Dulces De Amor.

Capitulo 34

*Narra Jake*

Hoy vendría Ed a jugar a mi casa.. pero bueno, este día será especial estoy seguro, se llevará una gran sorpresa. Me puse a arreglar todo para después esperar a Ed, *ding dong* al fin llegó, estoy ansioso.

-Hola -dije emocionado- pásate.

-Hola, gracias.

-Y bien, ¿que quieres hacer primero?

-Mm no lo sé, ¿y tú mamá y tus hermanos?

-No están,me dejaron solo todo el fin de semana.

Pasaron las horas y creo que llegó el momento.

-Este.. ya me aburrí, *Narra Jake*

Hoy vendría Ed a jugar a mi casa.. pero bueno, este día será especial estoy seguro, se llevará una gran sorpresa. Me puse a arreglar todo para después esperar a Ed, *ding dong* al fin llegó, estoy ansioso.

-Hola -dije emocionado- pásate.

-Hola, gracias.

-Y bien, ¿que quieres hacer primero?

-Mm no lo sé, ¿y tú mamá y tus hermanos?

-No están,me dejaron solo todo el fin de semana.

Pasaron las horas y creo que llegó el momento.

-Este.. ya me aburrí, ¿Quieres helado? ¿Jugar un juego de mesa?

-Helado esta bien, también me gustaría jugar Battle Ship.

-Bueno, ve a la cocina por el helado mientras yo subiré por el juego.

-Esta bien.

Era obvio que cuando entrara a la cocina iba a ver lo que le tenía preparado, era un camino de pétalos hacia el refrigerador, y al abrirlo encontraría el helado con una nota que decía "Espero te guste la sorpresa, compré tu helado favorito, te quiero mucho, y disfruto mucho de tu compañía".
Subí a mi recámara por el juego de mesa, en eso Ed entró:

-Fue un lindo detalle lo que hiciste en la cocina -dijo sentándose en la cama mientras yo estaba enciama de mi closet tratando de alcanzar el juego. El closet se encuentra enfrente de la cama.

-¿Te gusto? -dije un poco esforzado- Espero que sí, lo hice con mucho caaa..ay!!
Tropecé, caí del armario cayendo encima de Edward, caímos recostados en la cama, y quedamos a sólo centímetros de distancia, sentía como respiraba, sentía su ritmo cardíaco, sentía lo nervioso que estábamos, en ese momento lo besé, no pude contener las ganas, lo besé muy intensamente como si no hubiera un mañana. Dios, fue el mejor beso que he dado.