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T/N entró en su ducha. El agua estaba a una agradable temperatura caliente, y después de ese día que había tenido, nada podría ser más agradable que esto.
Sin embargo, ese sueño perfecto se esfumó cuando sintió que un dolor crecía en su espalda, algo más que agua resbalaba.
"No otra vez", murmuró.
T/N alcanzó su espalda y tocó sus omoplatos. Siseó ante la sensación de tocar algo doloroso. Retrajo su mano y vio que no había sangre salpicada en su piel.
Como lo había hecho muchas veces antes, T/N extendió su mano hacia el estante que estaba clavado al lado de la ducha. Encima había una franela gris limpia.
Dejó correr el agua de la ducha por todas partes hasta que pasó de dura a blanda en su mano. Una vez más pasó su brazo alrededor de su espalda y de la herida ensangrentada que no podía quitarse.
Después de uno o dos minutos de frotar la sangre, se dio cuenta de que no había diferencia.
T/N suspiró decepcionado. Esperaba que no fuera tan malo hoy, pero después de despertar sus poderes de esa manera, era razonable suponer que esto iba a suceder.
Con mucho cuidado, desplegó sus alas blancas de ángel. Se extendían a los lados de la ducha, pero no le importaba adónde iban, siempre y cuando pudiera alcanzar su espalda.
Sin embargo, poder alcanzar su espalda ahora era mucho más difícil que antes, ya que sus alas no se apartaban de su camino.
'Vaya. Estupendo"
•••
Akeno seguía sonriendo en el sofá de T/N. Anteriormente había seguido a T/N a casa. Se sorprendió bastante al descubrir que él vivía aquí. No era exactamente un espacio habitable de alta calidad, pero por lo que podía ver, a T/N parecía gustarle bastante.
Ella se coló en su edificio de apartamentos y lo siguió escaleras arriba. Esperó a que él entrara a su apartamento y luego esperó un par de minutos.Desde fuera de la habitación, ella había escuchado la ducha abierta y decidió entrar a la habitación allí mismo.
Pensó que estaba siendo lo suficientemente sigilosa como para pasar desapercibida, pero su curiosidad la había vencido. Estaba justo afuera de su baño cuando él salió disparado y la inmovilizó contra la pared.
Ella estaba muy sorprendida porque pensó que él no la había notado. Pero ella pudo jugar con una respuesta coqueta.
Una cosa que había aprendido sobre T/N era que se disculpaba mucho, algo que se aseguraba de utilizar con frecuencia. Todavía no lo había avergonzado del todo, pero lo planeó. Era lo que su sádico interior deseaba... ver hasta dónde podía llegar con T/N.
En cuanto a por qué quería hacerlo, la verdad es que él le interesaba. Desde el momento en que lo conoció, él le había fascinado. Parecía fuera de lugar, y en ese momento, ella no tenía idea de cuánta razón tenía. Ahora que ella sabía quién era él, solo quería pasar más tiempo con él.
