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Por fin, Jabu le había enseñado a su primo a tasar bien.

El rato que habían estado solos, se lo habían pasado practicando, pues cómo Noni era nuevo no conocía el arte de la tasación.

Aún hi habiendo practicado, al castaño le costaba bastante, pero había llegado su momento de demostrar lo que valía en una situación real.

Ari y Cristinini entraron hablando alegremente por la puerta, un olor a Caramelo y gasolina inundo casi de inmediato toda la tienda, haciendo que las dos vacas ahí presentes tuviesen arcadas.

- Bienvenidas a empalas Tanizen, donde todos sus sueños se aran realidad ¿Qué desean? -dijo intentando disimular lo mucho que le molestaba el olor de esas dos.

La gasolina era algo que todos amaban oler, pero como toda la tienda tenía olor a canela debido al jefe, el instinto alfa de Cristinini le hacía soltar muchas más feromonas haciendo que te pudieses ahogar en aquel ambiente.

Por otro lado, la vaca siempre había pensado que aquellos omegas que olían a caramelo, una de las cosas más típicas entre los omegas, eran prepotentes, simplemente odiaba ese olor.

- Wow, qué bonito se ve todo esto -dijo la rubia apoyándose en el mostrador para luego mirar a Noni- ¿Y tú quien eres?

- Me llamo Noni señorita ¿Y usted? Bueno, ustedes mejor dicho.

- Yo me llamo Cristinini y esta es Ari -saludo la alfa medio sería, estaba sonriendo, pero no se notaba nada en su voz, cosas de robots.

- Bueno, el jefe ahora mismo no está, pro si quieres las puede atender mi primó -alardeo Jabu pasando un brazo por el hombro de Noni.

La rubia achicó los ojos escaneándolo con la mirada, casi parecía que fuese ella la que tenía un ojo biónico en vez de su acompañante.

Olfateo un poco el ambiente y arrugo la nariz al notar que el olor del castaño era más dulce que el suyo, sin duda alguna no le gustaba que le quitasen protagonismo.

- Mmhh... Prefiero esperar a Tani, es más profesional -dijo resignada y se cruzó de brazos.

Noni solo pudo agachar las orejas, intento evitar que su aroma cambiase, pues no quería que se notase el hecho de que le había hecho daño ese comentario.

Eso fue notado por Jabu el cual frunció el ceño y con una sonrisa forzada, pues estaba enfadado, miró a Cristinini.

- ¿Y tú, Cris, quieres que te atienda mi primo?

- Oh, es que no he venido a comprar nada, solo había venido a acompañar a Ari, de hecho... Yo he quedado con Carola, así que me tengo que ir.

Se despidió con la mano para salir por la puerta, un silencio incómodo reino la sala hasta que el rubio entro por la puerta más serio de lo normal, cosa que no se pasó por alto para aquel omega con olor a Vainilla.

Algo se le removió por dentro al ver cómo su amigo dejaba de estar serio para comenzar a sonreír en cuento, vio a Ari.

No sabía que era eso, solo sabía que le dolía incluso más que el comentario despectivo de la única chica de la sala.

- Hombre Tani ¿Qué tal? Estas guapo hoy he -la chica le guiño un ojo al alfa, como solía hacer, este solo rio.

- Lo mismo digo señorita Ari, en fin ¿Qué tienes para venderme? -le dedicó una sonrisita.

Sin duda el omega se estaba comenzando a sentir mal, muy mal, ya le había pasado antes, pero sin duda esto era peor, y aún no había descubierto el porqué de ese malestar.

『 ¿𝐦𝐞 𝐡𝐚𝐬 𝐦𝐞𝐧𝐭𝐢𝐝𝐨? 』[пѳпїзёп]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora