Maybe I'm In Your Maze (MinQi)

CAPÍTULO 19 SINCERIDAD

— Lo siento. — los ojos chocolate de la pelinegra la encontraron en el instante en que aquellas palabras salieron de su boca. — Te dije que no venía aquí a pelear y dejé que se saliera de control.

Hubo un momento de silencio que aparentemente ninguna de las dos supo manejar, así que dejaron que las consumiera una vez más por unos segundos que parecieron eternos para YuQi.

— Perdón... — fue lo primero que le respondió la chica después. La china se extrañó un poco, pero se quedó en silencio. — Fue mi culpa... es solo que... quería pelear contigo. Extrañaba tener cualquier interacción contigo, y pensé que sería divertido molestarte. — empezó a explicar Minnie con su voz entrecortada. No la miraba a los ojos.

— ¿Por qué pelear en lugar de escucharme y platicar de forma civilizada? ¿Por qué te empeñas en discutir siempre?

Minnie no respondió. Estaba simplemente parada frente a ella, mirándola de una manera que YuQi no podía analizar en ese momento, no tenía sus cinco sentidos para ello.

YuQi solamente pensaba en lo atractiva que Minnie lucía en ese vestido rojo.

Sacudió su cabeza. Necesitaba concentrarse.

— Supongo que es más fácil que enfrentar mis sentimientos. Siempre ha sido así para mí. — respondió la tailandesa de pronto, sacando a la china de sus pensamientos. — Iba a ser una pelea inocente y empecé a responderte con preguntas porque sé que odias eso, pero se salió de control y tienes todo el derecho de estar enojada.

YuQi iba a interrumpirla y decirle que todo estaba bien, que podían hablar tranquilamente y ambas explicar lo que les correspondía, pero la morena le señaló con la mano que se detuviera y la escuchara.

Entonces lo hizo.

— También tienes toda la razón en todo lo que dijiste, la que no ha exteriorizado sus sentimientos o explicado las cosas he sido yo, así que perdóname, de verdad. Lo que pasa es que no sabía cómo hacerlo porque no podía verte a la cara después de lo que te dije; te inventé una estúpida apuesta con Lisa porque soy una cobarde que tuvo miedo de Mic, porque soy una idiota, no sé cómo hacer las cosas y.... — la mención de Mic descolocó a la china, pero intentó no demostrarlo y decidió que era hora de pararla cuando la escuchó comenzar a hablar de forma acelerada y finalmente romper en llanto.

— Minnie. — le habló gentilmente. Se acercó y la tomó de las mejillas.

Sus pulgares trazaron su rostro borrando las lágrimas que se deslizaban desde sus ojos.

— ...Te lastimé. — la tailandesa suspiró y finalizó entre dientes. Cuando YuQi por fin pudo hacer contacto visual con ella vio la zozobra en su mirada abatida.

No pudo soportarlo...

La abrazó. Y Minnie se dejó envolver por ella.

YuQi pensó en lo mucho que le gustaba tenerla así de cerca; recordó la ocasión en que la sostuvo cuando su abuela falleció, recordó la sensación que experimentó cuando la vio llorar, era la misma que estaba teniendo ahora, quería apaciguar su dolor y borrar sus lágrimas.

— ¡Diablos! — maldijo para sí misma. —  No puedo verte llorar. Por favor, basta. — susurró en su oído y después se separó un poco para verla a los ojos.

Esos ojos le decían que había muchas cosas que se estaba guardando y le estaban haciendo daño, YuQi lo sabía porque la vio explotar y derramar esas lágrimas que probablemente llevaba reteniendo desde que la abandonó en el jardín esa noche; lo sabía porque escuchó su voz quebrada pedirle disculpas y aunque no entendía mucho, sabía que había demasiadas cosas detrás para que llegara al punto de decirse "cobarde" a sí misma.