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Cada día era la misma rutina de siempre; levantarme, ir al colegio, hacer tareas, dormir... excepto los fines de semana en los cuales hago tareas, interactúo en el grupo y demás cosas...

El chico llamado Alejandro, me pidió saber mi nombre; la verdad el era un chico bastante raro pero a la vez era gracioso con sus palabras llenas de frialdad, ironía y pereza... 

Él era una de las pocas personas que me quitaba una sonrisa, nunca supe porque si apenas lo conozco y me hace sentir esto. Un día, me escribió al privado y desde ese día comenzamos a hablar.

Comenzamos a conocernos más y con el tiempo nos fuimos haciendo amigos. Aunque se comportaba de forma rara a veces era un chico muy simpático, tenia un carisma que me despertaba la curiosidad en él.

Alejandro tenia la costumbre de decirme: "No te enamores de mi, solo seamos amigos". Y yo, es obvio que me encariñe con él muy rápido pero, solo lo veía como un hermano menor aunque yo era un año menor que él yo le había dicho que tenia 16 años de edad y que cumpliría 17 en febrero (mi fecha de cumpleaños no se lo escondí; 12 de febrero del 2007 pero le acabé diciendo que era del 2006 para que coincidiera con mi edad) él cumpliría 17 en marzo, lo cual me hace ver que soy 1 mes mayor que él. Aun así, nos tratábamos como hermanos, pero sentía que algo me ocultaba como si me quisiese decir algo pero no puede.

A pesar de ser una persona muy rara y de baja autoestima, es muy agradable estar con él. Siempre atento a mi. 

Con el tiempo, descubrí que le gusta mucho la química, la física y la ciencia. Era un chico brillante; siempre le decía que él era mi solecito. Y él me preguntaba: ¿Te cansarías de mi? ¿Soy molesto no es verdad? ¿Me reemplazarías con otro? ¿Me dejarás solo?. Una vez le respondí a esas preguntas con una oración que lo sorprendió mucho que no pudo creerlo, yo le había dicho: Alejandro, cariño... yo te amo mucho, hermano. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, eres una de las personas que hacen sonreír, ¿porqué he de cambiarte?. Alejandro, tú eres más brillante que el mismo sol, nunca te dejaré solo. Te considero mi familia, parte de ella, y a la familia nunca se le abandona, cariño mío. Te amodoro mucho, y eso nunca va a cambiar... Lo prometo, y siempre cuando prometo algo, lo cumplo.

Tardo un poco en responderme: ¿De verdad? Por favor, no digas cosas como esas, si vieras mi rostro ni siquiera me hablarías. No soy brillante como dices... no soy para nada brillante, tu lo eres. Eres perfecta, y yo no merezco a una amiga así; tan compasiva, tan amable, tan cariñosa, tan hermosa... yo no te merezco como amiga ni menos como novia. No bromees de esa manera conmigo, también soy un ser humano, ¿sabes? tengo sentimientos y me duele que seas tan linda conmigo... una basura como yo... sin futuro. Por favor, no desperdicies tu tiempo en mi.

"Jamás desperdiciaría mi tiempo. Mi tiempo es valioso para una persona tan valiosa como tú... te amo mucho... y en las buenas y en las malas estaré conmigo hasta que ya no me quieras, hasta que te canses de mi, hasta que ya ni quieras saber nada de mi, hasta que ya no me necesites... Yo estaré allí para ti siempre, quieras o no niño" 

Esas palabras lo dejaron sin habla por unos minutos... pero luego me respondió con un "Gracias..."

Con el paso de los días, me di cuenta que él tenia muchas cosas... pero más miedo, miedo a perder a las personas que están con él, miedo a quedarse solo, miedo a que la oscuridad lo consuma... y yo, no es por ser amable que soy todo un amor con él... es porque algo me dice que esté con él, que hable con él, que nunca lo deje solo... tenia ese sentimiento de protegerlo aunque no vea su rostro o no lo conozca en persona.

Un sentimiento de necesidad de estar con él surgía en mi interior... un sentimiento tras otro. Muchas cosas comenzaron a rondar por mi cabeza... no sabia que hacer en situaciones cuando él estaba mal porque si trataba de animarlo se bajoneaba más.. y a veces sus palabras no se entienden muy bien y mas cuando habla en metáforas...

Pero yo, no lo dejaría así por así... nunca lo dejaría. Estaría con él hasta que él se cansase de mi.

Te Perdí...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora