Guillermo nunca tuvo problemas con los entrenamientos, siempre era puntual y llevaba a cabo un perfecto desarrollo de este, pero el día de hoy tenía particularmente dificultades para seguirle el paso a sus demás compañeros.
Desde que se levantó sin muchos ánimos y sin poder almorzar por las extrañas náuseas que amenazaban regresar cualquier alimento que ingeriera supo que sería complicado, pero ahora en su quinta vuelta a la cancha supo que era imposible. No podía ni lanzarse para atajar los balones porque el dolor en su cabeza al caer al pasto sólo iba en aumento. Tuvo que pedir el día libre y regresar derrotado a su departamento. Si había algo que odiaba era atrasar su avance para los futuros partidos tanto del club como de la selección.
Recostado en la cama y buscando entre sus recuerdos de los últimos meses se da cuenta que su ciclo de celo ha estado atrasado, irregular. Se preocupa, ¿cuándo fue la última vez que estuvo en calor? Recuerda que fue hace ya dos meses atrás, cuando la Copa América empezó y se encontró con Neymar en los baños. Maldición. No quiere pensar en ello pero sabe que no tomó las correctas precauciones ese tiempo, con ninguno de los dos alfas.
Ahora esta nervioso. No quiere mentalizarse pero hay una posibilidad, una posibilidad más grande de lo que le gustaría.
Sale de casa enseguida, caminando rápido a la farmacia más cercana. Durante el recorrido su cerebro crea miles de escenarios posibles y ninguno acababa bien.
Textea a Javier, uno de sus mejores amigos en la selección y también un omega que ha pasado por sustos de embarazo. Pide desesperado su ayuda aún cuando se encuentra hasta Alemania.
Cuándo llega a su casa y no recibe respuesta se adentra al baño, no queriendo retrasar más aquello.
Guillermo suspira y luego de unos minutos toma con miedo la prueba de embarazo que descansaba sobre el lavabo, no muy seguro de querer comprobar lo que ya temía. Con sus manos temblorosas y el sudor en su frente visualizo el indicador que marcaba positivo. Su omega interior saltaba de emoción, feliz con el bebé que cargaba en su vientre pero por fuera comenzaba a preocuparse a mayor nivel, recordando que estuvo con dos alfas este último tiempo. ¿Cómo sabría de quién era y cómo tenía que decirles que alguno de ellos era el padre?
Se maldice por no haber sido cauteloso y dejarse llevar entre las garras de esos estúpidos alfas. Desde que terminó la Copa, en ese vergonzoso partido donde Neymar y Lionel protagonizaron una riña cual lobos salvajes no volvió a tener contacto con ellos.
Así como salió del estadio reservo un vuelo de regreso a España, sin querer estar en su hotel para cuando acabará el juego. No quería plantearles cara, pues suponía que la razón de esa pelea era por su culpa y si era sincero consigo mismo, ni él sabía a quien elegir. Así que mejor no eligió nada. Dejó atrás todo como sí hubiera sido un simple sueño y trató de olvidarlos, pero no se podía engañar al corazón y menos al cuerpo que todas las noches pedía a gritos el calor y aroma a café y chocolate.
Tenía que tomar una decisión, una buena decisión. Tener a su hijo o abortar. Y si se lo quedaba ¿lo criaría sólo o esperaría hasta tener el examen de ADN y confirmar al padre? Sólo pensar en ello le daba dolor de cabeza.
Reviso su celular cuando lo sintió vibrar en el pantalón. Era Javier.
No pudieron hablar mucho, pues el contrario estaba en el medio tiempo de un partido amistoso. Agradecía que mínimo se tomó la molestia de revisar sus mensajes y llamar para saber cómo se encontraba. Lo único rescatable de la conversación fue un regaño por parte del menor.
"Sabes que va a ser difícil ocuparte de todo el embarazo sólo, así que si vas a tenerlo hazlo bien y diles desde ahorita que alguno de ellos puede ser el panadero de tu bimbollo "
Que gran ayuda. Bufa arrepentido antes de desbloquear a dos contactos conocidos. Lionel y Neymar.
En parte no quería hacerlo, pero si en la semana decidía continuar el proceso no sería tan cínico para darles la noticia de golpe.
Se decía que sólo les hablaría por el bebé pero en el fondo sentía la verdad, el deseo puro por verlos y esperar iluso que no estuvieran relacionados con otros omegas ya.
°°°
La situación en el Barcelona decayó con el desenlace de la Copa América. Dos de sus grandes jugadores habían estado teniendo disputas seguidas y en los entrenamientos y demás partidos no había conexión y fluidez. Los pases y asistencias entre ellos iban en picada y las jugadas solitarias cada vez eran más comunes. Se perdieron varios juegos por el orgullo que impedía a Neymar y Lionel soltar el balón y tratar de tirar a la portería en un gol errado.
La prensa ya empezaba a llenarse los bolsillos con titular las titular. Todos hablando de la nueva enemistad entre el argentino y el brasileño. Tantos años que se trataron como hermanos para ahora parecer némesis. La tensión en los vestidores afectaba al resto de compañeros y los directivos recibían queja tras queja de ambos alfas y eso tenía que parar ya.
Una semana antes de Navidad les obligaron a tomar vacaciones para alivianar el ambiente entre ellos y justo esa semana un mensaje que llevaban anhelando bastante tiempo llegó a su buzón.
N/A
Se que dije que la Copa empezó a finales de año pero vamos a hacer como que se dio en Septiembre pa que los meses me cuadren.
Los tres están en España porque ahí son sus correspondientes clubes del 2016 y que bueno porque así será mas fácil todo jajaja.💋
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¿Qué esperar cuando no estabas esperando nada?
FanfictionGuillermo odia a los alfas. Odia su aroma, odia su voz de mando, odia lo territoriales y posesivos que son. Odia su carácter, odia su porte y odia lo dominantes que son. Y sobre todo, odia a aquellos alfas que tratan de cortejarlo. Quién diría que t...