Cαριтυlσ Cιиcυєитα&Ocho. Maratón 3/3

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Sus amigos se ríen, quizás les parezca cómico ver como Calum da medias vueltas intentando tranquilizarme, supongo, conmigo mientras yo pataleo y grito como loca. Al final se detiene y me suelta , haciendo que caiga al suelo, le miro y sigue parado delante de mi, con el semblante serio, me vienen las lagrimas a los ojos y algunas se me escapan, él parece sentirse mal por eso y me toma por la cintura levantándome, lo tengo tan cerca, que me estremezco, levanto la cabeza y me encuentro con su mirada fija en mi. En ese momento me olvido de todo, de los murmullos de los demás y sus intensas miradas, de Rubén gemiqueando.


- ¿Por qué?- le pregunto dolida- ¿Por qué a mi, Calum?

- No entiendo de que hablas

- Lo se todo. Sé que soy solo una apuesta para ti. - me alejo un poco de él- eso duele ¿sabes?


Él parece sorprendido por un momento, pero ya asimilado, solo me mira, diría que casi con tristeza y pena, aunque no se si quiero que él sienta eso por mi. Le hace seña a los chicos de que suelten a Rubén, ellos obedecen, es en ese momento que me doy cuenta que tienen un rollito muy extraño, pues a todo lo que Calum dice ellos hacen y siempre están cuidándole las espaldas. Veo como se marchan todos, Hugo solo se aleja un poco más y miro a Rubén, que parece estar indeciso, esta mal herido como para querer seguir peleando con Calum pero sé que no me quiere dejar sola. Le hago señas de que estará bien, y se marcha entre quejidos.


- Yo... no se que decirte

- No hace falta que digas nada- digo con rabia- ya sé todo lo que tengo que saber. Y es que no mereces la pena, eres un asco, Calum.

- Tu no lo entiendes- dice molesto

- Es que no hay nada que entender, Calum. Lo que hiciste conmigo están despreciable y... tan bajo, lo mires por donde lo mires no tiene explicación.

- Lo siento- susurra tan bajo que apenas y lo escucho

- ¿Qué lo sientes?- yo río sarcástica- no me hagas reír. Si lo sintieras, no me hubieras hecho esto ¿no crees?

- Sé que hice mal, pero... en verdad, no quería lastimarte- Calum se acerca a mi y me toma las manos entrelazándolas con las suyas- lo último que quería era herirte.

- ¿Por qué tendría que creerte?- pregunto soltándome bruscamente de su mano 

- Por que yo... siento cosas y... joder esto es más difícil de lo que pensé- dice revolviéndose el pelo- de verdad que no quiero hacerte daño

- Pues ya lo has hecho- digo enfadada, más que antes ¿Qué iba a decir? ¿Qué me quería? Si lo hiciese de verdad, no le costaría tanto decirlo- ¿Sabes qué? Esto no tiene sentido. Será mejor que cada uno vaya por su lado, y ya. Olvidemos esto. Olvidemos todo lo que paso entre nosotros, a fin de cuentas, fue todo mentira ¿no? - él abre la boca para hablar pero no le dejo- no me interesa lo que quieras decir, no quiero tus excusas, no quiero más mentiras. Ya me has lastimado lo suficiente. Esto se acabo, Calum.


Me marcho dejándole con la palabra en la boca, de verdad, que no quería escucharle más. No quiero estar cerca de él. No quiero que me haga daño. Él dice que es lo último que quiere pero, ¿acaso no lo hizo? ¿acaso no lo pensó al utilizarme de esa manera?


Llego a casa y evito hablar con mis abuelos, quienes me miran extrañada pues últimamente siempre llegaba con un sonrisa gracias a Calum. Me encierro en mi pequeña habitación, me tiro en la cama bajo las sabanas de pies a cabezas, queriéndome sentir segura, protegida de alguna manera, sollozo bajo, dándole vueltas a todo. Mi vida ha cambiado totalmente. Todo ha dado un giro que, ahora, me hubiera gustado que siga como antes.

Y Así El Tiburón Se Enamoro Del Pececito (Calum Hood Y Tu) -Adaptada-(Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora