capítulo 5

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Ya era sábado, estaba haciendo un día de bastante calor y me gustaba la verdad, dónde yo vivía la mayoría del tiempo hacia frío y muy de vez en cuando hacía calor, por eso aprovechaba esos días para salir, estar sin un saco todo el tiempo y ver los atardeceres.

Los cachorritos que ya no están tan chiquitos jugaban con mis chanclas mientras yo estaba en el sillón hablando con mi mamá por video llamada.

-Mamá nos estamos cuidando bien - repito por centésima vez.

-Pero es que mira como se puso tu hermano.

-Te aseguro que no fue por ejercicio sino por algo inesperado.

-¿Qué fue?.

Empecé a reír un poco y mi madre frunció un poco el ceño.

-¿A qué viene eso Agnes?.

-Mamá...¿papá está contigo?.

-No, fue a la empresa para ver cómo iba todo.

-Mamá, Daniel al fin salio del clóset.

Él se quedó pasmado, se llevó una mano a la boca y grito de felicidad.

-¡¿Cómo?! ¡¿Quién fue?!

-Mmmm...¿te acuerdas de Cristian Darnet?.

-Si - abrió más los ojos - ¡¿Fue él?!.

-Si mamá, son pareja.

-¿Por qué él nunca nos contó de esas cosas? ¿Cómo es posible que no sepa la orientación sexual de mi propio hijo?.

-Sabes cómo es él muy reservado, ma.

-Lo se, pero un poquito de confianza no hace daño, querida.

-Jajajajaja.

-¿Y? ¿dónde está?.

-Dani salió a caminar un poco y su novio está acá, es que no tiene dónde quedarse.

-Llámalo, lo quiero conocer.

Su cara era de completa felicidad y entusiasmo.

-Cuñado!! - lo llame y tardo unos segundos en aparecer.

-¿Pasó algo, cuñis? - me pregunta.

-Tu suegra quiere hablar contigo.

Se puso pálido pero pálido, me rei al ver si expresión y mi mamá siguió con su tono de felicidad, cuando reacción por fin se me acercó con nerviosismo, le dije a mi mamá que le iba marcar en unos minutos para que Cris se calmara un poco. Colgué la llamada.

Lo mire y estaba muy nervioso, que pesar.

-Les vas agradar muchísimo más de lo que ya lo hacen.

-Pe-pero y si no les gusto como pareja para tu hermano.

-Les vas a encantar, de eso no tengo duda.

Lo pensó un momento y asintió, se arregló un poco el pelo para estar presentable.

Cuando iba a marcar escuché la puerta abrirse y cerrase, Dani había vuelto de su caminata y nos mira, yo muestro una sonrisita de angelito.

-Ahora que hiciste Nes - me dice.

-Mamá quiere conocer y hablar con tu novio - comenté -. Aprovechando que tú acabaste de llegar, hablen los tres.

-¡¿Les dijistes?!

-Cuando le conté lo que te paso ayer, empezó a insistir y no tuvo elección - me excuse aunque era la verdad.

-Carajo...

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