• B E G I N • Kookmin // FanFic [+21].

Capitulo XI

Jimin y Jungkook día a día comenzaban a hacerse más cercanos. Jungkook otra vez comenzaba a tener pequeños gestos con Jimin. Todos los días colocaba una rosa blaca afuera de su puerta así cada vez que se levantará lo primero que viera fuera aquella bonita flor. Jungkook sabía perfectamente que Jimin amaba las flores. El pequeño castaño aún tenia problemas para gestionar sus propias emociones. No estaba mejorando realmente. A veces tenia ataques de panico muy fuertes. Al principio su terapeuta creyó que con el paso del tiempo y volviendo a retomar lentamente pequeñas actividades de la vida cotidiana Jimin comenzaría a mejorar, pero no funcionó. Jimin se seguía sintiendo como la mierda y los pequeños momentos de paz que encontraba en su casa eran cada vez menos. La opción de tomar pastillas era una posibilidad que dia a dia se hacia presente.

Y a medida que su condición iba empeorando, Jungkook se preocupaba aún más por él. Pero hubo un día en particular cuando todo se desmoronó completamente...

Era otoño Jimin estaba solo en casa. Jungkook había salido a hacer las compras y sus padres como siempre no estaban. El pequeño castaño estaba algo ansioso. Toda aquella semana se la había pasado llorando porque se sentía observado todo el tiempo. Jimin desconfiaba hasta de su propia sombra. Siempre que veía los espejos en su casa sentía que su reflejo no respondía a sus movimientos. Parecía como si tuviera vida propia.

Su "otro yo" todo el tiempo lo miraba con desprecio y enojo. Jimin se sentía demasiado incomodo cuando se quedaba solo. La ansiedad carcomía su cabeza todos los días. Oía voces riéndose de él en cada esquina. Lo ponían nervioso y hacían que comenzará a rascarse los brazos lastimándose sin darse cuenta. Su propio subconsciente estaba jugándole un mal rato.

Aquel día Jimin estaba en la cocina preparándose un sándwich para comer. Quería intentar distraerse mientras comía algo delicioso y veía una pelicula, pero su mente tenía otros planes. Mientras colocaba cada feta de queso en su pequeño emparedado sentía que alguien lo miraba. Otra vez se estaba sientiendo observado cuando no había nadie en la casa. Su respiración comenzó a agitarse y trató de respirar profundo, intentando calmarse. Siguió adelante con la preparación de su sándwich pero cuando fue en busca de la mayonesa que estaba en la heladera. Vió como una figura comenzaba a formarse en la puerta metalica de su refrigerador. Era su reflejo mirándolo de arriba a abajo y negando rotundamente lo que estaba haciendo. "Vamos a engordar si sigues comiendo así". Sussuró adentro de su cabeza. Jimin decidió ignorarlo mientras repetia en voz alta "no es real-no es real-no es real" una y otra vez para si mismo.

-Sabes muy bien que soy real. Soy tan real como tú.- Le habló su reflejo en la nevera.

-¡C-cállate!- Dijo Jimin temeroso de no poder ignorarlo.

-No. Ya me estoy aburriendo aquí. Hagamos una fiesta mejor.- Le preopuso divertidamente mientras comenzaba a bailar tiernamente.

-No, ¡¿q-qué crees que haces?! Deja mi cuerpo en paz y vete.- Le dijo Jimin deteniendose en seco. Parecia un loco hablando y movimiendose solo enfrente de su heladera, mientras discutía con su reflejo. Simplemente no estaba bien.

-¿Para qué?¿Para qué seas débil otra vez y terminen haciendote daño?- Dijo su reflejo molesto, tocando las fibras más sensibles de ambos. Aquel horrible recuerdo no era algo que se olvidaba de la noche a la mañana, y Jimin aun seguía sintiendose mal por todo lo que había pasado.

-Eso n-no es cierto....

-Sabes que lo es. Por tu culpa no pudimos escapar y mira lo pasó.- Le reprochó su reflejo.

-¿Mi culpa?- Cuestionó Jimin indignado, estaba harto.

-Si tuya, fuiste demasiado débil.- Dijo con aires de superioridad.