Hilo rojo del destino

192 27 3
                                    

Shen Qiao había nacido con un don extraño y especial; podía ver el hilo rojo del destino que unía a las parejas. Al principio, el pequeño A-Qiao creía que era normal que las personas tuvieran un hilo atado a sus dedos meñiques, pero él mismo no podía ver el suyo. 

Su padre adoptivo le había sugerido que su hilo rojo se manifestaría cuando cumpliera dieciocho años. Pero Shen Qiao ahora tenía casi 30 años y su hilo seguía sin aparecer. 

Aunque Shen Qiao tenía este don, no había ayudado a nadie a "formar pareja". Casi todos tenían una pareja romántica a la que su hilo no estaba unido. Eran muy pocos los que estaban atados por el mismo hilo en ambos lados del cordón. Shen Qiao sentía emoción cuando veía parejas destinadas, esperaba con ansias que se revelara su amor verdadero. Pero parecía que se estaba tardando demasiado. 

Bai Rong era su amiga desde la adolescencia, ella decía estar enamorada del hermoso joven Shen, pero él simplemente sabía que su destino no era a su lado. Ella no le creía que podía ver los hilos rojos de las personas. Era algo estúpido creer algo así, demasiado infantil. 

- Si puedes ver el hilo rojo en los meñiques, ¡entonces sigue mi hilo y encuéntrame a mi pareja!

Shen Qiao tenía mucha paciencia con ella. La paciencia era otra de sus virtudes. 

✿ -------------------- ✿ 

El fin de otro año había llegado ya, y Shen Qiao no veía ninguna señal de su persona destinada. El día 31, Bai Rong había organizado una fiesta con los amigos de la universidad, que Shen Qiao en realidad no conocía porque había estudiado en el extranjero, pero aún así estuvo presente. 

Varios chicos se acercaban a él a coquetearle, con la intención de que pasara algo más, pero Shen Qiao no podía ver ningún hilo atado a su dedo y al de esos hombres. 

La fiesta se volvió aburrida para Shen Qiao. Se despidió de todos y muy cordialmente dio las gracias y deseó un feliz año a todos, pero se fue. No podía estar ahí. No quería.

El año terminaría en unas horas y él decidió sentarse en una banca del parque a observar el paisaje bastante marchito por el clima, pero iluminado por la decoración del mes. No deseaba esto, pero se estaba sintiendo muy solo.

En el centro del parque había una feria con mucha gente, parecía algo interesante, pero él simplemente no tenía ánimo para curiosear. 

De pronto, un agudo y efímero dolor pasó por su pecho y bajó hasta su dedo meñique. Shen Qiao pudo ver claramente su hilo rojo aparecer. Intentó seguir la línea, tal como había dicho Bai Rong, pero no llegaba a ninguna parte. 

Shen Qiao había esperado tanto por este momento, que no desistió y comenzó a seguir el hilo. Pero en ese parque había demasiada gente. ¡¿Cómo encontraría a su amor en este tumulto?!

Quedaba una hora para comenzar una nueva cuenta, un nuevo año. Shen Qiao anhelaba tanto poder estar con su persona destinada. Lo deseaba tanto que las lágrimas se comenzaron a acumular en sus ojos. Respiraba más rápido y ya ni siquiera sabía hacia donde correr. 

- Por favor, por favor...¿Dónde estás?

Luego de tanto caminar, Shen Qiao se sentó en una piedra que estaba detrás de unos árboles. Estaba tan cansado y mareado por tantas emociones, que simplemente quería dormir. La gente empezaba a correr para ver la cuenta regresiva del final del año. Y él se sentía lamentable.

El hilo rojo que estaba atado a su dedo comenzó a intensificar su color, como si fuera un recordatorio de que su amor estaba cerca. Estaba a punto de levantarse para seguir con su búsqueda cuando un hombre se paró justo frente a él.

Sus profundos y oscuros ojos se clavaron directamente en Shen Qiao. Tenía quizás cincuenta años, era bastante alto y tenía el cuerpo bien tonificado. Miraba a Shen Qiao con curiosidad y un extraño hilo de ternura.

Shen Qiao se puso de pie y en el camino de enderezar su postura, observó su hilo rojo. Este era el mismo que el de su mano. El hilo rojo del destino los unía. 

Shen Qiao sintió que sus ojos se abrían exageradamente. ¡Había encontrado a su alma destinada! Las lágrimas corrían por las mejillas de Shen Qiao y el apuesto hombre no pudo hacer más que enjugar esas lágrimas con su mano. Sin saber por qué, las lágrimas también se empezaron a formar en sus ojos. 

La urgencia de abrazarse se hizo presente, Shen Qiao no pensaba perder ni un segundo más y se acomodó en los brazos de aquel hombre. 

- ¿Cuál es tu nombre? 

- Yan Wushi, ¿y el tuyo?

- Shen Qiao

Shen Qiao no pudo contener su emoción. Había esperado tanto este momento y ahora que lo estaba viviendo, no quería perdérselo. 

El año lo comenzaron juntos. Desde ese día, su relación no hizo más que progresar. Shen Qiao había recibido este don en esta vida. Si lo tenía o no en la próxima, no le importaba mucho, lo que deseaba con su corazón era poder compartir con Yan Wushi todas las vidas que se le permitieran.  

✿ -------------------- ✿✿ -------------------- ✿  

Hola :)

Quería compartir aunque sea este pequeño fic por el final del año. Espero que hayan pasado una bonita navidad y les deseo de todo corazón que este próximo año sea maravilloso para todxs. 

No creo actualizar muy seguido, además ヽ(≧□≦)ノtenía unas historias que quería compartir. Con los hijos del YanShen y todo pero ¡se me borraron! 

No soy una persona muy tecnológica ㄟ( ▔, ▔ )ㄏ en fin.

Les agradezco muchísimo por haberme leído todos estos meses. Que les vaya bien en todos sus proyectos. Que puedan obtener lo que desean este año, o en el momento preciso (las cosas llegan a su tiempo). Que todo esté muy bien y que encuentren a la persona atada a su hilo rojo del destino. (。_。)

Les mando un abrazo con mucho cariño (≧∀≦) y que siempre les vaya bonito. 

*el fanart NO me pertenece, si alguien conoce al artista, puede dejarlo en los comentarios, gracias*


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 30, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

HE ELEGIDO AMARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora