vi el amor en tus ojos (CHAENNIE

(10) mereces alguien mejor

Después de lo que había pasado con Rosé, el resto de mi fin de semana fue bastante aburrido.No he hablado con Mino desde el día que me trajo a casa, estaba actuando un poco extraño, así que pensé en darle un respiro.Tampoco hablé con Rosé, no quería hacer el papel de chica pegajosa y aburrida. Decidir que las cosas entre nosotros sucederían naturalmente. Sin presiones ni nada por el estilo. Al presionar a Jongin, nuestra relación sucedió más rápido de lo que esperaba. Y eso me hizo salir con él sin conocerlo realmente. Aunque sabía que Jongin y Rosé son personas muy diferentes, prefería que siguiera siendo así. Aunque no estaba pensando en salir con ella desde el principio, solo quiero conocerla más. Me alegro de que se esté abriendo poco a poco para mí.

Pasé el resto del domingo terminando algunos deberes y viendo algunos episodios de The Vampire Diaries. Pronto el lunes no se hizo esperar.

-No olvides lo que haremos esta tarde, Jennie – escuché decir a mi padre en la mesa del desayuno.

- ¿Qué hacemos? - cuestioné confundido. Mis pensamientos estaban demasiado lejos para prestar atención.

- ¿Cómo te olvidaste? Levantó la voz como prueba de su molestia por mi falta de interés en el asunto. - Recojamos a Ella en el aeropuerto. Tu abuela te traerá hoy.

- ¿Ella vuelve hoy? - Pregunté sonriendo, y papá asintió. Eso me hizo muy feliz, no la había visto desde el funeral de mi madre hace dos años. Ya debería estar un poco más grande, seguramente su presencia me animaría.

- ¿Por qué Mino no vino hoy como siempre? - preguntó mi padre terminando de untar su mermelada en el pan.

Adoraba a Mino. De hecho, siempre fui el único chico que toleraba a mi alrededor. Lo vi como un hijo que la vida no le dio, estoy segura que si no fuera gay le encantaría que fuera mi novio.

-"Creo que ha estado ocupado", mentí. La verdad es que no sé cómo responder. Mino caminaba de manera extraña, y más extraña que de costumbre.

Pero odiaba entrometerme con sus cosas, él me diría si era algo serio. Siempre me contaba todo, y yo a él. Porque así es como funciona nuestra relación. Somos mejores amigos, amigos de por vida como hermanos.

Terminé el resto de mi café dándole un beso a mi papá en la frente y agarrando el resto de mis cosas al salir. Afuera vi a Mino saliendo de la casa, somos vecinos. Por eso siempre pasaba más tiempo en mi casa que en la suya. Tan pronto como me vio, vino hacia mí.

- Buenos días lo saludé sonriendo como siempre. Bien, mi Mino había vuelto.

-Buenos días respondió en el mismo tono.

- ¿Adónde se fue el resto del domingo?

-Me he estado informando de algunas cosas –respondió vagamente. Yo no quería, pero la curiosidad me obligó a preguntar:

-¿Que cosas?

-Sabes que las vacantes para el equipo de fútbol se abren una vez al año en nuestra escuela, ¿verdad? - me respondió con otra pregunta. Asenti. -Pero de vez en cuando siempre hay un chico que decide dejar el equipo, y abren otras oportunidades. Ayer hablé con Félix y hoy habrá otra prueba. Decidí que voy a participar.

- ¿Quieres unirte al equipo? - No oculté mi sorpresa.

-Sí, ¿recuerdas que dijiste que sería un gran portero?