos.

- Tranquila querida, creo que primero debemos eliger un árbol navideño, después ir al pueblo por las decoraciones y una vez tenerlo todo, empezar a decorar la cábaña, ¿Te parece bien my dear?- dijo Alastor, el miraba a Charlie, pero Dominic se dio cuenta una energía estraña proviniente de Alastor, decidío que lo mejor era irse.

- Bueno, yo no los detengo, fue un gusto conocerlos espero volver a verlos- dijo, yéndose del lugar y dejándolos solos.

- Claro nos vemos- grita Charlie- bueno amigos, como dijo Alastor, ¿Empezamos por el árbol de navidad?- pregunta Charlie.

- SI VAMOS- dijo Ángel, todos los demás asintieron, ella volteo a ver a Alastor.

- Gracias Al, espero que nos ayudes con el árbol- dijo Charlie mirando a los ojos, con un brillo en su mirada y con un encantador sonrojo en sus mejillas, según los pensamientos de Alastor.

- Claro que sí querída- dijo mientras tomaba un mechón de su cabellos y lo besaba.

- Bien vamos tortolitos, no se preocupen me aseguraré de que tengan un muérdago listo para ustedes- dijo Ángel, quién salió corriendo para evitar a Alastor, el lo escucho y una estática se apoderó del lugar, Charlie solo lo miraba confundida.

La navidad de Charlie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora