Un omega de experimentación del laboratorio 13 fue encontrado y Jeon Jungkook descubre el secreto detrás del éxito de la empresa de su padre, la verdad se debate entre la ética y el amor ¿cuál ganará?
Sin saber ambos, caen en las redes de algo más...
"Él va a odiarte cuando se entere ¿No has pensando en eso?" Cuestionó el omega mirando el paisaje del majestuoso que el río Han les brindaba, la brisa era fría; Invernal y casi insoportable.
"Cada día, era un riesgo que debía tomar." El alfa de bastón le respondió mientras ponía sus manos en el barandal de metal helado. "De todas formas Taehyung no te respetaba sino que te tenía miedo, sé que lo hiciste por amor a él y a tu sangre."
El omega asintió algo triste, la relación con su alfa era transparente los dos eran unos hijos de puta y no intentaba ocultarlo entre sí. "Taehyung nunca me tuvo miedo, siempre quiso ser como yo pero odiaba mis modos… no son los mejores pero si eficaces"
"¿Pedirme que lo matara era eficaz?" Cuestionó el alfa, en realidad estaba bastante disgustado con la dirección que las cosas estaban llevando.
El omega peinó sus cabellos blancos hacía atrás con la vista fija al río. "Nunca te pedí que lo mataras, murió porque la situación se salió de nuestras manos, yo solo quería que dejara esa estúpida idea de apoyar una futura guerra. Él era más que eso, no podía permitir que se saliera con la suya. Su muerte me dolió a mi más que a nadie, lo sabes."
"Nunca quise que eso pasara, lo apreciaba con mi corazón pero no pude hacer nada por él. Babel, el gobierno y los enemigos infiltraron espías… tanto trigo y paja por separar que no pude darme cuenta a tiempo"
"No fue tu culpa, ahora solo quiero redimirme. Le daré todas las respuestas a su clon, una identidad y una vida que mi cachorro nunca pudo tener"
"Le diste todo lo que quiso" el alfa le alentó, recordando la forma en la que Taehyung vivió como un chico de Seul y como el príncipe Dmitry de Rusia. El omega la tuvo difícil desde que nació, teniendo una vida ordinaria gracias a su padre y la responsabilidad de un regente por su abuelo quien desde muy temprano lo presionó para que fuera un niño de oro, hasta que lo rompió porque a veces tanto amor suele asfixiar hasta matar.
"Le dí lo que yo quería darle pero eso no quita que vivió una niñez terrible por ese maldito enfermo que tenía como hermano, después todo el daño que sufrió y la forma en como murió. Quizá sea bastante hipócrita de mi parte, también podría ser la culpa que me carcome pero solo la diosa luna sabe que yo no lo maté, solo lo quería hacer fuerte."
"Abandonamos lo que más amamos en la vida por un futuro para todos, cariño. No desmayes, alfa centauri está creciendo y pronto cumpliremos nuestro propósito. Todo por la vida"
"Todo por la vida" repitió aquella frase que se había vuelto su mantra.
"Padres" una voz les llamó con algo de susurró, ambos adultos se volvieron a ver a quien los llamaba.
"¿Dónde has estado?" Gruñó el omega, estaba demasiado preocupado y tenía un carácter bastante tosco como para ser de aquellos padres que abrazan a sus hijos por preocupación, al contrario. "Nos has tenido con la diosa en la boca" frunció el ceño acercándose al chico.
"Lo siento, el desgraciado de Taemin me sacó del proyecto y me tiró al río. Tuve que nadar lejos para que Wonho no me viera" dijo mientras caminaba hacia ellos, su ropa empapada y cabello rojo pegado a su frente por el agua. Su otro padre, el alfa se acercó a él y dejó un abrigo en sus hombros, el clima era inclemente. "Yo no importo, el omega. El clon, está en peligro, ya inició la operación por eso de deshicieron de mí. Hwasa logró salir de prisión por dos días pero pronto la van a enjuiciar, así que de seguro van a actuar hoy. Lo sé…"
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