Sólo, quisiera desaparecer...

1. El incio del final

NARRA IZUKU

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- ¡Ah! - Me levanto jadeando y sudando a causa de un estruendo dentro de mi cabeza, se sintió tan real que provocó un mínimo dolor de cabeza. Casi siempre pasa pero aún no me acostumbro a ese ruidoso sonido.

Miro el reloj, aún no es hora de despertar para ir a la U.A, aprovecho el tiempo que me queda y salgo a fumar un rato a mi patio. "Débil, llorón, a nadie le importas, All Might te escogió por pena, ni siquiera controlas bien el OFA", Son las primeras cosas que suelo escuchar al despertar, con el paso del tiempo siento que tienen razón.

- Esto si que me relaja... - Digo en voz baja, casi sin abrir los labios, tal vez haya dormido toda la noche pero siento como si no hubiera descansado nada y mis propios ojos lo delatan.

Desde la ventana de mi habitación escucho el sonido de mi alarma, ahora sí que tengo que prepararme para ir a la U.A, apago mi cigarrillo y entro nuevamente a la casa de una forma perezosa, no me gusta mucho la idea de los dormitorios obligatorios en la U.A.

- Recuerda visitarme Izuku, te amo - Me dice mi madre despidiendose de mí con una gran sonrisa y ojos cristalinos, la abrazo, le doy un beso en la mejilla y me voy con una gran mochila y alrededor de tres o dos maletas. "Por fin haces algo bien, te estas yendo de casa, ya no serás un estorbo para tu madre" Habla una vez más la voz de mi cabeza, últimamente se han estado haciendo mas fuertes y gracias a esto estoy escuchando muchas más voces de lo habitual mientras camino, estoy cansado de todos esos insultos y comentarios así que empiezo a llorar.

- Callate, estoy cansado - Digo para que se detuvieran pero mi esfuerzo es en vano.

| ///////////////// EN LA U.A ////////////////// |

Sin darme cuenta llegué al salón de clases, en donde estaba más de media clase, Uraraka se dirije hacia mí con energía, sonrio de una forma falsa intentando hacer caso omiso a las voces que aún sigo escuchando solo que ahora me dicen "¿En serio crees que ella es tú amiga?, sabes muy bien que una persona como tú no podría tener amigos".

Uraraka me lleva junto con los chicos para conversar, siento como si tuviera miles de miradas clavadas a mi espalda vigilando el mas mínimo de mis movimientos y mi mas pequeño error. Siento que me falta el aire, estoy mirando fijamente a la pared, estático, quiero salir corriendo pero mi cuerpo no responde. "Ni siquiera sabes como fluir en una conversación, siempre dices cosas raras y aburridas, ¿Nada más sabes hablar de héroes y ya?" Despierto de mi trance gracias a una mano frente a mí, es la de Kirishima.

- Midoriya, oi, ¿Hay alguien ahí? - Me dice Kaminari con una expresion de confusión.

- Oh, lo siento, m-me quedé pensando - Es lo único que se me ocurre decir

- Te estabamos diciendo que si te parece una buena idea ver todas nuestras habitaciones junto con toda la clase - Mierda, ahora que digo, quiero pasar un buen rato con ellos pero... no me gustaria que alguien se percatara de mis cigarros, calmantes y mucho menos encontraran mi diario personal...

- Di-disculpen chicos pero, yo paso, he cambiado mi rutina de entrenamiento así que no estaré libre - Tal vez suene un poco estúpido pero es creíble.

- Oh, ya vemos está bien mido - Bro, pero si decides acompañarnos avísanos - Kirishima luego de haber dicho esto se dirigió a su asiento al igual que Kaminari, yo hice los mismo ya que Aizawa estaba a punto de llegar.

| ////////////HORA DE COMER//////////// |

Ya todos nos instalamos en las habitaciones, estuve un buen rato en mi habitación tratando de dormir aunque sea un poco, pero tanto el ruido de mis compañeros como la tristeza que repentinamente me suele abrumar no me dejan consiliar el sueño, mi mirada se estaba perdiendo hasta que...

- ¡¡Oi Chicos, hora de comer!! - Gritó Lida con la suficiente fuerza para que los pacillos se inundaran de su voz, yo también bajé, solo que sin intenciónes de comer. "No comas, te verás mas horrible de lo que ya eres, solo tienes que entrenar... ¡entrenar hasta que tu cuerpo colapse!" De nuevo otra voz, si no hago lo que ellas quieren no se callarán...

- Midoriya, ven, este es tu asiento - Me exclamó Kirishima el cual estaba encargado de organizar la mesa, de nuevo tengo que fingir una sonrisa y utilizar como excusa...

- L-lo siento chicos, comí algo que me habia preparado mi madre así que estoy lleno, además iré a entrenar - Luego de esto salí a los alrededores del edificio de los dormitorios para encontrar un lugar para entrenar... entrenar hasta que mi cuerpo colapse, no es mala idea " Además estan mejor sin tí, un plato menos que lavar "
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" ¿A esto le llamas entrenar? " " El débil siempre seguirá siendo débil " " ¡Entrena bien! " " Ni siquiera esto lo sabes hacer " No se callan... ¡¡no se callan!!

Luego de dos horas y media caí agotado...

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Esta historia es una de las varias que he hecho tiempo atrás que no he subido y de las cuales la mayoría de ellas han sido eliminadas, cualquier error o inconformidad en la trama se deben a eso aunque lo he vuelto a revisar para poder publicarlo con la mejor ortografía posible...

¡Gracias por leer! 😊