CAPITULO 4. Finjamos

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Mientras se miraban fueron interrumpidos.

—¡Oh! ¡Aquí están los recién casados!— entrando un hiperactivo joven con una extraña mascara naranja, los hizo reaccionar de inmediato.

—El gerente agradece que por fin una pareja casada se hospede aquí, ¿saben cuántos estafadores han tratado de fingir?, esos se van a la calle rápidamente, por eso el Jefe del hotel los invita a cenar esta noche, aquí dejó sus invitaciones en la mesa y Tobi se marchará alegremente— el extraño trabajador después de decir esas palabras y dejar las dos pequeñas hojas cerró la puerta dejando al par de chicos un tanto desconcertados y a la vez a Hinata sonrojada.

Para romper aquel silencio la chica habló tímidamente —C-creo... que nos confundieron como...— antes de terminar su ex compañero la interrumpio abruptamente.

—Con que volvió el tartamudeo— sonrió de medio lado, apesar de que su tartamudez seguía siendo la voz dulce y tierna de hace años —...y sí Hyuga nos confundieron como esposos— pensó él, tenía mucho sentido el como había sido tratado la recepción y que el estupido de su amigo no le había dicho... lo mataría o esa era la idea, pero una luz ilumino su cerebro, si no fuera por ello no estaría en esta situación con Hyuga Hinata y así la podría convencer en quedarse para ... ¿En qué estaba pensando? Frunció el seño, no podría estar encaprichado aún con la oji luna, aún después de 10 años sin verla seguía sacando su lado sentimental.

—Sasuke... Uchiha-san— sonrojada lo distrajo de sus pensares y se dedicó a verla —...con gusto fingiré ser s-su esposa para que no le hechen del hotel. Escuché que hay un derrumbe no hay manera de volver así que...—

El joven pelinegro se quedó atónito por lo dicho de su ahora empleada ¿Estaba soñando?¿Alucinando? ¿Era acaso posible? ¿Cómo puede ser tan buena?, él no había pensado sobre ello, para calmar su emoción se levantó de la cama y la miró de frente —Acepto tu propuesta Hyuga, con una condición...—

Ella levantó la vista para él y lo miró fijamente. El sonrió con malicia tal vez ella era la mujer que lo atraía , la mujer que no olvidaba, pero eso no le quitaba su verdadera personalidad, tenía otro plan en mente, es decir ¿qué Uchiha desaprovecharía está oportunidad?

—Hasta que termine mis vacaciones, te quedarás conmigo y así obtendras la firma de este papel— levantó el papel de la cama, su hoja para la aceptación del trabajo, ella quedó pasmada.

La chica se sonrojo —¿A-aquí?, ¿Con usted?— se cuestionó.

El asíntio secamente —¿Qué esperabas al fingir ser mi esposa?—

La pequeña y delgada mujer agachó la cabeza para pensar un poco, tal vez no pensó mucho esa parte, solo que no había de otra —De acuerdo pero ... nada de insinuaciones Uchiha-san— murmuró desviando la mirada avergonzada.

El chico le cayó un balde de agua fría, aquellas palabras, ¿lo cachó en su plan?, no era tonta eso lo sabía, ambos competían por excelencia en la escuela, pero no permitiría que destruyera su orgullo —¿Aún piensas que me atraes? por favor Hyuga, ya te superé— cruzó sus brazos y cerró los ojos —Solo quiero pasar tiempo con mi ex compañera, además para insinuaciones cualquier chica vendría a mi— dijo orgulloso para elevar un poco su ego, sin embargo no le gustaba decir eso frente a ella algo le hizo sentir incómodo.

La pelíazul sintió una pequeña pulsada en su pecho por lo dicho del joven, bueno al menos quería pasar tiempo con ella eso le alegró, levantó la vista para ver al pelinegro —Esta bien Sasuke-kun pasemos tiempo juntos fingiendo que soy su esposa— le dio una sonrisa.

El joven abrió los ojos y se encontró con una sonrisa, una sonrisa única que le hizo palpitar el corazón, su rostro frío solo se dedicó a contemplarla y admirarla. —Finjamos — le extendió la mano.

Ella notó ello, sus palabras la intimidaron un poco, pero algo en eso la hizo sentirse segura y estrechó su mano casi sin pensar —S-sí —

Ahora solo quedaría hacer un plan para la cena de esa noche.

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Continuara

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