𝑴𝒐𝒖𝒏𝒕 𝑬𝒗𝒆𝒓𝒆𝒔𝒕 𝒂𝒊𝒏'𝒕 𝒈𝒐𝒕 𝒔𝒉𝒊𝒕 𝒐𝒏 𝒎𝒆
Feyre Stark, descendiente de una gran casa cargando con el futuro de su apellido, solo está destinada a una cosa. Casarse.
Cuando se reencuentra con Rhaenyra Targaryen descubre que sus s...
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Tres años después - La reina solicita nuestra presencia para la celebración del segundo año de el príncipe Aegon - avisó Gwayne a su esposa, la cual descansaba en un sillón de su habitación - se celebrará en dos días - finalizó sentándose a un lado de Feyre
- Se que ese niño va a ser un problema - comentó mirándolo - lo presiento - agregó haciéndolo sonreír
- Es tu sobrino - dijo el Hightower riendo un poco - y tu príncipe - agregó haciendo que Feyre girara sus ojos
- No puedo creer que un niño tenga más derechos que yo - reclamó recargándose completamente en el sillón
- ¿qué presientes de este? - preguntó Gwayne cambiando el tema, señalando el vientre de Feyre
- Va a ser mi niño de oro - respondió acariciando su (algo crecido) vientre
- ¿qué te hace pensar que es un niño? - preguntó mirándola con cariño
- Solo lo sé - respondió
Feyre tenia cinco meses de embarazo. Un par de años después de su boda, quedó embarazada, lo cual la Stark pensó que iba a ser su perdición, pero algo le decía que ese bebé la iba a mantener con vida.
A pesar de las bajas expectativas, su matrimonio iba bien. El hecho de que se conocieran desde pequeños había ayudado un poco. Se sentían como amigos, a pesar de ser un matrimonio con un hijo en camino, tenían una amistad, cosa que un par de Targaryens no creían que podría suceder.
- ¡A King's Landing entonces! - exclamó Gwayne con felicidad, haciendo reír a Feyre - prepararé las cosas y a Jax - mencionó saliendo de la habitación
- ¡Intenta que no te muerda de nuevo! - gritó recordando la vez que Jax mordió a Gwayne por intentar tocarlo
Feyre se sentía un poco abrumada. Vería a Rhaenyra después de tres años. No sabia si había cambiado, pero sus sentimientos por la Targaryen no habían cambiado, en lo más mínimo.
