『 ¿𝐦𝐞 𝐡𝐚𝐬 𝐦𝐞𝐧𝐭𝐢𝐝𝐨? 』[пѳпїзёп]

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¿Api? -fue lo primero que dijo el híbrido.

El medio lagarto noto el tono de confusión en su voz y solo se separó más de él, se limpió la boca y frunció el ceño un tanto molesto consigo mismo.

- Joder, perdón, no lo he hecho pensando, ha sido por instinto propio -mintió, y obvio que iba a mentir, no quería quedar en ridículo delante de su amigo.

- Eso significa... ¿Qué no te gusto ni nada por el estilo? -le miró el omega con sus mejillas teñidas de rojo por la escena de hace unos segundos.

- ¡Pues claro que no! Ha sido cosa de mi Alfa, ya sabes que yo soy 100% heterosexual -rodó los ojos prosiguiendo con su mentira- ¿por qué, acaso yo te gusto?

- ¡No, no! Era solo por saber -jugó con sus manos nervioso, era un momento incómodo.

Los dos se quedaron en silencio, ninguno se miraba, pues la situación ya era lo suficiente incómoda como para que encima cruzasen miradas.

El corazón del alfa estaba partido en mil pedazos, el saber que su amor platónico no le correspondía era doloroso, ya le costaba el mantener a su Alfa calmado para que no intentase crear un lazo con el omega del menos como para que ahora le pasase esto.

Por otro lado, Noni estaba confundido, hace un año abría jurado disfrutar de aquel momento, de poder corresponder aquel beso o de incluso iniciarlo él.

Pero algo en aquel pueblo le había hecho cambiar de parecer, algo con nombre y apellido, pero eso él aún no lo sabía, lo único que sabía era que los sentimientos que tenía anteriormente por aquel pelinegro se habían desvanecido.

- Api, c-creo que debería irme... Te puedes quedar en la casa si quieres -se tocó el cuello por inercia, recordando que le había quitado la marca falsa- Por favor, no le cuentes de la marca a nadie, y menos a Tanizen.

Se levantó del sofá nervioso dirigiéndose hacia el baño, tendría que pasar la noche en casa de Jabu, en la de Auron o a malas ir a la de aquel Rubio que había dormido la noche anterior con él.

Se miró en el espejo del baño y suspiro, estaba triste, triste porque estaba seguro de que todo lo que Api le había dicho era mentira, estaba seguro de que ese beso no había sido cosa de su alfa, sino más bien de su corazón.

Estaba seguro de que había destruido a su mejor amigo, que le había roto el corazón y todo por cambiar de parecer.

Se comenzó a maquillar, sin ganas, iba a ir a la tienda, pues tampoco sabía donde más ir.

Llegó a la tienda y entro por la puerta de detrás, pues Tanizen estaba despidiéndose de 8cho por la principal.

Entro sin hacer mucho ruido y se apoyó en el mostrador cansado.

Al rato llego al Rubio y se le quedó mirando de brazos cruzados, no estaba molesto con aquella vaquita, pero le había molestado que se fuese con aquel otro Alfa.

A quien iba a engañar, le mataba por dentro que desprendiese aquel olor a Césped recién cortado

- Hasta que por fin te dignas a venir a trabajar, vaca puta -dijo burlón- No te pago porque te la pases en tu casa besuqueándote con tu alfa.

La vaca le miro alterado, levantando las orejas por inercia.

- ¿CÓMO SABE ESO? -al ver que era broma se alteró incluso más- D-digo... ¿Quién hablo de besos? A demás, él no es mi alfa.

- Perfecto, pues cuando conozca a tu alfa le diré que te estabas besando con un idiota -cruzo el mostrador y se puso a su lado, aun de brazos cruzados- ¿Quién es tan imbécil para besarse con alguien teniendo ya un alfa?

- Yo... - hablo desanimado el híbrido.

Su aroma se estaba tornando otra vez agrio, aquella situación le había amargado el día y seguramente le que quedaba de semana

Las intenciones del rubio no eran dañar a su amigo, pero eso había logrado, no podía caer rendido ante un omega y mucho menos si el omega era su empleado.

- Deja el drama Vaca, es solo un beso -rodó los ojos aun haciéndose el duro.

- Lo sé... Pero no le he correspondido ¿Y si le he hecho daño? No quiero hacerle daño a mi amigo -se tomó de la cabeza.

- ¿No le has correspondido? Pensaba que tenías una relación abierta o algo así -se sentó en una silla que había detrás del mostrador y le miró- Bueno, es su culpa, él te ha besado.

- Eso también lo sé, pero... Es raro, hace menos de un mes seguramente le abría correspondido, ¡incluso estaría feliz! Algo en este pueblo me ha cambiado.

Tanizen se quedó pensado en las palabras de su amigo, quería ayudarle a resolver aquel dilema, no se podía permitir el tener trabajando a un depresivo. Más sabiendo que la alegría de su local dependía de la vaca.

- ¿A lo mejor es por tu Alfa? No sé, tendrías que hablar esto con él -suspiro, no sabía que más podía hacer.

- Eso hago (NAAAA BROMITAAA)

- Pero él no está aquí, solo le tengo a usted en este momento -dejo de apoyarse en el mostrador para mirar al contrario- Aun así, gracias por intentar ayudarme jefe, lo aprecio mucho -le dedico una sonrisita.

El rubio se le quedó mirando, un pequeño rubor cubrió sus mejillas y ni siquiera sabia porque, miró a otro lado rápidamente y automaldiciéndose.

- Pues claro que te ayudo subnormal, no me puedo permitir pagarte un psicólogo o algo así -este comentario hizo reír a la vaca.

- Aun así gracias.

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🧝‍♂️-