Sabe A Cerezas

Capítulo 2 🍒

Que bonito sería si...

Una playa, al atardecer, el sonido de las olas: un concierto. El aire despeinando nuestras cabelleras. Sentados en la orilla del agua sintiendo como esta nos choca y besa suavemente nuestros pies. El canto de las gaviotas, como una ligera canción acompañando aquél hermoso momento.

Agarrandonos de las manos suavemente, como lo suave que es una pluma. Simplemente era él a la única persona que, por decisión del corazón amaría toda mi vida...

- Brandom -

- Brandom -

- ¡Brandom! -

Salté del susto; en el salón solo eran risas.

- Te has quedado dormido otra vez - dijo la maestra un poco disgustada por mí falta de atención

Y desde una esquina saltó la voz más preciosa de todo el salón...

- ¿De que se ríen? - dijo seco - Estúpidos - despreció por lo bajo

El tono de voz de Marck sonaba muy rudo, la cual los demás <supuestos> compañeros de aula reaccionaron con silencio. Era increíble la manera tan instantánea de su silencio que parecía echo a posta.

Era abrumador escuchar esas risas, ya más de una vez ha pasado, sinceramente me siento el muñeco de la clase. Gracias a Marck aún no he pasado a la face de bullyng <Fiuj> sino estuviese muerto.

Comenzábamos un nuevo curso en una preparatoria, recién habíamos pasado secundaría y acostumbrarse era más difícil de lo que imaginaba, aún más con este tipo de ambientes.

Luego de salir de la prepa un par de horas más tarde Mark me invita a caminar un rato, lo cual acepté facilmente <era más que obvia mi respuesta> sumaba que se sentía un poco alterado. Supuse que era por lo pasado en el aula.

La sensación de saber que alguien se preocupara por tu bienestar era otro nivel indescriptible, me sentía agradable y cuidado junto a Marck, sin dudas tenía motivos para fijarme en él, aunque negaba la posibilidad de algo correspondido ya que se revuelca con demasiadas chicas así que para mí era algo inalcanzable.

Cualquier segundo en el que Marck estuviese a mi lado era más valioso que la fortuna de Donald Trump triplicada. A su lado se respiraba un ambiente agradable, su mal humor había desaparecido por completo. Conversábamos de cosas muy aleatorias y de vez en cuando añadía que se sentía bien a mi lado. <No le atraes Brandom pero al menos es feliz a tu lado>.

La felicidad del momento duró bastante, era especial pero todo tiene su fin...

- Bram tenemos que irnos - dijo agitado

- ¿Porqué? - pregunté intentando obtener explicación de lo que pasaba, solo añadió que por favor no hiciera preguntas y que caminara más rápido así que no me quedaba otra opción que caminar agitado agarrado de su mano.

Huíamos de algo que para mí era un enigma adivinar, mirar a todos lados era completamente inútil, arbustos, arbustos, autos moviéndose y más arbustos, nada raro. Lo único que pobremente llamaba mi atención era un grupo pequeño de chicos que se encontraba reunido por ahí.

Acaso ¿era eso?

¿Porque?

Finalmente la duda invadió todo mi ser provocándome que aún más me calcomiera la cabeza de preguntas intentando buscar respuesta alguna.