(3) Anteojos

174 27 2
                                    

En realidad no hablé mucho con ellos hoy. Justo ahora al final de las clases con Joy dándome información sobre esa chica. Me sorprendió que ni siquiera vinieran a buscarme cuando desaparecí en las primeras clases. Ni siquiera trataron de animarme, solo querían meterse con la chica. Ni siquiera me preguntaron si estaba bien.

- ¿Es genial jugar a tener amigos? - Escuché a Rosé murmurar a mi lado.

- ¿porque, lo dice?pregunté confundido.

-"No nada", respondió ella, poniéndose de pie con cuidado y recogiendo su bastón. -Si no te parece mal, mañana antes de la primera clase en la biblioteca podemos hablar de trabajo.

-Bien, pero mucho antes de escuchar mi respuesta ya se había ido a la puerta.

Seguí el mismo camino por el pasillo. Por supuesto, tampoco Necesitaba comentar sobre las miradas y las bromas.Creo que se quedaría así por unos días, luego otra cosa nueva llamará la atención de estos tontos.

- Jennie! Escuché una voz detrás de mí y vi a Jongin venir hacia mí dirección. -¡Necesitamos conversar!

- ¡No tengo nada más que decirte! - dije acelerando mis pasos hasta llegar al portón.

- Por supuesto que sí, no puedes dejar que nuestra oferta termine por un caso menor como ese - me agarró del brazo y tiró de mí para mirarlo.

-Jongin, te dije que me dejaras ir. No quiero escuchar tus excusas, ni darme cuenta aún más de lo equivocado que estaba contigo, dije tratando de jalar mi brazo que estaba apretando más fuerte. Jongin... Prácticamente gemí que me estaba lastimando.

- ¿Por qué no haces lo que te pide? - una mano apareció de repente sobre la que estaba Jongin con la suya en mi brazo. Me giré para ver a Rose. ¿Pero qué diablos estaba haciendo?

- ¿Como es? - Preguntó Jongin aún sosteniendo mi brazo. - ¿Quién eres tú?

-"Simplemente demuestras lo patético que eres actuando así". Para empezar, no tuvo la decencia de respetar a su novia. Y ahora te pide perdón por mero orgullo.Porque si en algún momento la hubiera amado de verdad, no habría tenido la capacidad de traicionarla. Ahora culpa a su instinto masculino y sigue regañando. Solo para satisfacer su ego, que parece ser de los que están en las alturas - Las palabras de Rosé hicieron que Jongin me soltara suavemente y lo vi cerrar sus manos en puños.

- ¿Nunca te dijeron que no interfirieras donde no estabas invitado? -Vi a Jongin acercándose y entrecerrando lentamente los ojos. -Espera, creo que te he visto antes. ¿No estabas con Lalisa en la cancha ese día? ¿Por qué llevas esas gafas de sol? Ni siquiera hace sol. ¿Quieres crear algo de estilo?

-Jongin, déjala en paz. ¿No puedes ver, idiota? - Pregunté sujetando su otra muñeca. Me miró confundido antes de dirigir su mirada a Rosé nuevamente. De repente se quitó las gafas y las tiró y luego se echó a reír.

- ¿Estas ciega? - preguntó riéndose. - Amigo, esto es demasiado. Estás ciega y te quedas ahí con ganas de hacer algo.

- ¡Cállate Jongin! - Pregunté indignado. Con cada comportamiento que vi, Jongin demostró ser una persona totalmente diferente a la persona con la que salí todo este tiempo.

- Mira, no me gusta pelear con chicas, menos con discapacidades. Estás de suerte- recogió su mochila que se había caído en el alboroto. Estaba a punto de irse, pero antes se giró hacia mí. - Aún tenemos que hablar, creo que es bueno que no me evites, dijo saliendo de la escuela. Me acerqué a Rosé que estaba sentada en el suelo, creo que le tenía miedo a todo.

vi el amor en tus ojos (CHAENNIE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora