Capítulo 29

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Llevamos un rato en el coche, no hablamos mucho y noto que está con la mirada perdida a través de la ventana, subo un poco más la música.

-Que pasa, cari?

Noto que me mira y sonríe

+Nada, por que?

-No sé, como estás tan callada, me parece raro...

+Es que estoy un poco cansada, nada más

-Bueno, si es eso, te dejo que estés callada... ¿Bajo la música?

+No tranquila, que no me molesta

Acaricio su pierna con mi mano derecha, y ella agarra mi mano con la suya entrelazando nuestros dedos mientras mira nuestras manos sonriendo.

-Te quiero mucho, lo sabes, no?

Me mira, sonríe

+A medias sólo

-Mira eh, que aparco aquí y te como a besos hasta que lo sepas!!

Se empieza a reír

+Eres muy tonta, cariño...

-Todo lo malo se pega, dicen

+Seguro...

-Oye querías ver a Javier o te daba igual?

+Prefiero así, sin verle... Pero vamos su madre me da un poco de pena, en el fondo les tengo un montón de cariño a ella y a mi suegro, y no me gusta que ahora la relación vaya a cambiar...

-Tu suegro?

+Bueno, me has entendido, Vanesa...

-Si, si, pero suena raro que lo digas delante de mi, no? Es como si dices... Voy a ver a mi novio, sabes?
Hola, que tu novia soy yo...
Pero bueno que ya está, no pasa nada.

+Soy tu novia? Me mira riendo

-No sé, dímelo tu...

+Eres mi amiga, en eso quedamos el otro día, no te confundas...

Veo como se ríe mientras lo dice.

-Idiota...

Paramos antes de llegar y ya cenamos.
Luego cambiamos y es Mónica quien conduce hasta llegar a Madrid del tirón.

+Te vienes a casa?

-No sé, es que mañana tengo que madrugar

+Pues te dejo en tu casa entonces

Le miro con cara de sorpresa, esperaba que me rogara un poquito más que me quedara a dormir...

-Estás segura que no te pasa nada?

+Que no, pero si madrugas, amor, hazlo tu sola.

Se ríe, y me río sin creer lo que estoy oyendo, no es normal que esté tan borde conmigo, además me apetece dormir con ella demasiado.

Llegamos a mi casa, y aparca a un lado.

+Pues hemos llegado, guapa

Me desabrocho el cinturón.

-Cojo mis cosas, espera.

+No, deja la maleta que ya lo coloco yo, además es todo mio.

-Da igual, pero me bajo mis cosas y cuando las lave y eso, te lo doy.

+Que no, si tengo que lavar yo, lo pongo todo y ya está.

-Bueno, como quieras...

+Hasta mañana y suerte en la reunión, no llegues tarde

-Eso espero porque no voy a tener distracciones, ya te contaré, gracias.

Salgo del coche, no le he dado un beso para despedirnos, ni me lo ha pedido, paso por su lado de la ventana y toco.
Baja el cristal.

-Dame un beso, no?

+Que nos ven Vanesa, ya lo sabes

-Pues nada, hasta mañana

No le di tiempo a que dijera nada más y me fui a casa, a Mónica le pasa algo conmigo y no sé el que, pero no me gusta este sentimiento.

Llegué, me metí en la cama al poco rato y en menos de cinco minutos me había quedado dormida, al día siguiente me despierto muy pronto, me ducho, desayuno y salgo para la reunión. Llego justo, y ya puedo ver a Rosa esperándome en la puerta mientras me dirijo hacía ella, con cierto miedo...

-Buenos días Rosa

+Buenos días, pasa, que te esperan.

Pasamos a la reunión, y también noto a Rosa rara conmigo, pienso entonces que ayer oyó a Mónica si o si, y le ha sentado mal que no se lo dijera, está muy borde conmigo y me habla lo justo, la tensión se nota, pero por suerte la reunión termina bien, y si no pasa nada podremos contar con su ayuda para un nuevo proyecto. Cuando terminamos son alrededor de las 9 de la mañana, y salimos fuera.

-Te apetece que vayamos a tomar café?

*No gracias, tengo otra reunión ahora

-Otro día entonces

*Claro

-Te pasa algo conmigo?

*Que me tendría que pasar, Vanesa?

-No sé, por eso pregunto...

*No me gusta que me oculten cosas, es eso, pero tu con tu vida puedes hacer lo que quieras. Estar o no con quien te de la gana, mientras que no afecte a tu trabajo como ayer, porque empiezo a cansarme de salvarte el culo siempre, vale?

-Yo te lo agradezco, Rosa, pero también es tu trabajo, no? Eres mi representante y te pago por ello.

*No te equivoques Vanesa, que hay muchas cosas que hago porque quiero, sino fuera por mi, no se que harías...

-Bueno venga, vamos a dejarlo, ya hablaremos, hasta luego.

Salgo de ahí

*Eso es lo fácil Vanesa, huir...

Me paro y vuelvo.

-Pero que quieres que haga, Rosa?

*Vanesa, sólo te voy a decir una cosa, no me gustaría que por ciertas personas eches a perder toda tu carrera profesional, ahora que podemos subir, piensalo, cada año estamos mejor, sólo eso, piensa en todo lo que puedes perder a cambio de que? De una tontería... De unas semanas? De unos meses? Entiendes lo que te digo?

-No me apetece hablar esto, en serio...

Y me voy, no quiero hablar con ella esto, empezando porque no la conoce y no sabe nada.

Oigo que me grita

*Vanesa, sólo una cosa!!

Me doy la vuelta, y viene hacia mi.

-Que pasa?

*Creo que es justo que sepas una cosa, yo hablé con Mónica cuando tuve que intervenir por las fotos, ya lo sabrás... Y me pareció muy raro que no quisiera pagar para comprar las fotos, con su rollo de que eso daba igual, que no era importante, sólo es una noticia como otra cualquiera, y no me pareció normal, de ahí que intente protegerte de ella y de todo, no pienses mal de mi, porque sólo quiero tu bien, te lo aseguro. Pero dime si no te pareció un buen momento para ella que de repente salgan unas fotos contigo, que no eres cualquiera por favor... Darían que hablar y a ella le vendría bien, no te quiero hacer cambiar de opinión, ten cuidado en quien confias, esto tenías que saberlo...

-Me tengo que ir, de verdad... Cuando sepas algo de la reunión avisame, vale? Hasta luego.

Me voy, sin saber muy bien como estoy, demasiada información en muy poco tiempo, entre lo de hoy de Rosa y ayer de Mónica...
¿Me están usando Mónica? No, no creo.
¿De verdad me quiere? Creo que si.
¿Sigue enamorada de su ex? Espero que no.
¿Hubiera sido capaz de dejar salir las fotos si no llega a ser por Rosa? Lo dudo...

Estoy hecha un lío... Y a todo esto no he hablado con Mónica todavía, llego a casa a las once, pero me vuelvo a meter en la cama, estoy sin ganas de nada y me apetece dormir.

Álgebra - VanicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora