Tres Amores (Sujin/Kookjin/Taejin)

Min Yoongi parte 8 (2/2)

Él largo y aburrido horario de guardería por fin se ha terminado y Yeonjun corre feliz a los brazos de su joven padre.

—¡Lobito! —Jin lo carga en brazos y llena de besos sus suaves mejillas— ¿Te divertiste?

Yeonjun hace una mueca de disgusto y niega frenéticamente. Jin lo baja al suelo y después de abrigarlo salen de la guardería caminando en dirección hacia la parada del autobús.

—Appa...

Jin y su hijo van caminando de la mano apresurados antes de que se suelte a llover y el agua arruine el vestuario y maquillaje de Jin. Resulta que le pidió al fotógrafo que le diera permiso para venir a recoger a su hijo, Hoseok se lo pensó pues ya estaban a punto de empezar, él hombre había salió también y no quería que se retrasara más las últimas tomas. Pero luego de una linda súplica por parte del castaño, accedió.

—Appa... Appa... —el pequeño intenta llamar su atención mientras trata de seguir el paso apresurado del castaño.

Pero él no lo escucha, solo piensa en que tiene que volver lo más rápido posible antes de que su jefe vuelva a su casa y se de cuenta de que no está.

Yeonjun frunce su ceño y un puchero aparece en sus labios. Su papá está otra vez que no le escucha, cómo cuando está con ese señor Jungkook y deja de caminar abruptamente logrando llamar la atención de su padre, quien se gira preocupado hacia él.

—¿Que pasa, Yeonjun? —se inclina un poco para verle el berrinche reflejado en su pequeña y regordeta carita— ¿Te duele, algo? ¿Estás cansado?

El niño niega y se suelta de la mano del castaño.

—¡No quiero que vayamos con ese señor! —chilla y se cruza de brazos.

Jin se preocupa y se agacha hasta su altura para intentar abrazarlo, pero Yeonjun está molesto y tiene un gran orgullo que no cabe en su 1.25 de altura.

—¿De que señor me hablas, lobito? —no se imagina.

—De.., de ese señor —trata de explicarse pero se siente molesto y lloroso— que va, a nuestra casa en los días.., y en las noches...

Entonces comprende y trata de no sonreir.

—Ah.., hablas de Jungkook...

—¡Si! —exclama con una vocecita débil— ¡No me gusta porque cuando está él, tu no me escuchas!

A Jin se le encoge el corazón y la culpabilidad se refleja en su rostro. Está vez logra abrazarlo y lo consuela.

—Lo siento Yeonjunnie —admite su culpa y su falta de atención— y no pienses que no te quiero o que no me importas por no te escucho —trata de explicarle— es que Jungkook es.., es mi amigo y... —hace una pausa dudoso, aún no debería hablar de esto con su hijo— bu...bueno me agrada estar con él...

Él pequeño con los ojitos aguados le mira apunto de romper a llorar.

—¡Ay, entonces ya no me quieres!

Él jóven padre abre los ojos por lo dicho por su hijo y lo vuelve abrazar.

—Claro que no Yeonjun, yo a ti te quiero demasiado, eres mi hijo —le acaricia los cabellos y le besa la frente— cómo no te voy a querer... —le sonríe con cariño.

Yeonjun parpadea por la humedad en sus ojos y sube su mirada hacia su padre sintiendose ya más tranquilo.

—¿Y a ese señor?