20 de octubre.
Habían pasado ya aproximadamente 3 meses desde que estaba en Francia.
No había tenido alguna comunicación con mi familia debido a tantos talleres que enviaban y solo podían saber cómo me iba a través de mi hermana.
Ni siquiera podía hablar con Ariel.
Mañana es mi cumpleaños y aún seguía aquí en mi última clase.
Nos estaban recomendando obras que podríamos ver para socializar el ambiente de actriz/actor.
Siendo ya los últimos minutos para salir de esta clase todos estábamos ansiosos por irnos.
Creíamos que sería fácil la vida de actuar o yo que se.
Pero es complicada, más de lo que los famosos demuestran.
Me di cuenta que no solo tenias que aprenderte guiones y ya está.
También a como pararte en tal escena, como hablar en esa escena.
Era complicado.
Y estos meses habían sido como un grano en el culo.
Los profesores son geniales pero en los talleres podrían llegar a ser un tanto exagerados.
Pero no por que ellos quisieran si no por la comunidad del colegio exigía que tengamos más argumentos para aprender.
No nos la ponen fácil.
-Bueno chicos, espero pasen estos meses genial y se despejen un poco- sonrío el profesor.
Una vez que toco el timbre de salida salimos corriendo.
Aunque yo iba demorada por que hoy vendría a recogerme Leah pero me había pedido que le de unos minutos.
Ernesto y Tatiana habían tenido que irse antes a Boston por que tenían unas reservas por parte de las familias de ellos.
Así que estaría sola en la salida.
Estaba viendo el teléfono continuamente desesperada por que mi hermana no venía hasta que llegó.
-Porfin.
-Lo lamentó, mamá me a entretenido en la llamada- me explicó Leah- muévete, tenemos vuelo en 30 minutos.
Me subí enseguida y no sé cuánto tiempo duramos en el coche para llegar al apartamento e ir a recoger cosas para llevarnos.
A Boston.
Mamá había exigido que yo pase mi cumpleaños haya.
Y con mi hermana le habíamos metido una mentirita piadosa.
El único que sabía era Emilio, que nos ayudaba a saber si a mamá no se le daba por comprar vuelos y venir a celebrarme el cumpleaños.
Ahora estábamos subiéndonos al avión.
Nerviosas al ver a la familia luego de mucho.
Bueno a los abuelos y demás.
También verás a Nicolás.
Eso no me interesa.
Intentas simular que no, pero en realidad lo haces.
Esa frase me la había dicho Leah hace muy poco.
Hablábamos de Nicolas, creo que mi problema ahora era el.
No podía olvidarme de él.
Creo que de todos los problemas que pude haber tenido y los pude haber superado.